Capitulo 17

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"Es el tiempo de elegir soñar despierto

Es el tiempo de vivir queriendo "


Meredith


Le hubiera gustado que alguien le hubiera advertido que cosas de este tipo podían pasar, hubiera sido maravilloso si alguien le hubiera dicho que besar a Daniel iba a ser lo suficientemente bueno como para dejar su mente en blanco por un momento, besar a Daniel era como una experiencia totalmente nueva , en el pasado había besado a chicos pero siquiera sentir el contacto de los labios de Daniel con los de ella era como sentir que estaba viva , era como sentir que estaba segura de todo el mundo exterior.

Meredith llevó sus brazos con cuidado a la nuca de Daniel para profundizar aun más el beso y también para tener contacto con su piel, por alguna extraña razón sentía que sus dedos necesitaban hacer contacto con Daniel, comenzó a arañar suavemente la nuca de Daniel justamente donde le nacía el cabello y lo que recibió como recompensa fue un gemido, no había sonido más maravilloso que ese, le hubiera encantado continuar explorando los puntos que hacia gemir a Daniel pero él se separó de ella de manera un poco brusca , la mirada que él le ofrecía no era la típica mirada que siempre le ofrecía como cuando se reunían a desayunar era tan diferente que no sabía cómo interpretar , tampoco tenía idea de que decir en ese momento.

- Daniel...-comenzó Meredith.

Daniel apartó su mirada de la de ella, entonces él se había arrepentido de lo que había acabado de suceder y la verdad no lo culpaba, si ella fuera él también estaría apenada de siquiera pensar en besar a una chica corriente como ella.

- La bola de pelos puede quedarse –la voz de Daniel se escuchaba mucho más ronca de lo normal – solo no tiene que tocar mis cosas y estará perfecto todo.

- Genial – no tenía muchas ganas de hablar con nadie en ese momento.

Se sentía humillada como si Daniel hubiera usado el beso en su contra como si él hubiera adivinado que uno de sus oscuros deseos era eso , probablemente solo estaba demostrando quien de los dos siempre iba a tener el control.

- Descansa Meredith – dijo Daniel depositando un suave beso en su cabeza ¿Qué mierda significaba eso? ¿Por qué Daniel actuaba tan raro? ¿Cómo debía interpretar estas acciones?

Meredith observó el lugar por donde Daniel desapareció de su vista, estaba tan confundida primero se había sentido humillada pero ahora estaba sumamente confundida, ¿Qué debía hacer ahora? , ¿Pedirle una explicación? , sacudió su cabeza, claramente esa no sería una buena idea, era mejor seguirle la corriente de ahora en adelante.

Esperó un poco más en ese lugar para aclarar sus pensamientos aunque claramente no había logrado hacer nada con cada minuto que pasaba se sentía mas y mas confundida ¿Por qué había dejado que Daniel la tocara? Las cosas eran de por si complicadas entre ellos y ahora esto.

- Las cosas no pueden ser peores – dijo para sí misma.

Cuando el frio de la noche fue suficiente para obligarla a entrar lo primero que hizo fue ir al baño que compartía con Daniel y lavarse la cara, de alguna manera necesitaba quitarse el sentimiento de necesidad que sentía, la necesidad de reclamarle a Daniel por más, pero se contuvo y se conformó con el aroma de el jabón picante de Daniel, definitivamente él se había duchado unos minutos antes. Seguramente para lavarse el momento anterior. Luego de eso fue a su habitación y se encontró con el perrito durmiendo plácidamente en la cama, seguramente Daniel lo había sacado de su habitación a patadas, estúpido Daniel; apartando a Daniel de sus pensamientos se cambió de ropa y se acostó en la cama dejando a su nuevo amigo al lado de ella. Esa noche Meredith no soñó absolutamente nada.

The contract of my lifeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora