Dulce Venganza [Chaesoo, Jenlisa Y Bbangsaz]

Capitulo 14

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POV OMNISCIENTE

WINE: Entonces... ¿Son esas tres? No parecen una gran amenaza. — le preguntó a Kai mientras miraba fijamente a las Manoban, quienes seguían en lo que parecía un gran trance mientras veían a la chica que recién había llegado a la fiesta. — ¡Kai! — le gritó al hombre que también parecía impactado con la llegada de Danielle Marsh, pero él, a diferencia del resto se veía asustado de la presencia de la chica. Kai volteó a mirarlo aún distraídamente.— ¿Conoces a esa mujer? — Kai negó rotundamente con su frente levemente sudorosa. —

SOMI: ¿Entonces porque te comportas de esa manera? — preguntó la hija del magnate juzgando la actitud del hombre. —

KAI: No, no. Por nada, señorita, solo me recuerda a alguien que no pensé que vería nunca más. — respondió para ahora sí, regresar a la compostura y mirar a su jefe. —

Wine y su hija Somi se miraron dudosos de la respuesta del hombre, pero no ahondarían en sus asuntos porque sabían que no les correspondían y además, ya tenían suficientes con los suyos.

Estaban en el patio de la mansión, alejados lo más posible de los invitados, pero de una manera en la que no pudieran parecer sospechosos. Estaban en una ronda Wine, su hija Somi, Kai y tres guardaespaldas de Wine. Desde lejos podían observar como la fiesta se desarrollaba de manera óptima, pero sus objetivos eran claros y a partir de ahora se encargarían de desarrollarlos de manera eficiente.

Habían llegado de imprevisto, Sunhee los recibió cordialmente a pesar de saber que la familia Jeon no era para nada bien recibida en la su casa por petición de sus hijas, pero no era que tuviera oportunidad de mostrarse en contra, debido a que Wine, además de ser de alta sociedad y bastante elegante, era un gran socio de Kim's Corporation.

SOMI: Mi padre te preguntó algo, Kai. Responde. — pidió severamente denotando su actitud prepotente. Somi era la mano derecha de su padre, quien la había entrenado y criado en el mundo del narcotráfico y los robos, el cuál los había llevado a estar donde estaban. Obviamente, todo era secreto. —

Básicamente, Somi era una máquina de matar, idear y destruir todo lo que estuviera a su paso y por sobre todo, obtener todo lo que deseaba sin restricción alguna.

KAI: Oh, sí, señor. — respondió nervioso. Sí, quizá en la mansión Kim, Kai era un magnate intocable pero fuera de esas cuatro paredes, no era más que un patético títere al que usaban como carnada. Lo odiaba pero sabía que de lo contrario, habría muerto hace mucho tiempo en manos de los Jeon. — Ellas tres son las hermanas Park, son las que han estado arruinando los planes estos meses. — señaló a las tres mujeres que se encontraban charlando tímidamente con Danielle y Haerin. —

WINE: ¿Cuáles son sus nombres? —

KAI: Esa de ahí es Jisoo. — señaló a la mayor de las Manoban. — Ella es una insolente intrépida que no mide lo que hace. Es una completa neandertal. — la rabia de la golpiza que Jisoo le había propinado aún seguía en su sistema. — Esa es Minji, la menor. — la señaló. — ella es muy inteligente, demasiado para mí gusto. — le advirtió a Wine y este solo asintió con sus labios fruncidos hacia abajo. — y esa perra, es Park Lisa. — señaló a la chica que odiaba con todo sus ser. — Es la que se entromete en mi camino cada vez que Jennie y yo estamos avanzando. — mintió vilmente a lo que Wine solo asintió con una postura firme y despreocupada nuevamente. — Tenemos que deshacernos de ellas, antes de que arrui... — una cachetada impactó contra el rostro de Kai, dejándolo atónito. Wine le había propinado una enorme cachetada. — ¿Señor? — miró a Wine impactado, pero este parecía irritado por la incompetencia de Kai. —