En el presente, Milo terminó de contarle la historia completa a Flori, quien no mostró gran sorpresa y parecía no importarle mucho el tema.
Flori:
Vaya, entonces la vida no fue justa contigo. Bueno, ni modo.
Milo:
Gracias por decirme algo motivador, ¿sabes?
Flori:
Ay, qué asco. ¿Cómo crees? Eso es para pendejos. Solo levántate y supéralo. Igual estás en el sendero para traerlo de vuelta, ¿o me equivoco?
Dijo la bruja, mostrando una sonrisa.
Milo:
Eres muy lista.
Dijo el brujo, recibiendo de respuesta una sonrisa maliciosa de la bruja.
En ese momento, el joven Andrew encontró a los dos en el pasillo donde estaban.
Andrew:
Oigan, ustedes dos, ya es hora de ir al sendero. Ya todos estamos preparados para invocar la puerta que nos dará acceso.
La bruja verde y el brujo clarividente se voltearon a ver y solo sonrieron levemente.
Milo:
Bien, mascota, es hora de que entremos al sendero de una buena vez.
Flori:
No perdamos tiempo entonces.
Dijo la bruja sonriendo, y así los tres caminaron al centro de la biblioteca, donde estaba todo el grupo preparado para iniciar el ritual.
Jesús:
Dios, qué lentos son. Me voy a volver más viejo por esperarlos.
Haru:
¿Acaso nunca sabes cuándo callarte?
Dijo Haru, mirando a Jesús con desprecio y molestia.
Jesús:
¿Por qué no me cierras la boca con un beso entonces?
Dijo el brujo en tono burlón, mirando a Haru con superioridad.
Ryan:
Bueno, bueno, ¿ya está bien, no? ¿Vamos a abrir la puerta al sendero de una vez?
Milo:
Estoy de acuerdo con Ryan.
Jesús:
Bien, entonces vamos. Pónganse en círculo de una vez para iniciar con esto.
Todos los presentes, sin cuestionar nada, se posicionaron en círculo en el centro de la biblioteca.
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Villa Aldres: Secretos de Aquelarres
Science FictionEn el misterioso y pequeño pueblo de Villa Aldres, un antiguo brujo llamado Jesús Ravenwood, que había perdido sus poderes de forma inexplicable hace mucho tiempo, se encontraba organizando su biblioteca mientras la luna estaba en su punto más alto...