Caos Entre Los Pines.

⚜️Cap.9⚜️

DIPPER POV.

Continuaba hablando con ______ en el bosque, casi al anochecer. La conversación era tranquila, pero sentía que había algo más que quería decirme. Justo cuando estaba a punto de preguntar, escuchamos risas y voces familiares acercándose.

—¡Dipper! ¡Tía ______! —gritó Mabel, corriendo hacia nosotros con Wendy, Candy y Grenda siguiéndola de cerca.

—¡Lo logramos, tía! —dijo Mabel, muy alegre, mientras sacaba un enorme mechón de cabello de unicornio—. Esta vez los unicornios no se negaron, pero aun así los golpeamos —añadió riendo.

Me quedé confundido y miré a ______.

—¿Para qué necesitas el cabello de unicornio? —pregunté, recordando para qué lo habíamos usado la última vez.

Mabel le entregó la enorme cantidad de cabello, y ______ guardó silencio por un momento, observando el cabello en su mano. Luego, sonrió.

—Creo que ya no lo necesitaré —dijo, y luego nos miró a todos—. Vamos a entrar a la cabaña. Voy a hacer una cena espectacular.

Todos sonrieron y celebraron, pero yo me quedé con la espinita. Algo no cuadraba, y sabía que tenía que averiguar qué estaba pasando, era evidente que ella también estaba ocultando algo.

[...]

Habían pasado varios días desde que Mabel trajo el cabello de unicornio, y no podía quitarme de la cabeza la sensación de que algo no estaba bien. Desde entonces, había estado buscando indicios y observando a todos los que habitaban la casa, especialmente a Aylin.

Cada mañana, me levantaba temprano y tomaba notas de cualquier cosa fuera de lo común. Aylin, en particular, me parecía sospechosa. Siempre estaba sonriendo y parecía demasiado perfecta. Decidí que tenía que vigilarla más de cerca.

Una tarde, mientras Aylin estaba en la cocina preparando la merienda de las mellizas, me acerqué disimuladamente.

—¿Necesitas ayuda con algo, Aylin? —le pregunté, tratando de sonar casual.

—Oh, no, gracias, Dipper. Todo está bajo control —respondió con una sonrisa.

Me quedé un momento observando cómo trabajaba. No había nada obviamente extraño, pero algo en su comportamiento me inquietaba. Decidí seguirla discretamente durante el día.

Me inquietaba bastante que cuando yo seguía a Aylin o alguien más que tuviera un comportamiento extraño desaparecía del lugar cuando la persecución se podía considerar evidente.

Pronto noté un patrón: Aylin siempre estaba buscando a Stan y aprovechaba cualquier oportunidad para que ambos estuvieran solos. Le hablaba demasiado, y aunque Stan parecía no darle importancia, yo sabía que esto era algo que a mi tía ______ no le gustaría para nada. Anoté esto en mi libreta, asegurándome de registrar cada detalle.

Los días pasaron y mi vigilancia constante no cesaba. Sabía que tenía que ser cuidadoso para no levantar sospechas. Mientras tanto, seguía pendiente de cualquier cambio en el comportamiento de Aylin y de los demás. No podía sacudirme la sensación de que algo peligroso estaba por suceder.

[...]

Estaba en mi cuarto, rodeado de notas y diagramas, tratando de conectar los puntos de mi investigación. La puerta se abrió lentamente y Mabel asomó la cabeza.

—¿Dipper? —dijo en voz baja, entrando al cuarto—. ¿Qué estás haciendo?

—¡Mabel! —exclamé, sorprendido—. Estoy investigando algo. ¿Qué necesitas?