Capitulo 13 - "African Safari"

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Capítulo 13

Omnisciente.

La conversación de ambos amigos había sido descubierta y escuchada por Crista, quien ya estaba segura que su amiga se moría por su hermana. Sin hacer algún ruido, regresó arriba en el cuarto que compartía con la pelirroja, quien ya se encontraba con su pijama puesta a punto de acostarse a dormir.

— ¿Y qué tal estuvo ese agarrón de manos? — preguntó la mayor.

— ¿De que hablas loca? — preguntó la menor con confusión mientras se sostenía de la pared. Estaba demasiado borracha.

— De ese agarrón de pierna que le diste a Karime, yo lo vi no lo alucine — respondió la mayor.

— Ah, eso — dijo la menor mientras la risa le ganaba; su hermana no comprendía el motivo de tales carcajadas — no sé wey, solamente le agarré la pierna y ya me tomó la mano — continuó riendo.

— No me niegues que te gusta Karime — soltó la mayor, haciendo que su hermana parara de reírse.

— Claro que no wey, no me puede gustar Karime acabo de terminar una relación con Barbara — dijo seriamente mientras caminaba tambaleante a la cama.

— No digas mamadas Gala, eso que tiene que ver — contestó su hermana molesta.

— Claro que tiene que ver — dijo mientras se quedó unos momentos pensante — mi corazón todavía le pertenece a Barbara, si Karime es muy pero muy guapa, tiene un cuerpo muy bonito y... — se quedó callada.

— ¿Y? — preguntó su hermana, haciendo ademán a que la menor continuara.

— Tiene unos labios muy lindos que llaman la atención — dijo Gala, la mayor sin esperarse esa respuesta levantó sus cejas — pero yo ahorita no quiero nada con nadie.

— No te estoy diciendo que tengas algo con ella ahorita mismo, date la oportunidad de conocerla, es una persona maravillosa. Dale una oportunidad de demostrarte que daría todo por ti — dijo su hermana mayor.

— Claro que le doy una oportunidad — dijo la menor, acostándose completamente mientras todo le daba vueltas — pero como amiga — continuó rompiendo el silencio que ella había creado.

— Neta que eres insoportable, ojalá no te arrepientas — respondió su hermana mayor dando fin a la conversación mientras salía de la habitación.

Un silencio abrumador se instaló en la habitación, Gala estaba siendo cuerda según lo que ella creía, pero no podía evitar pensar en el contacto que tuvo con la pelinegra, como su mano acariciaba sus dedos con delicadeza, el toque de su pierna que era tan suave como una nube. Cerró los ojos con la intención de despejar su mente de tales pensamientos, quedándose en un profundo sueño.

Una alarma la sacó de su sueño, era la del teléfono de su hermana mayor quien se encontraba acostada a su lado.

— Gala, despiértate ya, nos vamos en 1 hora — dijo su hermana moviéndola por su hombro.

Muy a su pesar, se levantó del como colchón en dirección al baño de la habitación, en donde tomó una ducha que logró despertarla. Su humor no era el mejor, pero solamente por que se trata del festejo de su sobrina daría su mejor cara, se colocó un conjunto deportivo negro de una sola pieza, dejando el cierre unos centímetros abajo de su cuello. Unos lentes obscuros redondos ayudarían a tapar las ojeras que con el poco maquillaje que se aplicó no pudieron disimular. Por último, unas botas negras que le daban un par de centímetros más de altura.

Tomó una gorra con el logo de NY por si el sol estaba demasiado fuerte y bajó a la sala de estar, en donde se encontró con casi todos esperando estar listos.

La Oportunidad | GarimeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora