Reúno todas mis fuerzas y me acerco a tomar su orden brindándole una sonrisa, me sorprendo al sentir que mis labios se extienden ya había olvidado como sonreír y no es que lo haya meditado mucho, pero verlo así, solo, me impulsa sonreír le, nuestras miradas se cruzan y de nuevo veo en esos ojos tristeza, puedo reconocer su dolor y al parecer es uno muy grande, el me mira por unos instantes hasta que baja la mirada y con voz baja pide su café, hoy será solo café, regreso con su orden y nuevamente le brindo una sonrisa, él se remueve un poco incómodo en su lugar, como si no le gustara que lo observen y es cuando percibo que él ¡¿está?!.. ¡Él está!, verlo en ese estado me sorprende, tanto que inmediatamente mi sonrisa se borra de mi rostro, mi cuerpo se tensa, mi respiración se acelera, siento que mis piernas son débiles, incluso comienzo a marearme, me doy la media vuelta, me alejo, estoy muy sorprendido y es que esto duele aun duele, escapo hasta llegar al área del personal, ahí no puedo controlar, rompo en llanto, esto es más de lo que puedo manejar y es que estaba consiente que en algún momento me toparía con gente que estaría pasando por el mismo momento que tanto disfrute, de lo que no estuve consiente es que al verlos mis heridas se abrirían y dolieran mucho más, ha pasado tiempo, meses desde esto pero sigue siendo difícil.
Caigo sentado en el piso, flexionando mis piernas y me cubro el rostro con la manos, ya no quiero esto, ya no quiero dolor - ¡tú te fuiste Siwon!, ¡llévate este dolor también! -- por qué no pensaste en que estarías acabando conmigo cuando te fuiste, de pronto escucho la puerta abrirse pero eso no me importa, solo siento que un compañero me abraza y me acaricia la espalda para tratar de tranquilizarme, escucho su suave voz diciéndome –Ya no llores, lo siento, no me di cuenta que te acercabas a él, me encantaría evitarte todo esto, pero lo tienes que sobrellevar, sabias que en algún momento te encontrarías con esta realidad, tu eres fuerte, tienes que salir adelante, tienes que entender que no estuvo en tus manos, que esto no era decisión tuya, cálmate Heechul.
Las palabras de mi compañero y amigo Kyuhyun son tan ciertas, me resguardo es sus brazos y comienzo a tranquilizarme, cuando las lágrimas se detienen levanto el rostro para ver a mi amigo, tengo tanto que agradecer, sin ellos no sé qué sería de mí, con su ayuda me pongo de pie, me pregunta si me encuentro bien y se me quiero ir, pero decido quedarme, ya no puedo escapar, esconderme solo me mantiene estático en este sentimiento y yo he decidió avanzar, porque ya han pasado tres meses y es momento de continuar, continuare sin ti Siwon, sin ustedes.
Decido lavarme el rostro y salir nuevamente a cumplir con mi trabajo, nuevamente observo que este chico sigue aquí, sigue triste, no entiendo por qué, pero no puedo dejar de observarlo, a lo mejor me veo reflejado en él, se ve tan joven, tan vulnerable y creo que hasta asustado, me gustaría brindarle mi apoyo, proyecta melancolía y en su estado eso no es bueno, por lo menos yo tengo mucha gente que cuida de mí, pero en cambio él está aquí sentado solo, pensativo, ausente, . Cuando por fin estoy tomando el valor de acercarme observo como se levanta y se va, suspiro, creo que lo pensé mucho, no lo tengo muy claro pero quiero apoyarlo quiero que el también este bien.
La noche a caído, hoy fue un día difícil, lleno de experiencias y pruebas, pero me han ayudado a dar un paso más, después de la cena y un necesario baño entro a mi habitación ahí acostado en la cama pienso nuevamente es ese joven quiero saber de él, no me gusta verlo mal, sin darme cuenta el sueño termina por vencerme para transportarme a esa playa donde te puedo ver pero no te puedo retener, ese sueño que siempre se convierte en pesadilla.
-La mañana siguiente-
Ha sido un día muy cansado en el trabajo hay mucha gente, pero aun así puedo notar que el cliente no ha llegado eso es extraño, él nunca se pierde su café matutino, pasan las hora de las mañana y cuando estoy a punto de tomar mi descanso lo veo entrar, lo observo detenidamente y efectivamente no me equivoque él está esperando un bebe, ahora si puedo notar su vientre abultado, es muy raro creo que tendrá como cuatro meses y me pregunto ¿Cómo es que no lo había notado? me acerco a tomar su orden, esta intranquilo, cuando siente mi presencia trata de sonreírme, me pide su café pero me tomo la libertad de llevarle una rebana de pastel al acércame me doy cuenta de que está llorando, siento que necesito ayudarlo así que me tomo el atrevimiento de sentarme frente a él y tomarlo de las manos -tranquilo todo estará bien, debes ser fuerte por ese angelito que ahora te acompaña- le digo regalándola la más cálida sonrisa que puedo dibujar en mi rostro, el joven levanta la vista algo sorprendido por mi acto y ante mis palabras trata de sonreír pero le cuesta y lo entiendo perfectamente volver a sonreír es lo más difícil a mí me ha llevado tres meses hacerlo, continuo hablando -si necesitas ayuda puedes confiar en mí, sea lo que sea yo te ayudare, solo promete que estarás tranquilo, a veces pasamos por situaciones difíciles pero yo he aprendido que el tiempo nos ayuda a sobrevivir ante las pruebas difíciles - le presiono un poco más fuerte sus manos - anda prueba el pastel es de fresa está muy bueno- le suelto las manos y me dirijo al mostrador, el joven sonríe y lo veo comer su pastel aun con una ligera sonrisa en su rostro, cuando estoy por irme a mi descanso el me detiene –Gracias, muchas gracias – me dice el chico y me da un abrazo, ese abrazo se siente diferente, me hace sentir un cálido sentimiento, creo que es porque nuestro sufrimiento se parece.
Después de ese día me he acercado al cliente ahora sé que se llama Sungmin, efectivamente esta triste, su pareja lo había abandonado, el muy cobarde lo dejo cuando supo que llegaría ese angelito, por lo que él se ha tenido que enfrentar todos los cambios solo.
Ahora él y yo debemos afrontar el futuro sin las personas que amábamos, pero se que todo estará mejor.
ESTÁS LEYENDO
Ustedes
Fanfictionustedes Cap. ¿? yaoi, M-preg couple: SiChul Una vida perfecta que de pronto cambia, un momento de alegría que se convierte en tristeza, estar acompañado y de pronto quedarse solo. Cuando te conocí me hiciste feliz, a tu lado todo era perfecto, ap...