El sol tocó su punto en el cielo, haciendo que varios rayos de luz se vieran por todo el pequeño pueblo de B'Teams, pero eso no era lo único, sino los que vivían en ella.
Toda la gente era demasiado noble, se ayudaban entre sí, festejaban como en fa...
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— ¿Puedo preguntarte algo?
Hwang observo los sobres de mercaderes donde debía de mandar el vino vendido, dejo que la punta de su pluma se tintara, pero observo su dedo manchado, apretó sus labios, pero igual siguió con lo suyo, podría luego darse un baño.
Levanto su mirada al sentir como Bangchan se puso delante de su escritorio, cruzado de brazos, él soltó un suspiro dejando la carta encima de otras para prestarle atención.
— Te doy 5 minutos, has la pregunta —apretó sus labios.
— ¿Por qué no luchaste?
Hwang enarco una ceja— ¿Luchar? ¿Qué-
— Kim Seungmin, me contaste, no lo olvido y ese era él ¿cierto?
El pelinegro se acomodo en su asiento, sus ojos observaron todo el desorden.
— Si, ese es Kim Seungmin.
— Ahora responde la primera pregunta, ¿Por qué no hiciste nada? ¿Por qué te fuiste?
— No crees que... —aunque hubiese querido evitar el tema, la postura que puso Bangchan le dijo que no se iba a rendir así que bajando sus hombros recordó los días pasados— Lo lastime demasiado, al punto de odiarme todos los días, así que había decidido irme sin antes escribirle una carta y solucionar lo que había hecho.
— ¿No crees que fue egoísta de tu parte irte?
— Bangchan... —relamió su labio inferior— le deje una carta-
— Una y te fuiste 3 años, tus cálculos están muy desequilibrados ¿no lo crees?
— El pudo haber escrito también —recalco— y nunca lo hizo.
— ¿Sabía dónde estabas, primo?
Hyunjin quiso decir algo, pero su boca se secó.
— Lo espere en la puerta de su habitación, toque varias veces y nunca abrió ¿Qué podrías haber entendido de eso?
— Que quizá leyó tu carta muy tarde, que quizá te busco y nunca te encontró, que quizá te perdono, pero nunca supiste de eso.
— Lo fui haber —se cruzo de brazos, apenas dándose cuenta que estaba frustrado— mi... presencia le desagrado.
— ¿Te lo dijo? —Bangchan ladeo su cabeza esperando.
— No, ¡Pero...! Fue cortante, no me quería en ese lugar.
— ¡Porque estaba resentido contigo! —sus manos se estamparon en el escritorio asustando a su primo que pego un salto— ¡¿Has leído tantas obras de romance que no te das cuenta?!
— ¿De qué?
— Pedazo de mierda, ¡El aun te ama solo que... —soltó un suspiro, observo el adorno que estaba en una esquina de la mesa de mármol, luego observo a su Hwang detenidamente, viéndolo jugar con el dije en su dedo, mover su pierna izquierda de arriba a bajo y luego-... — ¿Desde cuando estas usando el anillo del abuelo?
— Cuando regresé, fui a su cuarto y encontré el anillo de su compromiso ¿Por qué?
— ¿Y fuiste a verlo con eso puesto?
Hyunjin tuvo miedo de responder al ver como poco a poco Bangchan apretaba sus manos.
— Está bien, ya entendí-
— ¡¿Qué entiendes imbécil?!
— ¡Soy mayor que tú!
— ¡Pues piensa como uno! —se froto la frente, camino en toda la oficina, apoyando sus manos en su cadera— Ahora pensara que estas comprometido, que lo olvidaste, que ya no lo amas.
— Pero podría ir a decírselo y-
— ¡No! ¡Así no harás las cosas! —su dedo índice se levantó— Vas hacer lo que yo te diga.
— ¿Por qué debo confiar en ti?
— Porque se cosas —sonrió ampliamente asustando a Hwang.
Encogiéndose de hombros observo el anillo en su dedo, roso el dije y con un suspiro se lo saco.
— Bien pensado.
— ¿Cuál es tu plan señor cupido? —bromeo obteniendo una bola de papel arrugado que tiro al suelo hace un buen rato.
— Escuche que va haber un baile de mascaras en dos días, hare lo posible para que la familia Kim este invitada y bueno contigo no hare nada porque eres el soltero del año, así que solo ponte decente.
— Gracias supongo.
— Así que ese día, deberán de hablar y esperemos que funcione.
— ¿Y si no funciona?
— Bueno, dime tú, ¿vas a renunciar?
— No.
— Entonces a seguir intentando —se encogió de hombros.
Dicho eso, el menor salió de la oficina y Hyunjin retomo sus lecturas con una pequeña sonrisa asomada en sus labios.
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