Nuestro Amor Es Para Siempre | Descendientes

El Peso del Futuro

Ben

Estos días con Bruce y Mad en Auradon fueron interesantes. Como ellos no estaban inscritos en la preparatoria, se dedicaban a hacer travesuras por todas partes, hasta que Mal terminaba sus clases y se los llevaba. Por mi parte, me encargaba de pagar todo el caos que ocasionaban. Por suerte, mi abuelo llegó en la tarde para el día de la familia y se ofreció a estar con ellos, dándoles un recorrido por el reino. A mi mamá le pareció una excelente idea, aunque mi papá aceptó a regañadientes.

En la cena, todo parecía normal: mi abuelo contando sobre las novedades del pueblo donde vivía, mi madre hablando sobre su nueva lectura y yo comentando cómo iban los preparativos para la coronación. Pero todo cambió cuando mi padre sacó un tema que había intentado posponer.

La reina Leah y el rey Stefan me han llamado furiosos porque has terminado con Audrey — mi padre me miró serio mientras le daba un sorbo a su bebida — ¿Eso es cierto?

Algunos de los empleados que estaban trayendo bocadillos se dieron media vuelta y se retiraron rápidamente, mientras que mi mamá simplemente le dio una mirada desaprobatoria a mi papá. Aún no había planeado contarles sobre mi ruptura, pero sabía que, si no lo decía ahora, de alguna manera lo averiguarían.

Es cierto, desde hace un tiempo terminé con ella. Las cosas no iban bien y ella tenía algunas actitudes que me resultaban muy molestas. Intenté que las cosas se arreglaran, pero al final no fue así. Decidí que era mejor que cada uno siguiera su propio camino — dije, mientras mis padres y mi abuelo se quedaban en silencio por unos instantes.

Al parecer no lo tomó de la mejor manera. Vi en las noticias que ahora está saliendo con Chad — comentó mi abuelo, sorprendiendo a mis padres, que no solían ver ese tipo de noticias.

Chad me confesó que ella solo lo hace para sacarme celos, pero, aun así, no volveré con ella — les expliqué — Además, sé en mi interior que ella no es la indicada y no quiero que se haga ilusiones sobre algo que no va a suceder.

Nunca quise decirlo, pero siempre creí que Audrey era un poco egocéntrica, algo falsa y aduladora — dijo mi mamá, mientras hacía un gesto a los empleados para que trajeran los bocadillos.

La mayoría del reino piensa que Audrey es la chica perfecta, pero en realidad hay mucho más detrás de esa fachada. La presión de ser una princesa la ha hecho obsesionarse con su imagen y con lo que los demás piensan de ella. Siempre está queriendo ser la mejor y sobresalir, sin importar a las personas que lastimé en el proceso — continué, sintiéndome más aliviado al compartir mis pensamientos con mi familia.

Hijo, entiendo que quieras ser honesto, pero esto no solo afecta tu vida. La reputación de nuestra familia y las relaciones con otras casas reales también están en juego. Todos ya daban por hecho que te casarías con ella y que se convertiría en la reina de Auradon — dijo mi papá, que parecía procesar todo.

Lo sé, papá. Pero no puedo seguir en una relación solo por el estatus. Quiero ser feliz, y creo que ella no es la persona adecuada para mí —respondí, tratando de mantener la calma.

Lo que importa es que encuentres a alguien que te complemente, no que te haga sentir presionado — dijo mi mamá, dándome una cálida sonrisa — A veces la vida nos lleva por caminos inesperados. Lo más importante es que te conozcas a ti mismo y sepas lo que realmente quieres. Sigue lo que te dice el corazón, y ya llegará esa persona que te haga sentir completo.

Es solo que tenemos tantas expectativas, Ben. Tu futuro no solo afecta a nuestra familia, sino también a Auradon. La gente mira hacia ti — las tensiones comenzaron a disminuir, y aunque mi padre seguía preocupado, al menos parecía dispuesto a escuchar.