Capitulo 17

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Cuando terminó la clase de la tarde, Lao Li vio el retrato que Lao Zhang le dibujó y casi se enojó tanto que casi termina en el hospital nuevamente.

Finalmente, después de despedir a estos dos ancianos animados, el estudio quedó en paz. Meng Yun ayudó a Xiang Mo a ordenar los materiales de arte, mientras Sanmei yacía perezosamente en el alféizar de la ventana, tomando el sol.

—El restaurante al otro lado de la calle está muy animado—, Meng Yun se lamió los labios, mirando el restaurante Ba Jin al otro lado de la calle.

Normalmente, a partir de las cuatro de la tarde se formaba una cola en la entrada del restaurante. Pero hoy había aún más gente y la cola se extendía hasta el final de la calle.

—Han venido por la reputación—, dijo Meng Yun. Con una recomendación tan prestigiosa, era natural que su negocio prosperara.

Xiang Mo recogió a Sanmei y caminó hacia la puerta del patio, mirando al final de la cola. Sanmei se movió un poco, encontrando una posición cómoda en sus brazos.

Mientras miraba hacia el final de la calle, una figura familiar interrumpió sus pensamientos. Du Chi caminaba hacia él con una bolsa de lona en un hombro y una bolsa de supermercado en la mano.

En comparación con andar en una motocicleta pesada, Du Chi prefería caminar. Parecía que no iba a lugares lejanos.

Al llegar a la puerta del patio, miró la cola al otro lado de la calle y con indiferencia le dijo a Xiang Mo:—Será difícil salir en el futuro.

Xiang Mo comprendió de inmediato lo que quería decir Du Chi. Estaba hablando de cómo siempre salían del restaurante en contra de la multitud.

En verdad, si realmente quisieran irse, siempre podrían encontrar la manera. Además, Xiang Mo desvió la mirada de la cola y miró a Du Chi. —¿No estás aquí conmigo?

Du Chi sonrió levemente, —¿Quieres que te guíe otra vez?

Xiang Mo no respondió, se dio la vuelta y llevó a Sanmei de regreso al patio.

Quizás debido a que todo el edificio estaba vacío, Meng Yun se relajó más. Al ver a Du Chi, lo saludó:—La esposa del maestro.

Los pasos de Du Chi vacilaron levemente y enarcaron una ceja. —¿La esposa del maestro?

—Simplemente te están llamando así— Xiang Mo rápidamente se dio la vuelta e interrumpió su conversación. Pero en el proceso, Sanmei se soltó de sus brazos y volvió al alféizar de la ventana, bostezando perezosamente.

—¿Es eso así?— Du Chi parecía pensativo. —Seguro por qué no.

Xiang Mo: —..

¿Tenía que ser tan cooperativo? ¿Qué pasa con tu dignidad?

—¿Vendrás a modelar mañana por la tarde?—Preguntó Meng Yun. —Muchos estudiantes estarán allí.

—Claro— Du Chi se adaptó rápidamente al término "esposa del maestro".—Mañana por la tarde enseñarás a tus alumnos sobre la estructura de los músculos humanos.

—¿Oh?— Una sonrisa traviesa apareció en el rostro de Meng Yun y sus ojos tenían una mirada significativa.

Después de que Meng Yun se fue a cenar con sus amigos, Xiang Mo siguió a Du Chi a la cocina en el segundo piso y preguntó vacilante: —¿Estás seguro de que quieres que te enseñe estructura muscular?

Para Du Chi, fue simplemente cuestión de quitarse la camisa, nada significativo. Pero para Xiang Mo, tuvo que marcar la estructura muscular en el cuerpo de Du Chi, lo que le dio a la lección un significado diferente.

SINDROME DE SOLTERIAWhere stories live. Discover now