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Después de aquel evento, Rodrygo no sentia muchas ganas de nada, ni siquiera tenia ganas de pasar el día con Paquetá. Pero hoy y a su mala suerte era su aniversario y se habia bañado y puesto bonito para salir a comer con él.
—Lucas, ya estoy listo...—dijo el menor saliendo con una camiseta holgada al igual que sus pantalones eran unos vaqueros anchos.
—¿A donde mierda crees que vas ahora?—miro de arriba a abajo la figura y vestimenta de Rodrygo.
—Hoy es nuestro aniversario, me invitaste a salir, ¿no lo recuerdas?
Paquetá se quedo callado y recordando que era verdad lo que decia Rodrygo, pero para nada quería salir con él y menos con las pintas que se cargaba el menor.
—¿Que te parece si lo dejamos para otro día? No quiero salir con alguien que se viste como quiere.
—Oye, pero es mi forma de vestir.—observó su propio atuendo.
—No te ves para nada bien, me gustarias mas si te pusieras algo mas llamativo, no eso que realmente pareces una prosti, te vez horrible. Y además, quiero que me digan por la calle que ando con un cerdo.
Rodrygo no sabia que decir pero se dejó humillar por quien es su pareja, tenia las ganas de llorar al borde pero sabia que eso iba a empeorar todo.
—Solamente quieres llamar la atención para que cualquier pendejo se te acercó y te toque lo que es mío. Por favor, respétate un poco.—enciende el televisor sin mirar a Rodrygo.—Vete a poner otra mierda.
Rodrygo tuvo que aceptar y suspiro ocn tristeza y miedo, sin saber que hacer, obligado a subir de vuelta a la habitación para cambiarse de ropa a otra que sea "adecuada" para él y que dejara con buena cara a Paquetá.
