Déjame sanar tu corazón~

XXXI. Adiós sin palabras, Amor que queda

Sigue narrando Damian:

4:16am de la mañana, hora que me levanto. Preparando mis cosas para ir a la mansión. Que por rara vez, mi padre solicitó mi presencia. Nose para que será, pero debe ser importante.
Hoy es el último día de clases, en el que se hacía la ceremonia de despedida y creo que también el baile. Que mal, yo quería bailar con mi querida Anya. Pero no se va poder. Así que obligado, termine de preparar mis cosas. Y salí de los dormitorios, como creo que va ser corta la reunión de mi familia, me despedí brevemente de mis amigos que aún seguían dormidos. Y salí de ahí, sin saber que será la últimas vez que los vea luego de mucho tiempo.

Pues si, una parte de mi. Dice que no vaya pues presentia que algo malo me iba a pasar. Pero la otra parte de mi me dice que tengo que obedecer y no poner excusas e ir. Pues como tonto obedezco a mi segunda parte. Veo al chófer afuera de la academia y entro en la limusina en dirección a la mansión.

Llego y me dirigen a una sala algunos guardaespaldas que al parecer nunca los vi antes. Pero no tuve remedio que obedecer. Llegamos a una sala quien me estába esperando mi padre y demetrius al lado de el. Mirándome fijamente, en ese momento sentí unos grandes escalofríos. Tan solo la mirada que me daba mi padre, daba miedo.

-Hola Damian, hace mucho que no nos vemos, no?- me pregunto seriamente mi padre.
-Buen día Pa a dre e- tartamudie- un gusto volver a verlo.
-Mm bueno, seguro que estas confundido, porque te vengo a reunir aquí, verdad?- asiento- bueno te lo resumiré:

Tu, Demetrius y yo, nos vamos a Inglaterra.

Como escuchaste, nos vamos a Inglaterra por algunas razones políticas que no tendrás que saber. Así que prepara tus maletas y empaca tus cosas porque en media hora te quiero listo frente a la puerta. Sin excusas ni reclamos.
Entendiste?- me dijo seriamente mi padre, y sentí como todo mi mundo se fue abajo. Con razón tenía la sensación de que algo andaba mal aquí.

-Si padre entendí, pero no puedo irme! Tengo mis amigos aquí, y los quiero mucho. Además que aún no terminé la escuela. Porfavor déjame aquí con mi madre, no me hagas esto.- dije suplicando a mi padre, nose de donde saqué la voluntad de responderle así a mi papá. Pero se notaba que estaba un poco molesto y alterado.

-DAMIAN! Vas a ir y punto! A nadie de aquí le importa que tengas amigos o no. Y no me menciones a la estupid4 de tu madre, NO TE VAS A QUEDAR! Te vas a venir por las buenas?- me digo molesto mirándome con un poco de furia, me sobresalte a la manera que me respondió, creo que ahora tiene muy poca paciencia. Y estoy obligado a ir, pero y si lo intento...
-Por favor papá, déjame quedarme no quiero abandonar a mis seres queridos aquí. Te lo ruego padre- me doy media vuelta no queriendo escuchar su respuesta, tengo que huir o sino no tendré elección y escapatoria.
-Idiota, creo que elegiste por las malas... mala elección- dijo tenebrosamente y sentí unos grandes escalofríos, así que acelere mi paso, estaba tan cerca de la puerta.

Hasta que estaba a punto de cruzarla, y sentí como dos personas grandes me agarraron de cada lado y yo intenté soltarme pero fue en vano. Me colocaron un pañuelo en mi cara con un olor a sustancia fuerte que me desmayo y noqueo al instante . Sustancia Melatonina, que en ese momento caí en el sueño.
.
.
.
Me duele la cabeza, desconozco el lugar. Abro los ojos lentamente. Al parecer me encuentro sentado ¿dentro de un avión? En que momento? Si tan solo recuerdo como... me durmieron y noquearon. Ah, ya me acuerdo. Pero que hago aquí? Miro hacia la ventana y veo todo desde arriba. No veo a mi padre por ningún lado, solo a un guardaespaldas a mi lado vigilandome. Mis manos están atadas con un nudo difícil de resolver. ¡¡Esto es horrible, peor que una pesadilla!!

Ojalá nunca haber obedecido a mi padre, tenía que haber escuchado a mi primera parte. Los perdí a todos.
A mis amigos, a Ewen, Emile, Becky. A mi madre y a Jeeves. Pero por sobretodo ellos.

Perdí a Anya.

La perdí, ella no me perdió. Me fui de su vida, así como si nada. Con el corazón hecho pedazos, me fui sin decir un "adios" o un "nos volveremos a ver", o un "hasta luego". Soy realmente un tonto, como puedo decir un "nos vemos mañana"? En que estaba pensando?

Ahora que me doy cuenta... y puedo relacionar los temas... Mi corazón, en el fondo, sabía que algo similar iba pasar. Por eso la extraña actitud que tenía ayer, no quería soltarla. Porque será la última vez que la abraze. No quería soltarla porque sabía que si lo hacía no iba a pasar de nuevo. Fui tan tonto, por eso mi corazón dolía tanto, porque ya sabía lo que iba a pasar. Y yo, lo ignore y seguí mis órdenes, si ya sé que me arrepiento por haber tomado esa desicion.

Pero lo que más me da tristeza, es no haberme despedido de buena manera a mis seres queridos. Dejarlos con la idea de que los abandone, me dolía el corazón nuevamente. No haberme despedido de Anya. Fue lo peor para mi, si tan solo le hubiera demostrado lo que siento por ella, tan solo una mínima acción o halago. Nose cualquier cosa, pero lo hubiese demostrado...

No estaría ahora, arrepentido. Extrañándola cada vez más.

No paso ni un día, y ya siento su ausencia. Me siento vacío. Sin ganas de nada, tan solo un abrazo o palabra de ella, me da vida y energía para seguir.

Ahora estoy aquí, prácticamente a la fuerza. Porque yo me opuse a la decisión de mi padre, pero fue en vano. Porque igualmente terminé como el quería. No tengo escapatoria, aunque tenga a todos estos guardias vigilandome.

Me siento solo.
Perdido y sin compañía, desorientado y traicionado. Tantas cosas que procesar, mi mente llena de pensamientos, mi corazón hecho pedazos.

Y a la chica que más amo, cada vez más lejos de mi. Sin saber, cuando tendré la suerte de volver a verla, de apreciar lo hermosa que es o de tan solo estar con ella, solo un segundo más.

Mi querida Anya, te prometo que algún día nos volveremos a encontrar. Tan solo espérame. Te extraño tanto. Que mi felicidad es estar contigo, a tu lado.
A tu lado...
Aunque estemos a millones de kilómetros de distancia... mi amor por ti no cambiará.