Déjame sanar tu corazón~

XXXIV. Demetrius, hermano mayor. Protegiendo desde la distancia

Así como pasan los días, pasan las semanas. Semanas de sufrimiento y dolor emocional. La ausencia del uno al otro ha roto el corazón del otro individuo.
Cada día más sufrimiento, una soledad los invade y según ellos no tienen salida.

Damian ya fue inscrito a una de los mejores colegios del mundo, que se encuentra en Londres. Y al año siguiente tendrá que empezar. Todos los días recordaba a Anya, la extrañaba mucho. Ya no se avergonzaba de admitir que la amaba, cuando nadie lo veía y escuchaba. Lo decía muy feliz.

-Amo a Anya, la amo muchooo- miraba a la luna- TE AMO TONTAAAA.

Y así eran las semanas que pasaban volando. El tiempo se quedaba corto, en aquella vacía mansión. Sólo algunos rumores de sirvientes decían que ya se hizo costumbre escuchar los llantos y desconsuelo de un pobre niño, por las tardes. Y que no podían ayudarlo, por órdenes de Donovan, su padre, según él se lo merecía.

Pero un día, Demetrius escuchó uno de aquellos rumores que murmuraban algunos de los sirvientes. Así que cuando su padre, fue a una reunión importante con unos mafiosos. Fue a visitar y apoyar a su hermano, con quien en años o capaz nunca hayan podido hablar pasivamente.

Tocan la puerta de la habitación de Damian, quien con molestia pensando que era un sirviente, lo hizo de mala gana y la abrió. El que se llevó la sorpresa fue él al ver a su hermano frente a él.

-Damian... como podes estar así?- señaló a sus ojos rojos de tanto llorar- quiero hablar contigo.
-Eh? Si tu nunca quieres hablarme, por que justo ahora?- dijo Damian a la defensiva.
-Solo déjame explicarte y ya- así dijo y entraron solo los dos a la habitación.

-Y bueno que quieres decirme hermano?- dijo Damian desconfiado.
-Bueno... se que aun estas confundido del porque estamos aquí, en Inglaterra, específicamente. Bueno, es un poco largo el contexto pero estoy obligado a no decirle a nadie- se acercó y le susurro- porque tengo una cámara y audífono que se encargan los guardias de padre para vigilarme- luego se alejo a una distancia considerable- entonces es muy peligroso hablar a la ligera, pero no vine para hablar específicamente sobre eso.

-Entonces para que?- dijo Damian ya preocupado y ya temblando de ansiedad.
-Vine a hablar contigo sobre nosotros y de ti- hizo una pausa- Se muy bien y lo tengo claro que nuestra relación de hermanos nunca fue lo mejor y que siempre estuviste batallando todo esto tu solo. Y la verdad...- lo tomo de las manos y lo miro con una mirada afligida y llena de tristeza- ¡Lo lamento tanto! Enserió Damian, lo siento. Se muy bien que no fui el mejor hermano mayor para ti y capaz no lo sea. Pero todo tiene un porqué y en futuro te lo contaré. Pero ahora no. Simplemente quiero que sepas que yo no te odio ni nada que ver, es más yo... te quiero mucho hermanito- empezó a lagrimear- y verte así ahora, culpandote y llorar todas las tardes, me trae recuerdos bien enterrados dentro de mi.

Lo que menos quiero es que pases lo mismo que yo pase, así que te pido que por favor. Mejores y logres superar esto.
Se que es muy difícil, pero te advierto que desobedecer a nuestro es uno de los peores errores que podemos cometer. No logres soltar su furia, porque él es capaz de todo. Hasta cuesta decir, pero es capaz de olvidarse que sos su hijo. Yo se que duele, pero yo también paso por esto. Por eso te digo que seas fuerte, aunque seamos débiles...

No podemos arriesgarnos a desiciones que luego nos arepentiremos.

Se que cuesta, lo sigo porque también lo hice. Pero es por tu bien Damian, se que sos un excelente alumno y que tienes todo un futuro asegurado. Una gran capacidad y don en el estudio. Hasta te admiro por haber llegado tan temprano a ser un académico imperial. Aunque no te lo demuestre...

Sos mi mayor orgullo, Damian.
No tienes que cambiar para cumplir las expectativas de los demás. Yo lucharé para que consigas lo que yo no pude...

(Salvar y proteger a quien amaba con todo mi corazón)

Por eso Damian, esfuérzate que yo te prometo que lograremos salir de esto. Costará, lo sé. Pero si trabajamos en equipo lo lograremos tarde o temprano pero lo lograremos.
Confío en ti Damian, siempre lo he hecho, espero que algún día me perdones por todo el mal que te hice. Pero para demostrarte que este perdón es en serio lo demostraré con acciones. Te protegeré hasta de nuestro propio padre.

-Demetrius... yo...- sintió un gran abrazo de su hermano mayor, que lo reconforto y correspondió, realmente necesitaba que alguien se lo de- ...gracias hermano, enserió yo te perdono, aunque me cueste. Te perdono. Yo siempre pensé que tu me odiabas o que te gustaba ser siempre el primer lugar. O que te gustaba verme sufrir. Pero estoy realmente equivocado.
Gracias de verdad, trabajemos en equipo. Cuento contigo Demetrius.

-Gracias Damian, realmente me siento bien escucharte decir que estarás dispuesto a esto. Te prometo que te protegeré desde la distancias, no dejaré que nuestro padre te lastime. Cuento contigo Damian.
Ah, y ya no te sientas triste- se acercó y dijo picaramente- también escuche el rumor que una de las sirvientas te escucho gritar que amas a una chica. Si no me equivoco, se llama Anya, no?~
-Ehh??!! ES MENTIRA!- dijo completamente sonrojado y nervioso.
-Jajaj tendrías que ver tu cara que es lo contrario de lo que dices. Ya, ya no es malo que te empieze gustar alguien. Ahora que me doy cuenta. La extrañas no?
-Como nunca lo he hecho antes a alguien.
-Mmm, que afortunada.
La amas desde la distancia, eso es de admirar. Pero te aconsejo que no te lastimes, para quitar o intentar disminuir tu dolor. Te digo que no te sirve, porque no funcionó conmigo. Tampoco te digo que la dejes de amar, eso depende de ti. Pero bueno aun sos muy chico, para que te hable de estas cosas.

Dicho esto, se despidió de se hermano menor y salió por de esa solitaria habitación. Dejando a Damian con una pizca de esperanza, totalmente agradecido que ese malentendido que lo consumía por semanas tenga solución. Aunque hasta ahora no vaya a volver con su amada Anya, se va esforzar para que reencontrarse con ella.
Así que con esto dicho, se sumergió en el sueño. Todavía sin creer que hay alguien que lo quiere y aprecia. Yo que lo va proteger desde la distancia y quiere lo mejor para él.

(Aunque no lo creas Demetrius, sos el mejor hermano que un niño como yo pudiera pedir)