En ese instante se escucha como unas camionetas se frenan de repente, la arena subió. Oliver puso su mano para que no nos entrara la arena en los ojos. ¿Quien carajo se está estacionando en la playa?. Se escucha el abrir de las puertas.
Comencé a toser, realmente era algo fastidioso. Cuando la arena bajo, mi vista se comenzaba acomodar a ver quien era.
Me abrazan con fuerza, es una abrazo extremadamente sincero. Puedo sentir la preocupación y la importancia que me tienen. ¿Pero quien es?.
— Pensé que te había ocurrido algo — Dominic dice.
Carajo cierto me fui sin decir nada, se ha deber preocupado. En lo único que pense es venir lo más antes posible, que ni siquiera pensé en dejarlo ahí solo. Cuando es nuestra boda.
— Lo siento Dominic — digo abrazándolo
— Se separa de mi y me mira a los ojos— Todos mis hombres te están buscando, arme un maldito desastre por ti — dice un poquito molesto.
— Vale, se que fue mi culpa por no avisarte — digo mirandolo a los ojos.
— ¿No entiendes la gravedad de esto? —
— Si lo sé, pero también no es como que si fuera huir — Y no te he pedido que me busques haci.
— No me importa si pongo a buscar a mis hombres por debajo de las malditas piedras — Si no te encontraba aquí, hubiera hecho un maldito desastre y tendría que parar la puta ciudad —
¿Y a este que le pasa?, ya vió que estoy bien, no se por qué arma tanto puto drama.
— Estoy bien ya lo viste — Ya iba a regresar a la fiesta —
— Su mirada se dirige a Oliver — ¿Y tú quien carajo eres?, ¿El te obligó a venir aquí? —
— Que estupidez dices, claro que no Oliver será incapaz de hacer esto — digo enojada.
— No confío en este tipo — se acerca a el y saca un arma y le apunta a la cabeza.
Me paralice cuando ví que le apuntaba a Oliver. Un escalofrío recorrió por todo mi cuerpo, mis manos temblaban.
— ¿Dime quién eres? de una puta vez, antes de que te volé los sesos — dice en un tono firme.
— Oliver Collins — dice en un tono firme.
— ¿Y que es la relación que tienes con mi esposa? —
No respondas Oliver, solo me mira y yo sigo sin poder moverme o decir algo.
— Habla de una maldita vez — alza el arma y dispara al cielo.
El disparo me hizo entrar en si, brinque del susto. Mire a Oliver que ni siquiera lo había asustado. Y Dominic le estaba apuntando otra vez. Me acerque y me puse en medio de los dos, quedé enfrente de la arma.
— Baja el arma — digo con voz temblorosa.
— Quítate Rosalie — dice en un tono firme.
— No me voy a quitar, baja esa maldita arma antes de que cometas una locura —
— Loco me vuelve, que te hayas ido de nuestra boda y vinieras aquí con este bastardo — dice mirándome.
— Ya te dijo quién era, y es un amigo de la infancia que lo deje de ver — digo en un leve susurro.
— Suelta una pequeña carcajada — ¿Crees que soy estúpido?, mírate traes todo el puto labial corrido y ese imbécil lo tiene por toda la puta cara —
Joder este hombre es inteligente, pero no ahí nada entre nosotros bueno y si lo ahí eso a el no le importa. Tarde o temprano nos vamos a divorciar.
— Salvatore deja de ser tan maldito celoso — Soy tu esposa no tu maldito juguete, y tú diviértete con quién quieras
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Hasta que nos dejemos de amar.
RomanceRosalie una joven abogada, por un tragico accidente sus padres mueren. Cosas a la luz. Romance, posiblidad de amar. ¿Se puede seguir después de que pierdes a las personas más importantes en tu vida?, tal vez no talvez si. Es cuestión de saber cómo a...