Street's Coffee's

Capítulo 19

La puerta del cuarto es cerrada por Minho casi con urgencia, no dejan de besarse y sus labios se mantienen unidos pese a que sus manos divagan por el cuerpo del otro en busca de más contacto, Felix se aferra a Minho y Minho sostiene a Felix por las caderas, sus labios están en una perfecta danza que es liderada por el menor de los dos, el calor inunda sus cuerpos y todo se siente más caliente, quieren mas, necesitan mas.

— Mi-n —

Felix pierde el aliento cuando el mayor lleva sus manos a sus glúteos y los aprieta apegandolo hacia si, sus manos amasan la carne por dentro del pantalón y luego lleva sus manos hacia el frente, donde el necesitado falo de Felix le da la bienvenida.

— Mira nada más ¿necesitado mi amor? —

La sonrisa en el rostro de Minho debe parecerle odiosa a Felix, pero solo logra jadear cuando el mayor empieza el bombeo, ambos pegados aún a la puerta de su habitación y dejando sus gemidos en la boca del otro.

— Te quiero comer entero —

Minho baja sus besos por el cuello de Felix y lo lleva a la cama, donde lo deja tirado en un parpadeo cuando ya esta en busca de desabrochar sus pantalones, la ropa interior le sigue y de pronto Felix siente como el mayor le empieza a besar los muslos internos, dejando mordidas donde la carne es más suave, haciendo que sus ojos rueden cuando sube sus lamidas hasta el inicio de su pene.

Minho toma el pene de Felix con su boca, sosteniendo el sobrante con su mano derecha, sus ojos oscuros jamás dejan de verlo a los ojos y la vista para Felix es hilarante, quiere guardarla en su mente para siempre, guardar el momento en que su chico se lo comió entero.

— Min ¡ah! —

Su espalda se arquea contra la cama cuando Minho lo mete de un solo en su boca, llevándolo hasta el final y succionando como si se le fuese la vida en ello, Felix solo puede sostenerse de las sábanas y aferrar sus piernas sobre los hombros de Minho, con su mano derecha callando sus gemidos y con su izquierda tomando del pelo al mayor.

— Joder, estoy cerca — avisa cuando Minho da otra profunda mamada

Los ojos felinos de Minho parecen brillar con pira satisfacción cuando ve el manojo de gemidos y temblores que es ahora su perfecto chico, le excita ver el cabello alborotado de Felix pegado a su cara, sus mejillas coloradas por el calor y sus piernas sudadas contra sus hombros, ama ser el que lo haga perder el control, ama ser el dueño de sus gemidos y placer.

— ¡Ah, Minho! —

Felix se corte en el momento exacto en el que Minho ah llevado sus manos a sus testículos, amasando al mismo tiempo que succiona, se deja llevar y sus caliente esperma es tratada hasta el final por un complaciente Minho que se inclina sobre su cuerpo hasta que eloezan a besarse de nueva cuenta, esta vez en un beso más cansado y lento.

— Eso estuvo fantástico — Felix le susurra en secreto, para completa satisfacción del mayor de los dos

— Te quiero, no quiero volver a discutir contigo por cosas insignificantes para mi ¿si? Me quedaré contigo hasta que mamá se vaya con ese tipo, pero prometeme no alejarte ¿ok? Si tienes algo que decir yo siento estaré escuchando —

Felix asiente abrazándolo por los hombros y juntando sus pechos, sus piernas quedan abiertas a cada lado de la cadera de Minho, sus corazones van latiendo rápidamente y Felix siente aún sus piernas débiles, jamás se ha sentido con alguien más como se siente con Minho y la sensación es como angustiante, encantadora.

— ¡Papi, no encuentro al señor Totoro! —

El grito de Hyunjin los hace salir de su ensoñación justo cuando Felix estaba considerando regresarle la mamada a su chico fuerte, pero este se levanta de su cuerpo después de dejar un casto beso sobre sus labios maltratados.

— Voy a ver a nuestro hijo ¿si? Descansa yo lo pondré a dormir —

Felix cree haber asentido, pero la realidad es que no se acuerda, lo único de lo que esta consciente es de que sus ojos se sienten pesados y pronto ha caído en la inconsciencia, el amor lo ve con sonrisa en rostro mientras se arregla la ropa y va en busca de su príncipe chiquito, ama a esta familia que han formado y aunque aún no lo declare en voz alta, sabe que eso que siente en su corazón jamás podrá ser ignorado.