La magia de Internet en Fairy Tail

Capítulo 61: Ultear-

—Es una de los nueve consejeros, Ultear... —susurró Mirajane sorprendida. No esperaba que los acontecimientos de la noche anterior alarmaran a un miembro del consejo, y mucho menos que lo impulsaran a llegar a Magnolia al día siguiente.

"¿Está aquí por Nate?"

Los demás miembros del gremio intercambiaron miradas, igualmente sorprendidos. Como el gremio más ruidoso de Fairy Tail, no eran ajenos a la atención del Consejo Mágico, pero era raro que un consejero liderara personalmente un ejército hasta su puerta. No estaba claro si Nate era el que estaba siendo tomado en serio o si era la participación de Oración Seis lo que había llamado su atención.

Lucy se inclinó y le preguntó en voz baja a Cana: "¿Los concejales suelen ser tan jóvenes?"

Cana, como de costumbre, sostenía un barril de alcohol. "No la subestimes. Es una maga increíblemente poderosa".

Ultear ignoró la charla que la rodeaba y sus ojos oscuros se clavaron en los de Nate, que estaba en la barra. Una leve sonrisa se dibujó en sus labios mientras disfrutaba de la sorpresa que él le había causado su aparición. Pero el momento de emoción se disipó rápidamente y su expresión volvió a la calma y profesionalidad que se esperaba de su puesto.

"Eres Nate, ¿correcto?"

—¿Cómo que "eres Nate"? Hemos estado charlando todas las noches, ¿y ahora finges que no me conoces?

Nate no pudo evitar quejarse internamente mientras se levantaba y caminaba hacia ella.

"Ese soy yo", respondió.

"Escuché que fuiste atacado por uno de Oración Seis. Necesito hablar contigo sobre los detalles en persona".

Ultear miró alrededor del caótico bar y sacudió la cabeza levemente. "Busquemos un lugar más tranquilo".

Nate le informó a Mirajane antes de irse con Ultear y seguirla afuera. Cuando llegaron a la puerta, Ultear les ordenó a los caballeros: "Estacionense aquí en el gremio. Es posible que Oración Seis ataque nuevamente".

"¡Sí, Consejero Ultear!"

Mientras se llevaban a Nate, los miembros del gremio se reunieron en la puerta.

Lucy parecía preocupada: "¿Estará bien?"

"Estará bien", le aseguró uno de los otros. "Nate sólo está cooperando con el consejo".

...

Nate siguió a Ultear por las escaleras del gremio, a lo largo del camino junto al río.

Aunque había visto muchas de sus fotos privadas en línea, esta era solo la segunda vez que se encontraban en persona.

De repente, Ultear se detuvo y se dio la vuelta, notando que Nate la miraba fijamente. Sonrió juguetonamente.

"¿Qué pasa? ¿No me reconoces?"

Nate bromeó: "Es difícil reconocerte con la ropa puesta".

Las orejas de Ultear se enrojecieron levemente. Si bien enviar fotos atrevidas en línea era una cosa, enfrentarse a eso en persona la hacía sentir muy cohibida. Nate pensó que su rostro sonrojado se veía incluso más atractivo que las fotos que había enviado la noche anterior.

Ella le lanzó una mirada molesta, aceleró el paso y gritó: "Date prisa".

-¿No se supone que deberías estar preguntando sobre Oración Seis?

"Hablaremos de eso en un lugar tranquilo".

Llegaron a una pequeña cafetería. Ultear pidió un poco de pastel y postres. Después de darle un mordisco, pareció recordar a Nate y preguntó casualmente: "¿Quieres un poco?"