El miedo eras tú

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¿Alguna vez has tenido miedo?, ¿Le temes a algo? o ¿A caso alguien te teme?
Yo no...Oh eso era lo que yo creía, yo siempre le buscaba a una respuesta lógica a todo lo que se encontrase a mí alrededor, a todos les demostraba lo contrario para sentirme satisfecho y saber que quien tenía la razón era yo, pero, el suceso que me ha pasado no tiene manera de explicarse. Te preguntaras ¿de qué hablo?, ¿que por qué una persona que tiene un ego alto dice semejantes imprudencias?, pues veras yo hablo del miedo, lo que es vivir el verdadero miedo, de quien es el miedo en realidad... Nicolas, ese soy yo, el tipo que ahora es considerado un loco; me la pasaba criticando y siendo un engreído con las demás personas que no tenían la misma personalidad que yo, quienes tenían miedo pues para mi ese sentimiento era muy estúpido pero ahora veo que el sentirlo es inevitable, normal y en ocasiones de vital importancia...

No tenía mucho que me había mudado a una nueva casa junto con mi familia, era algo antigua pero a pesar de eso la compramos, además de que se encontraba cerca del nuevo trabajo de mis padres. Cuando llegamos, yo escogí la habitación con la mejor vista del lugar debido a que me gustaba pintar y quería retratar el paisaje del nuevo vecindario donde ahora vivíamos y al terminar de desempacar mis pertenencias mi madre me pido que subiera unas cajas al ático, me parecía una gran molestia hacerlo, pero dije que sí y me lleve las cajas. Cuando me pare frente a la escalera que daba al ático, sentí algo de viento por el pasillo, era muy extraño ya que era verano y en esa parte de la casa no había ventanas o algún tipo de aire acondicionado; mire desconcertado por ambos lados sin ver absolutamente nada, así que mejor lo olvide y empecé a subir caja por caja. Cuando termine de subir todas y acomodarlas, observe que el cuarto donde las coloque había algunos muebles, cuadros, libros y otras pertenencias que pudieron ser del anterior habitante de las casa; entre ellos un espejo en el que se reflejaba mi cuerpo completo, un extraño pero muy leve ruido se escuchó provenir del espejo, me mire en el, y note que mi piel lucia de color gris, me revise a mí mismo pero yo seguía con mi tés normal, retrocedí extrañado así que mejor salí de ahí, baje la escalera y me dirigí a mi habitación. Dando las 8:25pm me acosté para así dormir, estaba cansado, ya había acomodado algunas de mis cosas y no tenía nada más que hacer.

Mientras yo dormía, la sombra de algo que no era humano se encontraba atormentándome en mi sueño, acercándose y en voz baja diciéndome: "El miedo eres tú'. Desperté de golpe, mire mi reloj, eran la 1:12 de la madrugada, mire por un rato el techo pensado que quería decir 'El miedo eres tú', pero recordé que todo era un sueño y no había necesidad de preocuparme así que me dispuse a dormir nuevamente. Esa noche resulto ser una de la más largas pero solo creí que era por encontrarme en un nuevo hogar y me era algo incómodo.

Cuando desperté me sentía con bastante sueño, aun así, tendí mi cama, me di una ducha, me cambie y baje a desayunar, mi madre y padre se encontraban sentados en la mesa comiendo unos panqueques con café, me senté y no dije ni una sola palabra y comencé a comer, mi madre para romper el silencio, menciono que el jueves en la tarde iríamos a ver mi nueva escuelas pero solo afirme con la cabeza, al terminar subí a mi cuarto; quería escuchar algo de música, pero por alguna razón voltee a ver mi reflejo en el espejo, note que una sombra estaba detrás de mí, lucia más grande que yo y no tenía una forma normal, sentía que me observaba, yo solo quede en shock mirando por el espejo, no me movía, no parpadeaba en eso mi mamá toco mí a mi puerta y la sombra desapareció, ella entro y me miro frente al espejo, dijo que lucía muy pálido. No conteste, seguía impactado por lo ocurrido

-Hijo, tu padre y yo iremos a ver cosas del trabajo, no tardamos-Me dijo

Yo asentí con la cabeza mientras ella se despedía y me recomendó descansar debido a la palidez en la que me vio, cerró la puerta del cuarto y se fue, en cambio yo seguía desconcertador, intentando no alterarme y tratando de pensar que solo fue una mala jugada de mi mente por lo poco que había dormido por la noche y el cansancio me hacía ver cosas, tuve la idea de pintar un poco y así olvidar lo que había visto. Me coloque frente a la ventana junto con mis cosas de arte, recorrí las cortinas a los lados y comencé a pintar el paisaje del sitio donde ahora vivía, después de un rato, decidí tomar un pequeño descanso, lave mis manos y baje por algo de comer a la cocina, mientras baja las escaleras escuche ruidos provenientes de la sala, fui a revisar y para mi sorpresa no había nada, solo unas cuantas cajas y el televisor, en el cual pude distinguir algo reflejado, era un chico que tenía algunas marcas en su cuerpo, rápidamente parpadee y mire de nuevo pero no había nada. Me dirigí a la cocina, tome una botella de jugo del refrigerador y me la bebí mientras yo subía a mi habitación; eran ya las 6:32pm y mis padres aun no llegaban, me sentía agotado y con mucho sueño, me acosté en mi cama mirando hacia el techo para que en cuestión de minutos cayera profundamente dormido.

Desperté por la madrugada, me levante y mire por mi ventana, y vi que el auto de mis padres estaba estacionado frente a la casa, eso indicaba que mientras yo dormía ellos ya habían llegado. Al momento de voltear mi vista hacia la puerta de mi cuarto me di cuenta de que alguien me miraba con gran curiosidad, aunque debido a la poca luz no podía distinguir su rostro, me acerque a preguntarle quien era pero inmediatamente desapareció, sin decir nada, camine hacia mi cama y por última vez mire hacia la puerta sin ver a nadie. A la mañana siguiente cuando me quise dar una ducha, observe que mi cuerpo estaba lleno de heridas, moretones y algunos raspones, me alarme y busque algo de ungüento para sanarlas, pero el hecho de tenerlas de un día a otro me desconcertaba. Decidí bajar a desayunar.

Mire a mis padres sentados comiendo, ellos notaron que lucía agitado, preguntaron qué sucedía, yo dije que nada hasta que comentaron algo que me inquieto

Me contaron que escucharon ruidos en la parte del ático durante la noche, me comencé a preocupar y para no darlo a notar, dije que tal vez era alguna clase de alimaña que se encontraba escondía ahí. Al terminar de comer subí hasta el ático y lo revise, todo lucia igual que la última vez que había estado ahí, excepto que el espejo estaba roto, me acerque y lo mire, en los pocos pedazos de vidrio que quedaban sujetados se podía ver alguien en la parte con menos luz, lenta y cuidadosamente voltee y al momento en que lo hice le lance un pedazo roto del espejo sin embargo no le di a nada, solo termino en pedacitos, sentí un viento muy frio detrás de mí, no pude evita voltear, y al hacerlo frente a mí se encontraba aquel chico que en la noche anterior me veía por mi puerta, tenía una piel de color gris, algunas heridas en todo su cuerpo y un parecido a mí... alarmado, con miedo dije:

-¿Quién eres?, ¡Por qué me estas molestando!

No contesto, solo seguía ahí parado viendo cada gesto que yo hacía, quise tomarlo y golpearlo pero al momento en que lo agarre, una gran herida se abría por mi costado que de inmediato empezó a liberar sangre. El desapareció pero aun podía oír su voz

'Ya es tarde para hacerse el fuerte, ¿verdad? Yo soy tu, y tú eres yo, ¡El miedo eres tú!"

Con gran dificultad comprendí que quería decirme con eso, me sentía débil por la herida que tenía, pero recordé que mi sueño ya había escuchado esa frase, comencé a entender porque decía que el miedo era yo.

Siempre mostré ser fuerte ante todos, me sentina superior y no creía en cosas del tipo fantasiosas y al decirme que el miedo era yo mismo supuse que aquel sujeto que me ataco, era un reflejo del lado que debía sentir temor. No sé porque tuve una idea con tan poco sentido, pero no había tiempo de formular teorías, me sentí aterrado, sentía que mi cordura comenzaba a desvariar. El tipo nuevamente apareció y por cómo me miraba planeaba hacerme algo así que empecé a arrastrar por el suelo hasta las escaleras, baje y camine lo más rápido que pude al cuarto donde se guardaban las cosas de limpieza, me encerré pero escuche vidrios romperse en la parte de la sala, salí rápidamente y baje; la cosa más horrible y trágica se encontraba ante mis ojos, eran mis padres con pedazos del vidrio del televisor incrustados en sus cuerpos, ¡estaban muerto! Inmediatamente comencé a gritar al mismo tiempo que lloraba, esa cosa apareció, me toco el hombro y todos mis miedos, fobias, tragedias y tristezas comenzaban a dar vueltas en mi mente, pedí que parara, pero por cada una de esos recuerdos, comenzaba a enloquecer y a perder mi capacidad de razonar, me eche a reír y a gritar incoherencias. No pasaron unos cuantos minuto que la policía llego a la casa, al parecer algún vecino los llamo por el alboroto que se oía en nuestra casa, cuando entraron vieron pedazos de cristal y vidrio en el suelo, los cuerpos de mis padre, creyeron que los había matado, me encontraba con numerosas cortadas, golpes, la herida en mi costado y sangre en toda mi ropa. Me tomaron y comenzaron a jalarme hacia la calle, para meterme en su patrulla, mientras me sacaban de la casa, mire que muchas personas contemplaban lo que estaba sucediendo, lo único que le pude decir con el último aliento que me quedaba fue: '¡El miedo son ustedes!'

Ahora vivo encerrado en un manicomio acusado de asesinato, tachado de un loco que ve fantasmas en espejos y completamente solo... Por qué nadie cree en lo que digo, que mi miedo intento matarme, que mato a mis padres, pero... aun así me alegro, por no tener que ver más un reflejo, todo eso me hizo ver que el temor si se sientes, no se debe ocultar, todos tenerlo y hay expresarlo cuando es debido porque podría ser lamentable.

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