Amor Prohibido

Capítulo 28

Hola todxs como estan, aquí pues les dejo otro capítulo, hoy no les voy a quitar mucho tiempo solo queria decirles que muchas gracias a todos por el apoyo.

Los quiero ❤

                   ❤❤❤❤❤❤❤

Me había quedado dormida, y ni siquiera me había quitado los audífonos. Suena mi celular y se escucha por los audífonos, era un mensaje de Javier resulta que si le conté lo que pasó:

Javier ♡

No puedo creer que te haya dicho eso, ni siquiera puedo creer que te haya amenazado, pero tranquila ella no te puede hacer nada, yo no la voy a dejar.

Amanda♡

Tranquilo no le digas que te conté por qué ahí si va a confirmar que nos estamos viendo. Aparte vuestra boda es en menos de una semana, ya estás obligado a casarte, solo envíame una invitación.

 Llamé a Patricia

— Hola Patrick que te parece si te acompaño mañana al viaje.
— Dale me ayudarías mucho, pero recuerda que estaremos cuatro días fuera.
— Está bien tranquila nos vemos mañana en tu casa. Vas a ver que sí encontraremos a tu familia.
— Ojalá bueno chao.

   Empecé a preparar la maleta y le pasé un mensaje a Javier y uno a Sofía para que supieran que iba a estar fuera del país durante unos días.

— Vanesa te tengo que decir algo… Me voy de viaje.
— ¿A dónde? ¿Por cuánto tiempo?
— A diferentes lugares es a ayudar a Patricia con la investigación y tranquila es solo por cuatro días.
— Bueno te deseo mucha suerte. ¿Quieres ir a comer fuera hoy?
— Está bien nos vemos horita.
— Chao.

   En la tarde fui a comer con Vanesa, quien invitó a Marcos, él se lo dijo a Sofí y ella fue con Carlos, en fin estábamos todos en el restaurante, pedimos el menú y era increíble tenían de todo y con una súper calidad, Vanesa se ofreció a pagar, pero yo la ayude como quiera que sea ella no se puede hacer cargo de todos los gastos.

En la casa

Llamé a mi madre para saber de mi hermano, pero no me quiso contestar, luego llame a mi padre:

— Hola ¿quién es? — acaso no tenía mi número
— Soy Amanda llamo para saber de Tony.
— Tony está bien — terminando de decir “bien” colgó.

Una cosa es que estuvieran molestos conmigo y otra muy diferente era que mi madre no me contestara y mi padre me colgara así por así.

— ¡Amanda! Te buscan — gritó Marcos desde la sala.
— ¡Voy! — bajé y estaba Javier en la sala.
— Hola vine a verte ¿cómo estás? — él se acercó y me dio un beso en la mejilla.
— Bien, em… Vamos a dejar a los tortolitos solos — me dirigí hasta el patio era un lugar al que siempre me había gustado considerar romántico — ven siéntate.

Un rato después

— ¿Qué hora es? — estaba un poco oscuro así que asumí que era un poco tarde.
— Las 8:00 p.m. bueno me voy al hotel.
— ¿Al hotel? ¿Y por qué no vas a tu casa?
— Me fajé con mi madre y no quiero dormir en casa hoy — ¿por qué se habrá fajado?
— ¿Te quieres quedar? — él me miró asombrado.
— ¿Segura que no voy a causar ninguna molestia? — negué con la cabeza.

       Entramos y lo llevé a mi cuarto, la casa solo tenía dos habitaciones una en la que estaban Marcos y Vanesa y la mía.

— Cogí mi pijama — vengo enseguida acuéstate y si quieres pones algo para ver.
— Okay, te espero — me cambié de ropa y me acosté a su lado.

   Nos pusimos a ver una película él puso su brazo debajo de mi cabeza y me acercó a él. Yo me sonrojé, terminando de ver la película fui a la cocina a tomarme un vaso de agua, al regresar él ya estaba dormido o eso parecía así que me acosté sigilosamente y me acomode de espaldas a él. Cuando iba a quedarme dormida, sentí que él se viró hacía mi y me puso la mano en la cintura abrazándome. Yo estaba feliz recordé todos los bonitos momentos que vivimos y entre una cosa y la otra me quedé dormida.