Amor Prohibido

Capítulo 31

Perdón por ayer dejarlos en suspenso pero aqui les traigo la continuación.

Los quiero 😘

               ❤❤❤❤❤❤❤❤❤

Yo estaba de los nervios, no sabía la respuesta que daría Javier ante sus padres y tantas personas.

— No acepto — todo el mundo quedó sorprendido ante la respuesta.
— Javier ven aquí — ordenó su padre.
— No padre, no seguiré viviendo esta farsa de la pareja feliz. Usted sabe bien claro que yo no amo, ni me quiero casar con Melisa.

    Melisa se quedó anonadada, estaba segura de que ahora mismo daría un millón de dólares a estar en otra parte…

— Madre entiéndame usted sabe que la mujer a la que amo, es a Amanda.
— Javier te vas a casar con Melisa y punto — ordenó su padre.

“No creó que estés hablando en serio” “Deja a tu hijo ser feliz”
Comentarios como esos comenzaron a sonar por toda la Iglesia.

— Padre, madre lo siento, pero hoy no va a haber ninguna boda.
— Javier — gritó Melisa. 
— Lo siento — dijo Javier mientras me sujetaba la mano y salíamos de allí.

 Nos montamos en su auto y nos fuimos

— ¿Y ahora que haremos? — pregunté.
— Nos mudaremos juntos tranquila mis padres no harán nada.
—¿Y Melisa? Recuerda que la has dejado en la iglesia.
— Tranquila ella no hará nada.
— Eso espero…   

   Quería creer la idea de que Melisa no haría nada, pero algo me decía que no estaríamos seguros mientras ella supiera nuestra ubicación.           

En la casa 

— Hola chicas — dije entrando con Javier.
— Hola, ¿oye no se supone que ahora estarías casado con la bruja esa? — Preguntó Sofía
— No, al parecer la vida me tiene otros planes — Respondió Javier.
— Amor iré a cambiarme, vuelvo enseguida — dije.
— Tocan la puerta de mi habitación — Adelante…
— ¿Amanda por qué tienes esa cara, acaso no estás feliz? — preguntó Vanesa.
— Si es solo que… Estoy segura de que Melisa no se rendirá, ella hará algo, lo presiento.
— Todos estaremos atentos, tranquila.
— Gracias — apoyé mi cabeza en su hombro.  

    Estuvimos conversando un rato en la sala, estábamos todos, vimos una película y miento si digo que me logré concentrar. No hallaba como relajarme, estaba feliz al fin tenía a Javier conmigo, pero aunque me dijeran que no, o me calmaran, yo sabía que Melisa iba a seguir siendo mi peor pesadilla.

— Bebé iré a mi casa necesito mi ropa y es necesario que les diga a mis padres que me mudaré.
— Está bien amor, pero cuídate y ve con cuidado. Te amo.
— Yo más — Me besó y salió de casa…   

    Fui a mi habitación a acostarme un rato y me quedé dormida, me desperté un ratito después por una notificación que llegó a mi celular. Pensé que sería un mensaje de Javier pero no, no fue de él…

Hola Amanda, creó que no sabes en el riesgo en el que te has puesto después de lo que hiciste hoy. Prepárate porque esto es guerra y ni tú, ni Javier se salvarán. Mantén los ojos bien abiertos.