Reencarnado en Demon Slayer (Con un sistema)

Capitulo 16

Capitulo 16: Selección final.

Time skip.

Ha pasado ya un año y medio desde mi llegada al monte Tate, un año y medio en el que he sido incapaz de no pensar en otra cosa que no fuera mi familia, noche tras noche haciendo la misma pregunta: ¿Estarán bien sin mí...? La idea de que algo les hubiera sucedió en mi ausencia me hizo querer rendirme y volver bajo las alas de mi madre y hermanos en mas de una ocasión, sin embargo, el conocimiento que poseo del futuro me a impedido dar marcha atrás, siendo victima de una lucha constante, todo esto me a llevado hasta el día de hoy.

El sol se encuentra en su punto máximo de la mañana dando indicios de que es el medio día por el calor que se siente pese a estar cubiertos por las ramas de los árboles, el sudor baja por mi mejilla reflejando involuntariamente los nervios que siento muy dentro del estado de concentración que muestro a simple vista, pues parada a aproximadamente veinte metros frente a mí se encuentro mi maestro. Nuestras miradas se interceptan una a la otra, sin perder en ningún momento la atención del que esta parada frente a él; incapaz de moverme de forma imprudente frente a un hombre como él, mi cuerpo se ha visto imbuido en completa contemplación a lo que este por venir.

Aún pese a estar en semejante situación, las palabras dadas por mi maestro antes del encuentro de practica han logrado que se expresara en mi rostro una radiante sonrisa, siendo muestra de lo que puedo llegar a recibir si llegase a simplemente rosarlo.

¨Si logras atinarme únicamente un corte esta vez, te daré permiso de probar suerte en la selección final.¨

La selección final...ciertamente no había pasado por alto el hecho de contarme sobre la prueba final de todo aspirante a cazador de demonios, y el hecho de que me otorgara la oportunidad de partir a ese encuentro tras más de un año de entrenamiento me trae un conjunto de sentimientos que soy incapaz de describir. ¿Seria correcto decir que es emoción lo que siento...? Ser capaz de salir del nido y conocer el mundo real es un escenario que herriza mi piel en muestra de lo impacientado que estoy.

¨Bien niño, hagamos esto con las reglas de siempre, un golpe y ganas, cinco golpes y pierdes, además de correr un kilometro por cada golpe recibido.¨

Asentí furtivo a lo planteado antes de iniciar el combate.

¨Me parece bien...¨

Tal parece que a diferencia del entrenamiento que tuvo Tanjiro en la historia original, yo no tendré que partir una roca a la mitad, en su lugar, tengo que enfrentarme al hombre que me a enseñado todo lo que se...

¨¿Estas listo...?¨

Al unisonó de escuchar su pregunta, aprete con fuerza el mango de mi katana, la misma es una con un filo capaz de cortar sin necesidad de ejercer fuerza. A la par de esto inhale todo el aire que mis pulmones fueron capaces de soportar, asegurándome de realizar el uso correcto del método de respiración enseñada por mi maestro; al observar la postura que toma, solo soy capaz de agradecer para mis adentros el hecho de que esta usando una simple katana de madera carente de filo.

En el instante en que estaba por preparar mi ataque, el lugar en que solía estar mi maestro se volvió borroso por breves segundos, haciendo palidecer en contemplación de lo que estaba por suceder.

Una velocidad incapaz de superar en estos momentos, es a eso a lo que me enfrento...

En tan solo un parpadeo el que se encontraba a una distancia de veinte metros ahora está a centímetros de atinarme un golpe. En respuesta hago descender instintivamente mi arma en el intento de interceptar el ataque que estoy por recibir, a la vez que flexiono los músculos de mis pies.