Alma de dragón: Oscuridad.

Capítulo 5: SECUESTRO

Estela:

Llevamos aproximádamente trece horas esposados a la pared de piedra. Sin comida ni agua. Nadie sabe de Reneé y los oscuros se han llevado a Blair a otra sala. Lo recuerdo con horror.

-¡Hijos de puta!¡Soltad a mí hija!-gritó Graciela volviendo sus ojos negros como la noche. Leire y yo nos quedábamos quietas. Esta hacía presión con la mandíbula y los chicos se agitaban desesperados por liberarse y luchar.

A Jenebive la cogió en brazos un chico rubio, de pelo casi blanco, y ojos verdes chillón. La pobre estaba insconciente. Salió por la puerta y cerró.

-Los mataré, los mataré a todos. -susurró Lukas.

El aire estaba lleno de tensión. Todos necesitabamos matar a alguien pero el miedo era mayor en ocasiones. Ahora tenía dos cosas de las que preocuparme, de Jenebive y de la desaparición de Reneé.

-¡Hijo de puta!...-todos nos pusimos tensos de golpe y miramos a la puerta.

-¿Lo habéis escuchado? -pregunté para romper el silencio.

-Creo que sí.-dijo Jake.

-Era Reneé. -confirmó Leire. Mi corazón aligeró su ritmo cardíaco. No sé si era de emoción o de miedo. Emoción por saber qué Reneé estaba viva y miedo por el grito que había pegado.

-¿Qué creeis que le estarán haciendo?-pregunté asustada.

-No lo sé...pero no creo que se pasen.-dijo Lukas.

-¿Porqué dices eso?-le preguntó Graciela.

Lukas la miró.

-Porque es como era Sam, es medio oscura y los oscuros nunca traicionan a los suyos. -

-Ya...pero es que ella es MEDIO oscura.-dijo Leire.

-¿Y?-preguntó Lukas.-Con esa mitad es suficiente como para que no le hagan daño.-dijo.

Miré al suelo preocupada.

-No hay nada que hacer.-susurró Jake rendida.

-Hay que sobrevivir. -dijo Graciela en eso que otro un chico con el rostro cubierto con una máscara y parte de una capucha negra entra en nuestra enorme prisión. En sus brazos acogía un cuerpo insconciente cuyo rostro no llegaba a ver ni yo, ni nadie.

El hombre entró a paso lento y se paró enfrente de Graciela. Después depositó el cuerpo en el suelo entre a Graci y Jake. El cuerpo inconsciente tenía el rostro cubierto con una máscara blanca y, la persona que trajo el cuerpo comenzó a esposarle las muñecas y los tobillos.

Aparté la vista para cuando le comenzó a clavar los horribles y enormes anzuelos en los hombros que yo también sentía a cada movimiento.

Rápido el chico le quitó la máscara y se largó. Mi amiga , Reneé, estaba insconciente delante de mis narices.

Reneé:
Frío, sentía un agradable frío. El cuerpo me pesaba como nunca y me sentía cansada y sin vida.
El aire que respiraba era pesado y insoportable. Moví ligeramente mi cuerpo con los ojos aún cerrados.

Las muñecas me comenzaron arder como nunca y una sensación de ácido me recorrió garganta arriba. Me aparté rápidamente y devolví la famosa y asquerosa bilis.
Abrí los ojos con pesadez y lentitud. Me dolían.

Me encontraba en una especie de cúpula de piedra. Por el ambiente parecía que estaba bajo tierra. Una arena oscura cubría el suelo y contemplé mis piernas estiradas y medio enterradas. Vestía una especie de pantalones chubasqueros negros. La camiseta no la alcanzaba a distiguir del todo pero era azul muy clarito.