He tratado de conocerte los últimos meses; te he observado como mi proyecto de medio tiempo, te he mirado como el chico de mis sueños sin quererlo.
Nuestro primer conflicto se resolvió de una manera inteligente emocionalmente y en general, de managers llena de tacto.
No se como escribirte o decirle a las palabras propias; más cuando te veo ahora, tú energía no me impone como lo hacía los primeros meses. En ocasiones me ruborizas y me conmueves, me haces mirar hacia mis pies y evadir el rostro de la vergüenza. Más nunca hubiera creído que nuestra relación avanzaría a una forma tan grata; éramos la materia prima con todos sus elementos para formar algo y aunque no sabía que forma tomaría- claramente, su figura es inusual. Es algo tan circular de mi parte- es sólido- una esfera y un círculo más esta hecha de tantos elementos que no puedo describirla.
Me gustaría elaborar de manera concreta todas las razones por las que te amo y te adoro más creo que en aquel acuerdo silencioso, de nuestros votos antes del matrimonio- creó decir entonces que es algo que no se habla mas se sabe. Si puedo era colocar mis manos como escudo de cualquiera que se atreviera a decir algo de ti, defendería de manera intuitiva la situación sin causar estragos. Porque, se que de manera intuitiva y de manera irreverente, que aprecias mi sentimentalismo de por medio.
Te quiero tanto. Y cada detalle que haces por nosotros me conmueve- la manera que te diriges e interfieres- la manea que te estresas más no lo dices. La manera que tomas responsabilidad y muchas personas no lo hacen.
Tú no dices nada quieres tu espacio y tu tiempo; así que te lo doy sin riesgos. Porque existen tantos acuerdos intuitivos entre nosotros que yo sólo se como complacerte y tú solo sabes agradecerme; más no se del todo si un gracias para mi es suficiente- no por mi.
Más porque te miro a ti.
Observó la manera que te mueves; la manera, tus pequeños detalles, la preocupación de tus ojos, la atención. Entonces me dices gracias y sólo quiero llorar.
¿Gracias por que? ¿Por observarte? ¿Por mirar la velocidad y la manera que te mueves y no reconocer entonces que quizá, estás cansado? ¿Qué quizás, haces demasiado sin decir nada? Puede que ames así más negar entonces tus esfuerzos me duele. Mis ojos se aguadan nuevamente y te miro a los ojos y me muerdo los labios. Hay tantas cosas que decir y muy pocas cosas que declarar. Me quieres abrazar fuertemente porque no te gusta verme llorar más no se si lloro de tristeza, de frustración o de felicidad.
Que orgullo tenerte en mi vida, que horrible que nadie lo haya observado, que frustración que la gente no lo vea. Te quiero sostener entre mis manos y besarte la boca, la frente, el rostro. Quiero apretujarte fuerte, mirarte a los ojos. Porque lo veo todo y no digo nada- y solo te lo repito con la esperanza que mi voz hable y reconozca lo que los demás no hacen. Como quisiera que te dieran el crédito, como quisiera que reconocieran tus grandes esfuerzos. Y tú me dices que me aprecias, que aprecias que esté en tu vida y que sea tuya.
Más yo no se del todo si merezco ese crédito. Solo pienso que la gente puede ser tan cruel. Y solo quiero llorar porque, ¿cómo es posible que no lo vean?
