Mystici [H.S]

Capitulo 16: Imposible escapar

Con una buena nota en mano, Harry ya está contento, pues ahora tenía vacaciones, el semestre había acabado, prácticamente podía decir que era un profesional, pero aun faltaban las prácticas ¿pero qué más da? Ya no tenía que madrugar ni trasnocharse.

— Harry eres el tipo más tonto que conozco—regaño Connor

— Por favor, el hecho de que no me quiera coger a Calíope no significa que soy tonto—resoplo

— Es que solo el hecho que digas eso, te convierte en un tonto aun mas grande

— ¿ si tanto interés en ella porque no te la follas tu?—cuestiono Harry y Connor hizo una mueca de fastidio

— Porque ella solo tiene ojos para ti, si ella me hablara en la forma en la que te habla, hace milenios la hubiera hecho gemir

— Conquístala, nada pierdes

— Eso mismo te digo yo a ti

— Ay por dios, nunca entenderás

Siguieron caminando hasta llegar a la cafetería del la universidad, había una ronda donde todos animaban una pelea. Ellos ni cortos ni perezosos se adentraron hasta llegar a un punto donde podías ver todo, pero vaya sorpresa la que se llevo Harry. Eran lea y marcela agarrándose. El nunca había visto a marcela de esa forma, claramente estaba iracunda y si seguía golpeando a lea, seguro le terminaría partiendo algún hueso. Se metió en el centro, abrazo a marcela y la saco de la escena.

Las personas habría paso, mientras que Harry, gritaba y refunfuñaba. Cargo a marcela y la llevo hasta la enfermería. Por todo el camino hacia la enfermería marcela no dijo nada, estaba callada. Cuando finalmente llegaron él la recostó en una camilla y una enfermera empezó a curar sus rasguños.

— ¿ qué pasa marcela?—cuestiono Harry

— La odio, es una perra sin sentimientos—contesto de mala gana

— ¿quien empezó la pelea?

— Yo comencé los golpes, ella los insultos, mi intensión era partirle la mandíbula, pero la muy perra tiene buenos huesos

— Por favor marce, no te tenias que rebajar a su nivel—le dijo Harry con un tono dulce

— Harry, ya estaba cansada de sus insultos e humillaciones, no mas Harry no mas—sollozo

— Pero así no se solucionan las cosas. ¿ piensa ahora? Te suspenderán ¿tu carrera?

— Harry, por favor—rio y limpio sus lagrimas—hice tantos vacacionales que termine antes de tiempo. Solo termino de hacer practicas

— Bueno si, pero de todos modos

— Pero, ya no ha pasado nada, y hoy tengo un plan que hay que cumplir

— ¿cuál?

— La feria está en la ciudad, y tengo dos pases, Anker y tu irán —sonrió y Harry devolvió el gesto

— Estas tratando de juntarme con Anker—afirmo el

— No, solo cumplo las cosas de su lista, creo que tu, Ann y Anker son los únicos amigos que he tenido

Marcela metió la mano en el bolsillo de su falda, saco los dos boletos y se los entrego a Harry.

— Aprovecha tonto, son pases para subirte en todo—guiño un ojo y Harry rio por debajo

— Gracias

— No es nada, ahora ve, yo estoy bien, no volveré a golpear a esa zorra

— Eso espero, te quiero adiós—se acerco y le dio n tierno beso en la frente. Dio media vuelta y se marcho.

Harry salió de la universidad y empezó a caminar hasta su casa. El día estaba nublado, pero era agradable. Sentía que alguien lo miraba, lo espiaba, giro lentamente su cabeza, pero no había nadie. Siguió caminado unas cuadras más hasta llegar a la pensión. Saco las llaves de su pantalón, las introdujo en la puerta y abrió. Entro, cerró la puerta y camino hasta el cuarto. Abrió la puerta del cuarto y ahí estaba Anker. Tenía puesto un pequeño vestido azul. Lucia hermosa. Al ver a Harry se levanto de la cama y con un brinco se tiro en el.

— Llegaste—grito y beso los labios de Harry rápidamente

— Así es, y hay buenas noticias, ahora estoy de vacaciones—sonrió y le dio un beso corto

— ¿ significa que?—cuestiono ella con una gran sonrisa en su rostro

— No mas trasnochos, no mas parciales, y podemos hacer todo lo de la lista—respondió el y los ojos de ella se abrieron de gozo

— Es más, ahora mismo nos vamos para el parque de diversiones

— Está bien

Harry camino con ella cargada hasta la cama y la dejo ahí tendida, mientras se perdía en sus ojos verdes, con toques dorados.

— Me gustas Harry, y mucho—siseo provocando que en los ojos de él se dibujara una sonrisa

— También me gustas Anker, y has puesto mi mundo de cabeza. Ahora ve a alistarte. Creo que esto será como una cita

El se separo de ella, y camino hasta su armario, saco una camisa roja de cuadros junto con un jean negro, empezó a desvestirse, sin notar que Anker lo estaba viendo, justo como la primera vez. No se sentía incomodo, pues tener la mirada de ella era algo sexi y de que en cierta forma lo excitaba.

— Estoy lista—dijo ella, rompiendo el silencio que reinaba

— Amm, yo aun no—contesto él con pesadez

— Sabes, en el tiempo que llevo aquí, note que usas pantalones demasiado apretados—burlo

— ¿qué? No vamos no son apretados—dio media vuelta para encontrarse con Anker

— Si, además te debe apretar ahí—paso su mano por la entrepierna de Harry provocando que él se estremeciera. El hecho de que se llegara a formar una erección sería bastante doloroso, pues el jean maltrataba

— Anker. No hagas eso de nuevo, ya sabes lo que pasa

— Está bien, no hay problema—sonrió pícaramente.

Anker tenia dones, unos dones obsequiado por su tía afrodita. Belleza, con toques de afrodisiaco, Anker era irresistible para cualquier hombre. Especialmente para Harry, quien ya había caído en ellos, y ahora se le sería imposible escapar. Pues, su cuerpo, mente y corazón querían mas de Anker, querían tenerla cerca. No quería que esa hermosa chica se fuera y dejara un vacio en el.