Capítulo 5

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Despierto sobresaltado, de tal forma que casi caigo del árbol. Pienso en el sueño que tuve hace unos segundos y me acuerdo de que tengo que ver si veo a la chica desde aquí, me acerco al borde de la copa del árbol y veo a una chica que está andando por el bosque, más bien a la chica por la que siento curiosidad, no será ella ¿verdad? Miro a ambos lados y no veo a nadie más así que confío en que es ella a la que debo seguir como dijo en mi sueño la voz.

Veo que la chica se agacha, me pregunto para qué, pero entonces se levanta y veo que tiene a la gatita en brazos, y le está echando como una crema en la pata, ¿le habrá pasado algo mientras la despistaba? Intento escuchar lo que dice ya que la veo mover los labios y le consigo escuchar decir:

-¿Dónde están tus padres, gatita?- Hace una pausa y continua-Te vendrás conmigo, ¿de acuerdo?- Y se va andando hacia lo que parece ser la salida del bosque. Salto de mi rama a otro árbol, no sé porque pero me siento muy ágil desde el sueño, ya que estoy siendo capaz de ir de árbol en árbol, aunque están cerca uno de otro, me es extraño sentirme así, como si fuera un ninja. Cuando no queda ningún árbol por el que pueda continuar siguiéndola veo hacia dónde se dirige, va directa a un pueblo, que extraño que haya uno tan cerca del bosque, me extraña que el señor tenga ese pueblo como legal... Aunque recuerdo que un día en el palacio me colara en su despacho, donde tiene un montón de documentos, y mientras estaba dentro...

Mientras estaba dentro escuchara unos pasos que se dirigían al despacho, yo me escondiera en un armario en el cual cogía a duras penas y eso que tenía 4 años, abrieran la puerta y era el señor y otra persona que hablaban de algo de un pueblo que había sido construido muy cerca de los límites, y el señor dijera que lo mandaría derrumbar, pero la otra persona hablara y dijera algo como que ahí vivía un niño que era especial, ya que provenía de algo importante, y supongo que era más que especial ya que el señor se pusiera muy nervioso y enfadado, y gritaba cosas como "¡No voy a permitir ... arrebate ... trono!" y cosas por el estilo, cuando pensaba que no aguantaría más allí dentro alguien entrara y dijera que el señor lo siguiera, la persona que entrara con el señor se quedara dentro, y me resultara muy extraño que cerrara la puerta con llave y se acercara a donde estaba escondido y preguntara "¿Estás cómodo ahí dentro? Seguro que no, anda sal, no te haré daño" Me asustara pero aun así salí, y la persona era un hombre que vestía bastante humilde, no me acuerdo nada más del, pero sí que me ayudó a salir de allí sin que nadie me pillara y me dejara en mi habitación la cual estaba vacía ya que me trasladara a una nueva, el hombre me dejó y se fue sin antes entrar y decirme "No confíes en nadie, solo en una persona, tú persona amada, si no haces lo que te digo sufrirás" Esa frase se me quedó grabada de tal manera que a día de hoy la recuerdo y sigo su consejo, pero voy a rechazarla un momento para conocer a esa chica, pero de momento la voy a seguir sin que se dé cuenta, la sigo con la mirada hasta donde parece ser su casa, observo desde la copa del árbol hasta que todo el pueblo apaga las luces, y no queda un alma fuera de casa, cosa que fue poco tiempo ya que eran las 11 y no tienen mucho que hacer, bajo del árbol y me acerco a mi destino, al llegar al pueblo busco mi meta y cuando la encuentro miro por la ventana, al parecer según veo su casa es una de las más grandes, aunque solo porque tiene un piso más al que da a lo que parece ser la habitación de la chica, ya que vi en la parte de abajo desde afuera y vi lo que serían sus padres, escalé un poco la casa hasta el segundo piso, miro por la ventana y veo que el ático es la habitación de la muchacha, ya que está tumbada en su cama, solo que parece que no duerme, sino que está mirando al techo pensando, de repente mira hacia donde estoy, y estoy apoyado y no puedo reaccionar muy rápido por lo que tarde unos segundos en dar un salto y trepar hasta el techo, después de un rato volví a la ventana y vi una milésima de segundo y aparté la vista, la chica estaba en ropa interior buscando ropa en el armario, la imagen me embobó un poco aunque me cueste admitirlo, y supongo que me sonrojé, pero eso no es un problema, el problema es que me resbalo y caigo del techo, por suerte cuando caía me engancho al saliente de la ventana del ático, y al intentar reincorporarme veo dentro de la habitación y la chica está vestida con un chándal, de chaqueta negra y pantalón negro, la chaqueta no la tenía puesta sino que la tenía encima de la cama y justo veo por la ventana en el momento en el que se pone su camiseta roja oscuro, se sienta en la cama y se ata unos tenis negros, coge un peine y se peina, (obviamente, no iba a coger un peine y ponerse a cantar) se hace una coleta, se pone la chaqueta solo que no la llega a abrochar y coge unas mochilas, ¿se va a escapar? Viendo esta escena parece que se vaya a fugar de casa... Cuando baja las escaleras va despacio para no hacer ruido, abre la puerta y se larga hacia el bosque, yo bajo de la ventana y la sigo intentando no hacer ruido para que no se gire y me mire. Cuando estamos dentro del bosque, se para de repente, se sienta y mira una de sus mochilas, yo, de mi parte para que no me vea me escondo detrás de un árbol, el cual no me gusta ya que casi no tiene ramas por las que poder subir más rápidamente, veo a la chica que está mirando dentro de una de sus mochilas mientras dice asombrada:

-¿Cómo te colaste dentro de la mochila?-Al parecer está la gatita dentro de esa mochila, la gata maúlla mientras la chica la coge en el colo, pero la gata salta de su colo a su hombro y de este a su cabeza y se acomoda ahí-¿Quieres ir ahí? ¿No te caerás?-La gata maúlla- De acuerdo, si quieres ir ahí...-Dice mientras coge de nuevo las mochilas y se levanta y sigue su camino, cuando llega a una cueva entra en ella, deja las mochilas y se pone a jugar con la gata, yo intento mantenerme despierto para ver que hace pero a los minutos viéndola desde un árbol me quedo frito.

Unas horas después de echar esa siestecita me despiertan ladridos de un perro, voy a ver qué le pasa a ese perro que no para de ladrar y a los dos minutos de ir en busca del perro veo que hay un celeste que tiene a la chica agarrada por el cuello y dice:

-¡Los que van a morir no necesitan información!- Yo rápidamente saco el arco, una flecha y tenso el arco, pero el hombro me traiciona y no puedo hacer fuerza y maldigo todo mientras veo al celeste ahogar a la chica, y cuando empiezo a correr hacia ellos mientras los destellos aparecen en mi mano y sale la espada pero cuando voy a acelerar para clavarle la espada al celeste alguien le lanza una flecha en el corazón y lo mata. Vuelven a aparecer destellos en mi mano y la espada desaparece, doy un rodeo para ir al lugar del que procedía la flecha, pero cuando llego no veo a nadie, entonces veo hacia la chica y observo que al sacarle el ojo de encima le empezó a atacar un perro, veo la escena en la que ella usa un palo para que el perro no la muerda, estira su brazo libre y coge otro palo y le da con él al perro en la cabeza, el cual se quita de encima suya, después veo a la chica combatir con el perro, lucha bastante bien, esquiva y ataca, sus reflejos no están nada mal. Le da un golpe final al perro y este se queda tumbado. Me siento mal por no haber hecho nada. Me subo a un árbol que está detrás de mí, golpeo un poco un arbusto bastante grande y la chica supongo que se giró hacia aquí, lo único que espero es que no me haya visto. Vuelvo lo más rápido a la cueva en la que ella se dirige, necesito esconderme en algún sitio, y esa cueva está bastante escondida por la flora. Al llegar entro y como veo que las mochilas de la chica están bastante a la vista las cambio de sitio en un lugar al fondo de la cueva, junto a ellas pongo la mía y mi arco y carcaj. Supongo que dentro de poco llegara la muchacha, así que me siento en una roca en la que parece una mesa y dejo allí frutas, para no tener que ir a la mochila, como algunas frerizas y una manzana, y entonces veo una silueta familiar fuera de la cueva.

El Guardián De La ElegidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora