Capítulo 7

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-¿Tú... Tú quién eres? ¿Y qué haces aquí?-Pregunta al verme y yo, con mi más seriedad le digo:

-Hola, damisela, solamente pasaba por aquí-De acuerdo, no solamente pasaba por aquí, ni es una damisela, pero bah, detallitos sin importancia.

-Dime quien eres y la verdadera razón de porque estás aquí-Vaya, no pensaba que fuera tan descortés. Me mira como si yo fuera una mísera hormiga o algo así.

-De acuerdo de acuerdo, no me mates con tu mirada de superior-Digo levantando los brazos lo que puedo, ya que el hombro izquierdo todavía no lo podía levantar mucho sin que me dieran pinchazos-Bueno, ahora en serio, yo me llamo Jonathan, ¿y tú?-Ya tengo ganas de saber cómo se llama, llevo con la curiosidad años.

-Mi nombre es Angel, y ahora dime que haces aquí, YA-Angel... Que nombre más bonito, pero no deja de lado el tono borde. A la pregunta no le puedo decir la verdad o se pensará que estoy loco, así que mejor sigo con lo de estar por casualidad.

-Solo estoy aquí de casualidad, ya te lo dije-Digo apoyándome en la pared, y le pregunto algo que me da curiosidad siempre que la veía y la veo--¿Y qué me dices de ti? ¿Qué hace una niña en un lugar tan peligroso? ¿No sabes que si te pillan aquí los celestes te matarán? ¿Es que no tienes miedo?-Si no tiene miedo es lo que me preocupa más. Ella me contesta:

-A ti que te importa que haga aquí, no es de tu incumbencia lo que yo haga o deje de hacer. Y no me llames niña-Me amenaza apuntándome con la mano. Me parece increíble que no me lo quiera decir, si todavía no la maté significa que soy bueno, así que, ¿por qué no se sincera? Aunque aun así le digo:

-Vale vale, niña, ya no te llamaré niña. Y por cierto, importar sí me importa lo que hagas aquí, no quiero que alguien tan joven muera, ya hay demasiadas muertes como para que tú te incluyas en esa lista por ir de paseo-Digo de paseo porque tampoco sé a qué viene al bosque. Aunque no creo que venga de paseo arriesgando su vida, por muy bonito que sea esto. De repente escucho como unos pasos mientras Angel me habla diciéndome:

-¡No estoy dando un paseo! ¿¡De acuerdo, guapo!? ¡Fuera de a...!-No la dejo acabar y le digo que se calle.

- Sssh, cállate-Me obedece. Yo me voy acercando a la entrada de la cueva, asomo la cabeza y veo a unos 8 celestes. Me voy echando para atrás pero veo que está Angel y le digo en susurros que vaya a la parte de profunda de la cueva al haber visto que los celestes se aceraban a donde estamos. Angel es muy lenta, así que cuando estoy cerca de ella salto y la dejo medio debajo de mí, medio a mi lado hacia la oscuridad la cueva. Angel me empieza a preguntar que pasaba, y yo le respondo "Cállate y no te muevas" así hasta que se calla. Tuve suerte de saltar porque justo cuando veo hacia afuera veo que un celeste entrara para ver si había alguien. Después de unos minutos sin encontrar nada ya que parece que sea cegato porque ni siquiera al acostumbrarse a la oscuridad nos vio se largó y junto a él se escuchan los pasos de las 7 personas restantes alejarse. Me pongo de pie y ayudo a Angel a levantarse pero rechaza mi oferta chocándome la mano para apartarla, todavía no se fía de mí, la verdad, lo veo normal, no todos los días un chico te salva la vida de ser asesinado al instante, así normal que no se fíe de mí (Espero que se note la ironía).

-¿Estás bien?-Le pregunto a la chica, a lo que responde:

-He pasado momentos mejores pero sí, estoy bien. Menudo oído tienes, ¿cómo sabías que se acercaban?-Me pregunta.

-Supongo que es una habilidad que tengo, nada más.-Mentira a medias, sí que es una habilidad que tengo pero que me obligaron a desarrollar lo máximo posible-Aaa (Suspiro) menudo susto he pasado, por un momento pensé que nos pillarían de lo lenta que eres.-Eso sí es verdad.

-¡Eh! Eso me ha ofendido...-Dice haciéndose la víctima.

-Bueno, al final por suerte no pasó nada, pero la próxima vez intenta ser más rápida-le digo, aunque si soy sincero me gustaría poder irme y no tener que temer por la chica, pero esos sueños... Eso es lo que hace que me quede, quiero descubrir quien es la persona que me habla en sueños, y creo que si me quedo junto a Angel como me dijo y la protejo de todo mal lo podré descubrir... Espero.

-¿Es que va ha haber siguiente vez?-Parece que la reina de Roma se dio cuenta de que me pienso quedar junto a ella, pero no por gusto.

-Quién sabe...-Le digo eso para que piense un rato, además de que si la dejo dudosa no habla en un rato y quiero silencio. Me acuesto en el suelo, y al ver que Angel iba a decir algo yo me adelanto y digo-Pero ahora deberíamos descansar, ya es tarde-Me giro de manera que no la veo. Aunque pregunta:

-Un momento que me aclare... ¿¡Piensas quedarte aquí o qué!?-Al final se da cuenta, por favor, traigan el trofeo de platino por la persona que más tarda en captar las indirectas, porque ha ganado por goleada, señores.

-Sí, ¿hay algún problema?-Le digo girándome y sonriendo.

-¡Pues claro que lo hay!-Responde.

-¿Cuál?-Pregunto ya cansado, ¿me va a dejar en paz de una vez, tengo sueño.

-Pues... Esto...-Es lo único que dice.

-Recuerda que gracias a mí no te pillaron, creo que no te vendría mal alguien que te proteja, yo seré tu guardián-Le digo señalándome, sonriendo y guiñándole un ojo, cosa que hace que se sonroje... Por esa bobada, Por dios, como va el mundo.

-¿¡Te crees que no me sé cuidar sola!? ¡He sido capaz de derrotar a un perro asesino y a un...! Bueno, quizá al celeste no pero aún así...-Parece que está teniendo una pelea en su interior hasta que dice- Odio que tengas razón, pero sí, creo que necesito a alguien que me ayude, no que me proteja, ¿entendido?-

-Okay. Bueno, buenas noches, este sitio es cómodo. Si quieres comida te dejé encima de aquella piedra-Digo señalando la piedra y quedándome frito en el sitio, por fin puedo dormir y olvidarme de todo lo que está pasando. A duras penas escucho "De acuerdo..." que dice Angel.

El Guardián De La ElegidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora