Puticienta

Capitulo 8:

Capitulo 8:

No se sabe como carajos Benjamín logró desatar sus manos de la cama, se sobo las muñecas tratando de aliviar el dolor de las apretadas esposas, se coloco de nuevo los calzoncillos y salió corriendo del cuarto en busca de la rubia.

-¿y?- pregunto Rocío cuando visualizo a su mejor amiga corriendo por el pasillo con una sonrisa que solo se veía cuando lograba hacer una maldad

-¡Lo tengo!- respondió emocionada, al momento fueron interrumpidas por su mejor amigo

-¿lo tienes?- pregunto Zayn, Eugenia le dedicó una mirada cómplice, con la cual respondió su pregunta, los tres sonrieron y salieron corriendo, Eugenia le entrego a Peto un casete, no le dijo que lo reprodujera en pantalla grande, al parecer, en este malévolo plan estaba incluida toda la "familia", Candela y Mariana se encontraban entre el publico y Benjamín miraba asustado aquella escena, el casete se reprodujo (Tipo cine, en pantalla grande).

Los ojos de Candela se cristalizaron... ¿Cómo pudo hacerle eso?, solo la estaba usando... aunque... ella también lo estaba usando a el para beneficio de su madre ¿o no?, entonces... ¿Por qué le dolía tanto que Rojas la hubiese estado engañando?, era obvio, la estúpida de María Candela Vetrano se había enamorado del patético Benjamín Rojas, el chico que robaba los corazones de todas en la secundaria, cuando el vídeo termino de reproducirse toda la "familia" abucheo al chico que estaba en calzoncillos y lo sacaron a patadas del lugar, Candela no soltó ni una sola lagrima, estaba en shock siendo consolada por su hermana, Rochi, Zayn y Euge solo sonreían victoriosos.

-¿Para quién fue el daño?, ¿para ella o para el?- Eugenia sintió una respiración en su cuello y se dio vuelta

-no creo que eso te importe- le contesto Candy

-claro que no, ni siquiera los conozco... pero pregunto... solo eso- se defendió Nicolás Riera

-fue para ambos- respondió su pregunta al fin, Nico hizo una sonrisa torcida

-¿sabes?, creo que a la persona que más le ha dolido es a vos- dijo serio y se fue.

¡Carajo!, tal vez tenía razón, de los tres a la persona que más le dolía era a ella, porque aunque se había vengado seguía igual de rota, igual de adolorida.

-¿Cómo lo sabes?- dijo en voz alta antes de que fuera demasiado tarde, Nicolás se dio la vuelta y clavo sus ojos verdes en los de ella

-lo veo en tus ojos... de todas las personas que he conocido, tu eres la que mejor sabe fingir que esta feliz... pero por alguna razón yo se que te estas muriendo por dentro- Eugenia sintió ganas de llorar, pero no lo iba a hacer, no iba a volver a ser la misma chica sensible de antes, lo único que se le vino a la mente fue besar al rubio y eso hizo, se abalanzo hacía el y lo beso, el no se negó y siguió el beso.

-¿y eso?- pregunto Nicolás cuando Eugenia se separó de el, Euge se ruborizo (Era la primera vez que se ruborizaba con un chico), sonrió y escondió su rostro en la nuca del chico, Nico rió- ¿Qué sucede?

-estoy enojada con vos- respondió aún con el rostro en su nuca- por dejarme ayer, así, en el cuarto... eso no se hace

-no sentía que estabas preparada... no quiero ser un violador en serie ¿eh?- añadió y Euge rió, alzo la cabeza y lo miro

-esta noche no te salvas de mi- lo amenazo

-créeme... no quiero salvarme de vos

-¿a no?- interrogo

-no, ¿Qué clase de persona quisiera salvarse de una princesa como tu?

-no se, tal vez... una madrastra y unas hermanastras crueles- ambos rieron

-así que... ¿eres tipo Cenicienta?- preguntó divertido

-mhhh, digamos que, una Cenicienta rara

-¿sabes?- dijo mirando hacía la izquierda y la derecha- no quiero estar acá... ¿no prefieres ir a otro lugar?- dijo alzando las cejas

-a ver príncipe, ¿A dónde mas podríamos ir?

-tengo un lugar que estoy totalmente seguro de que te va a gustar- Euge asintió- pero te llevo con una condición

-¿Cuál?

-darme lo que ha nadie nunca le has dado- respondió.

¡¡¡¡¡¡CONTINUARA!!!!!!