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Capítulo 20

Lauren (JaureguiAlwaysDark)

Excelente, Lauren, me digo a mi misma al recostarme sobre la cama del hotel, te has quedado sin Camila, sin Paige y con las mordidas de esa estúpida perra en tu pierna.

Jamás pensé que me gustarían dos chicas a la vez, y tampoco que se los confesaría a ambas el mismo día, en el mismo lugar y casi al mismo tiempo.

La vida es muy extraña.

¿Qué me gusta de Paige?

Creo que su capacidad de entregarse a una persona completamente. Su sonrisa. La forma en la que hace feliz a los demás. La manera en la que expresa sus ideas. Sus hoyuelos. Sus ojos color miel. Su corto cabello color caramelo. Sus pecas. Su piel pálida. Su altura. La forma en la que siempre parece estar cuando más la necesitas...

¿Qué me gusta de Camila?

Sus chistes malos, sin duda. Su voz. Sus ojos color café en lo que en cualquier momento me sentiría complacida en perderme. La forma en la que es solo un poco más pequeña que yo. Lo adorable que es. Su risa. La curva de su boca al sonreír. El brillo de esperanza siempre presente en sus ojos. Sus abrazos. Sus manos sujetando las mías. Sus besos...

Estás en un grave problema, Jauregui.

Lo más extraño de todo esto es que sé exactamente en qué momento Paige comenzó a gustarme... Pero con Camila no tengo idea alguna.

Es en medio de mis pensamientos que recibo una llamada de Normani.

— ¿Qué sucede, idiota? —Le respondo adorablemente. Amo a mi amiga, que eso quede claro.

— Camila le contó a Dinah lo que sucedió y ella me contó a mi como buena novia gobernada. Ahora dime que pasaba por tu pequeño e idiotizado cerebro en ese momento...

Parece enojada, pero no demasiada. Tal vez solo está así porque en vez de estar teniendo sexo con Dinah se ve obligada a hablar de todo esto conmigo.

— No lo sé —Confieso con un suspiro dramático—, yo solo... No quería que Paige viviera bajo la mentira de que Camila le ha sido completamente fiel, pero ahora creo que también lo he hecho porque no quiero que Camz bese a alguien que no sea a mí... Yo jamás quise que ambas me gustaran, Mani. Esto es una completa locura...

— Ni me lo digas. Camila estuvo llorando como loca hasta hace quince minutos, y ahora se ha ido a buscar a Paige para pedirle perdón...

— Pero está lloviendo... —Murmuro antes de mirar por la ventana del hotel, la cual se ha llenado de gotas de agua que apenas me dejan ver el exterior del lugar.

— Eso no parece detenerla. Ni siquiera se ha llevado un abrigo o una sombrilla. Dinah está desesperada por encontrarla, créeme. Teme que un auto la atropelle al pasar la calle como en su libro favorito o algo parecido...

Suspiro.

Me duele saber que Camila va a buscar a Paige y no viene por mí. Me duele saber que Paige ahora sufre por ella y no por mí. Me duele saber que yo soy la única entrometida.

Soy la indeseada... Como siempre.

¿Por qué, Lauren? ¿Por qué siempre cometes errores?

— ¿Cómo va tu pierna?

— Por suerte es una perra pequeña. No ha hecho demasiado daño.

Silencio.

— ¿Qué vas a hacer ahora, Lauren? —Pregunta seriamente.

Creo que la única solución es alejarme, comprarme un nuevo pez y llenar su pecera con mis lágrimas.

— Lo correcto, supongo.