Crack a bottle (Fanfic TVD - Delena)

Capítulo 6

Damon estaba en la barra del bar del burdel, con un vaso de Bourbon esperando a Stefan. Había acordado con Jenna pasarle la vente de las anticonceptivas de las chicas a cambio de que le echase a Stefan un par de pastillas en su vaso de Whisky cuando se reuniese a hablar con Damon sobre las ventas de la semana.

Stefan se sentó con él de mala gana. Damon insistió en invitarle a una copa pero este dijo que tenía prisa y que fuese al grano. Viendo que su plan hacía aguas, el joven narcotraficante intentó buscar una vía de escape a este, un plan B. Acertada o no su nueva estrategia, Damon decidió ir al grano y poner nervioso a su jefe preguntándole cosas que alguien como La Farmacia no tendría por qué saber.

-Vamos, tío. Solo quiero saber un poco más sobre la gente con la que trabajo y mi competencia.

-¿Competencia? ¿A eso se debe toda esta charla? ¿Quieres saber de Silas?

-Bueno, es tu jefe. Me extraña que me dejéis a mí llevar el negocio de las drogas en tu local cuando lo más lógico sería que lo llevase él.

-Silas trabaja en cosas a mayor escala, un simple burdel no le interesa. Pero la gente quiere drogas, y alguien tiene que dárselas. Así que, si quieres seguir siendo tú quien se las dé, más te vale mantener esa boca cerrada y dejar de preguntar por mi jefe.

Dejando clara su amenaza, Stefan palmeó a Damon en hombro con demasiada fuerza y se largó de la sala. El chico de ojos azules gruñó ante el fracaso de su misión y se terminó su copa de un trago. Jenna llegó rápidamente hacia él para recargársela.

-Invita la casa.

-Gracias.

-Lamento que no haya dado resultado el plan –dijo ella con total sinceridad.

-La he jodido, Stefan no va a volver a bajar las defensas conmigo.

Jenna le dio una ligera palmadita en el hombro en señal de apoyo y luego se fue a atender a más clientes.

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Damon iba ya por su tercera copa cuando oyó a unos tipos que estaban sentados en una mesa cercana a él. Estos no paraban de reír con la historia que les estaba contando uno de ellos.

-Lo que os digo, la mejor inversión de mi vida -aseguró Tanner-. Tuve que pujar muy alto, pero finalmente fue mía. ¿Sabéis? La chica estaba por estrenar. Compré el pack virgen completo: boca, coño, culo. Fue una noche maravillosa, la mejor de mi vida y apuesto que ella no la olvidará jamás.

Damon tenía una clara sospecha de quién habla, por lo que apretó los puños con fuerza para no ir cuando él y darle la paliza que ese cerdo se merecía.

-La niña estaba temblando -rió Tanner muy divertido-. No paraba de pedirme que la dejase ir. Y claro que la dejé ir... Pero no sin antes pasar un buen rato. Aún puedo oír sus lloriqueos y gritos de cuando la follé con todas mis fuerzas. Guardo una prueba de ello, la muy zorra me arañó con las uñas en la espalda.

-Sigue contando, tío -le animó un colega cuando este se distrajo con el recuerdo de aquella noche.

-Pues nada, que después de correrme a gusto dentro de ella, le hice jugar con mi polla. Le dieron arcadas, pero tragó como una buena puta. Eso sí, lo mejor fue follarle el culo. Ahí sí que gritó de lo lindo...

"Stefan me contó que tuvieron que ponerle puntos y que estuvo sin poder sentarse una semana -rió el tío como ganas, como si estuviese contando la anécdota más divertida del mundo-. Tuve que tirar de un par de pastillitas para aguantar toda la noche, ya me entendéis. No podía desperdiciar una oportunidad como esa. No todos los días tiene uno a una joven virgen a su entera disposición.