UGLY LOVE: FOREVER YOU (editando)

CAPITULO 6. SE MARCHÓ

7 AÑOS ANTES

MILES

No debería estar nervioso, pero lo estoy, Tate abre sus redondos ojos cuando nos detenemos frente a ella.

- Tate, ella es Rachel, mi novia- no puedo evitar sonreír al decir la palabra novia, no se lo pedí, no hacía falta. Tate tarda unos segundos en responder, recorre a Rachel con la mirada como si sus ojos le practicaran una radiografía.

- Oh, mucho gusto, yo soy Tate Collins- no hay sinceridad en sus palabras, la conozco desde hace mucho, cuando está incomoda o molesta, inicia sus oraciones con un "oh". Evans aclara su garganta, había olvidado que existía, no es el tipo de chico que quiero cerca de Tate, es aburrido, simple y un hipócrita. Alejo esos pensamientos y pregunto lo primero que me pasa por la cabeza.

- Chicos, ¿qué planes tienen?

- Vamos por algo de comer- suelta Evans sin mirar a Tate.

- Genial, nosotros también, podemos ir juntos por pizza.
¿Por qué dije eso? Me reprocho al instante. Evans acepta de inmediato sin mirar a Tate, sus ojos se fijan en Rachel, aprieto los dientes y le lanzo una mirada amenazadora "ella es mía", es un imbécil, como va a mirar así a Rachel delante de Tate, ella es su cita.

Evans y yo jugamos un partido de bolos mientras esperamos la pizza, las chicas están en la mesa, miro con el rabillo del ojo sobre mi hombro, se ven incómodas. Antes de ir con ellas, doy media vuelta ocultando mi rostro de Tate, es muy buena leyendo los labios.

- Evans ¿qué intenciones tienes con Tate?- le pregunto susurrando.

- ¿Quién te crees tú para preguntarme eso, su padre?
Estoy tan enojado, aprieto mis puños, segundos después, separo mis dedos.

- Ella es como mi hermana, Evans, te estaré vigilando, tú a mí no me engañas. Camino hasta la barra y retiro la pizza, me siento junto a Rachel, Evans se acerca demasiado a Tate, sus fosas nasales aletean como un toro rabioso, está muy incómoda, no sé si es por Rachel o por Evans, espero que sea por él.

Luego de un rato, Tate le pide al idiota que la lleve a casa porque se siente "enferma". Vuelve a mentir, no está enferma, quiero que me lo diga mirándome a los ojos.

- ¿Qué tienes pequeña?- le pregunto preocupado

- Solo malestar, creo que me voy a refriar. Me mira directamente a los ojos cuando lo dice, debe ser cierto.

- No hay problema, Tate, te llevaré a casa.
Asegura Evans, en cuanto se alejan, Rachel gira su cuerpo hacia mí.

- ¿Qué hay entre Tate y tú? – sus ojos arden en ira

- No hay ningún Tate y yo -bufo, no le gusta mi respuesta , se levanta de la mesa, furiosa. Corro detrás de ella y la tomo de la mano, rodeo su cuerpo y me coloco delante de ella-. Mírame a los ojos. -Le pido. Ella niega con la cabeza, pongo mis dedos en su barbilla y levanto su rostro, su mirada es triste y apagada.

- Rachel, sé que es muy pronto para decirte esto, pero lo haré. Nunca ne había  enamorado de una chica antes de conocerte a ti.
Ella separa los labios y los vuelve a unir, como si no supiera que decir-. Desde que te conocí, no he dejado de pensar en ti ni un instante; cuando estás cerca, me cuesta respirar, me convierto en un tonto, y te aseguro que no lo soy, no hay nadie más para mí, no solo te quiero ahora, te quiero para siempre, he imaginado un futuro juntos y eres tú, solo tú la que provocas todo eso en mí. Si esto no es amor, te juro que no sé lo que es - debo ser claro para que no le queden dudas-. Te amo, Rachel.
Ella está paralizada, cuento los segundos, le tomó 60 de ellos asimilar lo que le dije. Dos lágrimas recorren su rostro, se acerca a mí y me abraza mientras oculta su rostro en mi pecho, se siente increíblemente bien tenerla tan cerca.

***

Después de nuestra primera cita, es oficial: "somos novios", pasamos el máximo tiempo juntos, no he salido con nadie más desde que estoy con Rachel; con mi reputación, todos ponen en duda lo nuestro, escuché decir que han levantado una apuesta del tiempo que estaremos juntos, espero que apuesten a toda la vida de lo contrario perderán su dinero.

Las chicas juntaron nuestros nombres y nos llaman "Michel", no entiendo con qué objetivo, Rachel me explica que es común en "celebridades", sigo sin entenderlo, nosotros no lo somos.

Hoy cumplimos tres meses juntos, no soy el tipo más romántico de la tierra, pero recordé que era hoy, le regalé un collar sencillo, un corazón cruzado por una flecha cuelga en el.

Espero a Rachel apoyado en los casilleros mientras tamborileo mi lápiz al ritmo de Do i wanna know que suena en ipod. En un mes, terminan las clases y seré libre de la escuela secundaria, Tate arranca los audífonos de mis oídos mientras sonríe.

- ¿Quién lo diría?, Miles Archer esperando por una chica – dice burlona

- Hola pequeña, ¿dónde te has metido?

- ¿Yo? – pregunta alzando las cejas mientras apunta su dedo índice a su pecho–. Nunca me he ido, eso lo has hecho tú.
Paso mi mano derecha por mi nuca y pienso unos instantes ¿cuánto tiempo ha pasado desde que hablé con Tate?

- Lo siento, pequeña, mi vida no es igual ahora.

- No tienes que decirlo Miles, todos lo hemos notado. -Rachel se acerca a nosotros y besa mis labios.

- Debo irme, hablamos luego, Miles – Tate se aleja tan rápido que la palabra adiós no logra salir de mi boca.

- Ni lo pienses –bufa Rachel

- ¿De qué hablas, Rach?

- Tate – escuchar su nombre en sus labios no es agradable, lo dice con desdén. No quiero librar otra batalla con ella ahora mismo, asiento con la cabeza, Rachel sonríe, ver su sonrisa lo vale todo.

****

No sabía que sería la última vez que vería a Tate, me dolió tanto que no se despidiera de mí, Corbin me dijo que obtuvo una beca y no dudó en marcharse, pero ¿por qué no se despidió? ¿Sería por eso que se acercó a mi ese día?, ¿era su despedida? Disimulo con Rachel lo triste que me siento, ella es muy celosa en general pero con Tate lo es más aun.

Un mes después

Aún no he sabido nada de Tate, estaba ilusionado de verla en la graduación pero no asistió, cambió su número de teléfono y cerró su cuenta de Facebook, Corbin no me sabe explicar por qué está haciendo todo esto, se que él lo sabe pero no me quiere decir, arreglaré eso luego.

Rachel: Miles necesito hablar contigo de algo importante.

Miro la pantalla del teléfono por unos minutos antes de responder.

Miles: ¿voy a tu casa?

Rachel: No. Voy a la tuya

Rachel llega en veinte largos minutos, antes de que toque la puerta la abro, sus ojos están inyectados en sangre de tanto llorar, cuando lo hace su nariz se torna roja como su cabello. Rachel se abalanza sobre mí y me abraza sollozando.

- Tranquila, nena –paso mis dedos por su sedoso cabello. Ella se aparta de mí. Me observa durante un minuto, dos, tres.. pierdo la cuenta, su mirada es de pánico puro.

- Miles –hace una pausa bastante larga, yo espero "pacientemente", miento estoy aterrado-. Estoy embarazada.