Dia4 Él

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Se levantó de la cama de golpe y asustado.
"¡Que sueño tan raro he tenido!"
Pensó y se acomodó en la cama nuevamente.
"¿Fue un sueño? Por favor Yerald, tiene que ser un sueño"
Se dijo a sí mismo; froto sus ojos con ambas manos para luego tomar la laptop de su hermana. La encendió y abrió su messenger, buscó lentamente y con miedo el nombre de Carmen para que aparecieran la conversación.
*CONVERSACIÓN ENCONTRADA*
Apareció en la pantalla y él asustado la seleccionó.
"Tranquilo Yerald, sólo fue un sueño más"
La conversación se abrió.

Hola-
                                        -Hola
-¿Cómo estás?
                                  -Bien gracias.
-Oye y ¿sí crees merecer a alguien como Yezmín?
                                  -Ammm
               -¿Quieres ser mi novia?
-Obvio que sí.
-Encanta
                                - :*

-¡NOOOO!
Gritó Yerald enfadado consigo mismo; se sentía terrible por lo que había hecho. Él no estaba enamorado de Carmen, ni siquiera le gustaba un poquito.
Intentó tranquilizarse pero no lo logró, así que decidio meterse a bañar.
Después del largo baño se arregló y bajo a desayunar.

-Pero que cara hijo- dijo su madre viéndolo fijamente
-Déjame mamá.- Yerald se sentó y comenzó a comer sin mirar a ninguno de los ahí presentes.
Llegó la hora de la irse a la escuela, así que, tomó su mochila y salió de la casa junto con su hermana.Camino lo más lento que podía, no quería llegar a la escuela, ese sería su nuevo infierno.
Cuando llegaron al colegio Yerald se fue a sentar aval jardinera donde había encontrado a Yezmin el día anterior.
-Pero mira quién está aquí.- Yerald alzó la cabeza rezando que no fuera Carmen, para su suerte no era ella.
-¡Yezmin!- dijo alegre.
-¿Por qué tan triste?
-¿Triste yo? No, estoy muy bien.- intentó sacar la mejor sonrisa pero no pudo.
-¡Claro! Oye, me enteré de que ya no eres soltero.
-Ah sí.
-Te ves tan feliz,
-Claro.
-Jajaja, vamos sonríe. No puede ser tan malo.
-Si lo es. Ella no me gusta.
-Entonces ¿por qué andas con Carmen?
-Pues nada más.
-Eres un bobo, deberías terminar con ella.
-Eso haré.
-Bueno te dejo. Ahí viene tu novia.- ambos voltearon hacia la puerta y notaron que se acercaba Carmen hacia ellos.
-No me dejes.dijo Yerald suplicando.
-Perdón pero esque tampoco hice la tarea.
Yezmin se alejó lentamente y Carmen llegó hasta Yerald.
-Hola mi amor- dijo Carmen.
-Hola.
-Oye, te veo aquí en el receso para poder estar contigo un rato ¿vale?
-Bueno.
-Te daré muchos besos- le dijo en el oído y susurrando a Yerald.
-Estoy enfermo y no quiero que te enfermes tú.
-No importa.
-Para mi si
-Que novio tan dulce tengo.
-Jajaja ya me voy.-
Yerald se levantó y se fue corriendo.
Durante sus clases estuvo pensando en como escapar de Carmen.Él no quería pasar el receso con ella, él quería estar con Yezmin, quería que ella si fuera su novia.
Al la hora del receso Yerald se quedó en su salón, sacó ina libreta y fingió escribir. Un momento más tarde vio a Carmen asomada a la puerta.
-Vamos mi amor, te estoy esperando.
-Perdón pero tengo tarea.
-¿Quieres qué te ayude?
-No gracias.
-Bueno, te veo a la salida.
Carmen se fue y Yerald suspiro aliviado. A los pocos minutos llegó Yezmin y entró a su salón.
-¿Fingiendo tener tarea?
-No quería estar con ella.
-Sí, lo sé.
Yerald estaba nervioso, tenía frente a él a la verdadera niña de sus ojos.
-¿Quieres quedarte aquí conmigo?
-Está bien.
Todo el receso estuvieron platicando, ambos se estaban divirtiendo mucho. Sonreían, contaban chistes, se molestaban.
Yerald estaba muy feliz por esa oportunidad que él tenía para conocer mejor al amor de su vida.
Ese fue el mejor receso que él había tenido, por primera ves se sentía completamente estable, cómodo, alegre, pero sobre todo seguro de sí mismo.
"Te amo Yezmin."
Daba vueltas esa frase en su cabeza, quería sacarla para que ella supiera que él la amaba como nadie nunca lo haría.

El amor que no es amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora