- Capitulo 9 - [(Chu Chu Chu)]

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Miro por la ventana de la cafetería con una taza de chocolate caliente y naranja en las manos esperando ahuyentar el frío, Seúl tiene un tono particularmente hermoso en otoño, los arboles desnudándose de sus hojas secas combinan muy bien con los días grises, se genera un ambiente algo melancólico pero bellísimo. Bebo otro sorbo y escucho sonar la campanilla de la puerta, era él, puntual como siempre.

- Hola Noona, ¿te hice esperar mucho? - me preguntó con sus sonrientes ojos

- Hola ShinWoo, no para nada, llegué hace poco, ¿quieres un café? - sus mejillas estaban rojas por el frío

- No, de hecho no vamos a comer aquí, tengo algo planeado - ríe travieso

- ah ¿sí? ¿Cuál es el plan? - respondo siguiendo el juego

- es una sorpresa, lo sabrás cuando lleguemos - dice ShinWoo

- ¡uh! ¡Qué misterioso! - replico burlándome mientras el ríe despreocupado

Rápidamente salimos de la cafetería y nos subimos a su auto, mientras él conducía yo veía pasar a la gente y las luces de los faroles que iluminaban las avenidas. Ha pasado algo más de un mes desde que comenzamos nuestra amistad, nos enviamos mensajes a diario para saber del otro, habituamos vernos un par de veces por semana, salimos a tomar un café y a comer algo, pero sobre todo salimos a reírnos. Reír junto a él es un arte, su sentido del humor es único, tiene ocurrencias muy divertidas, el tiempo se me pasa volando cuando estoy con él, sin importar lo cansada que me encuentre no rechazo sus invitaciones porque sé que con un par de horas riéndonos se renovarán mis energías.

Me detengo a mirarlo mientras conduce, tiene un muy lindo perfil, pero lo más adorable es su ceño fruncido, indudable gesto de concentración cuando se encuentra al volante, es un conductor prudente y hábil, lo suficiente como para que me suba a su auto sin temor.

- ¿pasa algo? - me pregunta cuando me descubre observándolo

- no, nada - respondo demasiado rápido tratando de pasar desapercibida

- no te preocupes, no iremos a ningún lugar lejano ni peligroso - dice dándome calma

- ok - contesto sonriente

- doy la vuelta y llegamos - dice ShinWoo

En efecto, gira e ingresa al estacionamiento de un edificio, detiene el auto y me dice que bajemos, caminamos hacia un ascensor, en seguida pienso que esto no se parece en nada a un restaurante, no sé dónde estamos, se abren las puertas y caminamos por un pasillo hasta que llegamos a una puerta que dice "602"

- hemos llegado - pronuncia mientras ingresa la clave que abre la puerta de un departamento - Bienvenida a mi casa

Me congelo, no puedo creerlo, ¡me ha traído al dormitorio de B1A4!, pero no entiendo por qué, me pongo tan nerviosa que sujeto mis manos para que no vea que tiemblo, no entiendo por qué me trajo hasta acá.

- ¿Qué pasa? ¿No quieres pasar? Te aseguro que está limpio, los chicos han ordenado esta mañana, fue un caos pero lo hicieron - intenta darme tranquilidad

- no es eso, es que no entiendo que hacemos aquí, además ¿estás seguro que no tendrás problemas al traer a una chica al dormitorio? - le respondo afligida

- no hay problemas, los chicos saben que hoy vendrías, por eso limpiaron su desastre - me cuenta avergonzado

- ¿Si? - digo sin ocultar mi sorpresa

- por favor pasa y te explico adentro - dice ShinWoo

Accedo a su petición pero ingreso con cuidado, como un animal explorando terreno desconocido, era cierto, el departamento lucía impecable, todas las cosas estaban en su lugar, había aroma a manzana, sobre la mesa había un pequeño ramo de girasoles lo que le daba un lindo toque de color al caoba de la madera, se podía sentir la esencia de un hogar en ese lugar.

- como sé lo mucho que te gusta la comida coreana, para hoy planee una cena diferente, será noche de comida casera, esta vez quien cocinará soy yo - dijo ShinWoo con total seguridad regalándome una de sus sonrisas matadoras

Esta vez sí que me ha sorprendido, jamás imaginé la posibilidad que él cocinara para mí, estoy atónita, a pesar de que ha pasado tiempo desde que nos conocimos él nunca ha perdido su capacidad de sorprenderme.

- en serio ¿tú vas a cocinar? - le pregunto incrédula

- por supuesto ¿Quién piensas que alimenta a estas bestias? Créeme que no es fácil llenar a Sandeul y a Baro, a veces ciento lastima por el staff que trabaja con nosotros porque por más que lo intenten jamás dejan completamente satisfecho a Deullie - dice ShinWoo medio en broma

- ahora te creo, es inolvidable ver a Lee Sandeul en acción, no pensé que alguien podía comer tanto hasta que nos hizo ese tour por los restoranes en Busan - afirmo algo más relajada

Ambos reímos dejando atrás la tensión inicial, ShinWoo se quitó su chaqueta y caminó hacia la cocina, se puso un delantal sobre la combinación de camisa azul a cuadros que llevaba junto a un cárdigan azul oscuro y de inmediato se puso a cocinar, yo también me quité el abrigo y me uní a él en la cocina.

No me permite hacer nada así que me limito a observarlo, se puede ver que se siente muy a gusto cocinando, es como si fuera su hábitat natural, todo en él es sumamente suave, su lento caminar es más parecido a un deslizar sobre el piso, su respirar pausado, sus manos parecen acariciar todo lo que tocan, cada uno de sus movimientos tiene una gracia sólo pertenecientes a ShinWoo, ese es su sello único.

- está listo, pasemos a sentarnos - dice él sonriente después de ubicar cada uno de los platillos sobre la mesa.

- huele muy bien - respondo mientras me siento

- te va a encantar, el Tteokbokki es mi mejor plato según los chicos (Pastel de arroz) - afirma ShinWoo orgulloso - anda, pruébalo - dice animándome al ver que me dispongo a comer

- ¡oh! ¡Está delicioso! - exclamo - de verdad cocinas muy bien - al decir eso noto como me sonríe con sus dulces ojos, se siente muy satisfecho con mi comentario.

La velada continua muy agradable, la comida está deliciosa y la conversación es amena, ShinWoo con cada movimiento pareciera disfrutar de la vida, cuando lo miro tengo esa sensación de que el tiempo no pasa, él vuelve las cosas cotidianas algo maravilloso, hace flotar a la realidad misma a su alrededor, su voz me relaja, sus palabras me hacen bajar la guardia, todo en él es calma, su risa es serena, me distraigo al mirar sus labios moverse de pausa en pausa al hablar, es hipnótico, no puedo dejar de mirar su bello rostro.

Comenzábamos a retirar los platos de la mesa cuando se me resbaló un palillo, ambos reaccionamos y lo tomamos al mismo tiempo, la coincidencia hizo que quedáramos tomados de las manos, nuestras miradas se encuentran y sus ojos me capturan en un instante, siento el calor de sus manos tomando las mías, él me mira como si no hubiese nada más en el mundo, ShinWoo se acerca a mí pero yo no logro alejarme, mi mente sabe que lo correcto es resistirse pero mi cuerpo no responde, él es un imán para mí, incluso el aire que exhala me resulta fascinante, nuestros rostros están a centímetros de distancia, puedo oler su embriagador perfume, lentamente pone su mano izquierda entre mi cuello y nuca acercándome a su boca depositando sus dulces labios sobre los míos, "no puedo creerlo, me ha besado" pienso mientras siento su respiración sobre mí, no logro resistir y separo mis labios invitando a su lengua entrar a mi boca, la sensación es deliciosa, su brazo derecho envuelve mi espalda acercándome aún más a él ubicándome en su amplio pecho lo que profundiza nuestro beso, siento su calor, podría quedarme vivir en sus brazos para siempre, es como si por fin hubiese hallado mi hogar.

Try To Walk (CNU y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora