He perdido la cuenta del número de personas que una vez entraron en mi vida para salir, pero me sobran dedos de las manos para contar los que se quedan. Los que están en tus mejores y peores momentos. Los que se tumban a tu lado esperando a que te levantes, sin decirte la típica frase 'que todo va a ir bien', esa frase nunca sirvió de nada. Los que no necesitan verse ni hablar todos los días para saber que están ahí.
Esas personas que desearías que estuvieran ahí para toda la vida.
Pero el destino a veces es caprichoso...
Hace poco aprendí que las personas salen de tu vida por un motivo aún mejor que por el que entraron.
Cada persona que ha entrado (para bien o para mal) en nuestras vidas nos ha enseñado algo, por eso nunca me he arrepentido de conocer a alguien.
ESTÁS LEYENDO
Manteniendo el equilibrio
RandomA veces pensamos que todo nos pasa a nosotros. Que siempre es a nosotros. Con este blog te sentirás identificado. Porque soñar es obligado y sentir inevitable. Sueña despierto y dejate llevar por este baile. Y recuerda algo, que el baile que mas cui...