Una vez leí que enamorarse es cuestión de segundos pero desenamorarse, además de doler como una caída con la intensidad de un pinchazo, tardas más de dos años, sino es cuestión de sobrellevar y seguir adelante.Recuerdas aquel día. Aquel día te diste cuenta de que todo es posible. Que lo imposible se convierte en posible si estas a su lado. Que no hay nada imposible que no puedas hacer solamente es algo que vas a tardar un poco más en conseguirlo. Que el infinito es más bonito si estas con ella. Que su sonrisa es la pila de tu vida. Que darías cualquier cosa por verla sonreír. Esos pequeños detalles que se convierten en historia. Tu pequeña pero grande historia... ¿algo contradictorio no crees?
Pero... no todo lo bueno dura para siempre. Quizás en un mundo paralelo las personas si cumplan sus promesas pero en este, en este no. Aquella promesa hecha ese día lluvioso en pleno mes de marzo. Ese día te prometió que jamás te dejaría, que intentaría ser esa bocanada de aire que a veces te faltaba, que sería ese hombro donde podrías llorar siempre. Ella haría todo por verte sonreír, porque la risa es el lenguaje del alma y la sonrisa es lo que más grande hace a una persona. Ella te hacia cosquillas hasta que la suplicabas que parara, ella se quedaba abrazada a ti mientras tú llorabas o simplemente ella era el sonido de tu timbre que más te gustaba. Porque eso significaba que estaba aquí. Que la tenías a apenas cuatro pasos. Que sería abrir la puerta y tenerla ahí. Seria contar con ella para siempre. Tal vez lo único que te gustaba de ella era eso. Era poder contar con ella para todo. Tal vez confundimos amistad con amor. O tal vez el amor era tan grande e intenso que no te dejaba pensar, que no te dejaba sentir. Porque somos tan cobardes. Somos valientes pero cobardes. Valientes por arriesgarnos pero cobardes por no luchar, por no querer volar. Nunca podremos volar si tenemos los pies en el suelo. No esperes a que ella venga. Deja el orgullo a un lado. Vete cerca de donde este ella. Llámala y pídela que se gire. Abrázala. Hazla sentir todo sin mediar ni una palabra. Hazla saber que gracias a ella te has dado cuenta de que todo es posible en esta vida. Que si hay amor lo demás sobra. Que solamente necesitamos esa muestra de cariño para poder sonreír al mundo mejor. Solamente necesitamos esas cosas. Necesitamos sus "Buenas noches pequeña" o sus "Buenos días princesa he soñado toda la noche contigo" solamente decirla eso por el mero hecho de hacerla sonreír. Y es que aunque sea una persona débil, llore por la noche, necesite constantemente a alguien, me alegra saber que siempre te voy a tener ahí. Me alegra saber que pienses que sonrió diferente. Bueno ya lo dijeron una vez y es que las personas más tristes sonríen de una manera más brillante.
A lo mejor el amor consiste en eso. Luchar día y noche. Enamorar a la otra persona todos los días. No rendirte nunca, porque nunca es demasiado tarde si dos personas se quieren.
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Manteniendo el equilibrio
AcakA veces pensamos que todo nos pasa a nosotros. Que siempre es a nosotros. Con este blog te sentirás identificado. Porque soñar es obligado y sentir inevitable. Sueña despierto y dejate llevar por este baile. Y recuerda algo, que el baile que mas cui...