•Historia de un Taxi• (Adaptada)

•Epílogo•

12 de junio del 2008.

Oriana soltó una carcajada cuando la señora Alicia le conto una anécdota de su vida. Estaba feliz, muy feliz.

-Cariño, ya eres la señora Serrano- Oriana se giro para encontrarse con Sharon. Su hermana había cambiado mucho, al igual que Gabriel. Los dos se habían casado y tenían dos hijos. Las dos, ahora se llevaban bien, Sharon trabajaba en la peluquería que Julian le había regalado el año pasado. Oriana no tenía ni idea qué Julian había ahorrado todo el dinero para regalárselo, eso la hacía amarlo aún más.

Gracias a Dios, la peluquería tenía mucho éxito. Julian llegaba todos los días a las 5:00pm para atender a sus hijas y a su esposa, también se pasaba uno que otro día por el trabajo de su esposa, para saludarla.

Los dos llevaban tres años juntos pero no se pudieron casar ya que necesitaban dinero. Con mucho esfuerzo pudieron conseguir lo que necesitaban.

Abrazo a su hermana que le dio las felicitaciones. Luego giro su cabeza para observa a Luis con Sara bailando y bebiendo. Sonrió para sus adentros, Julian había hecho buenos amigos, ni hablar de la adolescente María. Giro para verla bailando con Agustin, los dos al parecer estaban en su momento. Sacudiendo la cabeza, trato de localizar a su esposo.

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Julian estaba hablando con Gabriel de las cosas que habían pasado. Gabriel le estaba haciendo una propuesta de trabajo. Pero Julian estaba contento con el trabajo que tenía, su oficio tenía una historia.

La historia de su vida, gracias a ese trabajo conoció a la mujer que estaba vestida con un largo vestido champaña y que le había robado el corazón. Mientras se reía y giraba su cabeza para buscar algo o alguien.

El moreno sonrió sabiendo que estaba buscando. Se disculpo con Gabriel y fue en busca de su mujer. La tomo por la cintura.

-¿Me buscabas?.-murmuro Julian en el oído de Oriana. Esta sonrió, girándose para mirarlo. Julian bajo la cabeza y Oriana subió la de ella para juntar sus labios en un tierno beso. El moreno le mordió el labio inferior, mientras su esposa soltaba un gemido.-Creo que es hora de irnos.- murmuro Julian en los labios de la chica.

-Pienso lo mismo.-murmuro la chica. Julian y Oriana se despidieron de todos los invitados. Tomaron a sus hijas y las besaron dejándolas con Sharon, para que las cuidaran mientras ellos estaban de luna de miel.

Yasmin y Sharon. Sus hermosas hijas. Julian no podía estar más orgulloso. Oriana decidió llamar "Sharon" a la menor por su hermana. Sea lo que sea, Oriana sentía un gran afecto hacia ella.

Cuando se despidieron, salieron de la recepción y la muchacha pudo observar el Volkswagen que usaba su marido para trabajar, todo adornado con globos y un mensaje escrito detrás "Recién casados", sonriendo Julian la dirigió al auto.

-¿Lista?.-le pregunto cuándo encendió el motor.

-Toda la vida.-dijo tomándolo de la mano. Su vida no podía ser más perfecta y ¿Quién iba a imaginar que se iba a enamorar del taxista más tierno y sexy del mundo?. Pues ella no.

-Te amo.-le dijo Julian mirándola mientras estaban en un semáforo. Oriana giro la cabeza y lo miro.

-Te amo.- Los dos se acercaron y se besaron.

-¿Crees que será muy incomodo hacerlo en la parte de atrás?.-pregunto Julian entre besos. Ella se alejo.

-¡Julian!.-dijo protestando y riéndose a la vez.- Estás loco.

-Pero mucho más por ti.- La joven sonrió.

-No tengo la menor idea... pero tendríamos que probar.-dijo la muchacha guiñándole un ojo. Julian sonrió besándola.

Y pensar que nunca iba a conseguirse alguien que de verdad lo quisiera por cómo era. Sinceramente amaba la historia de su vida.

....Y pensar que todo sucedió gracias a que era un Taxista.

-Fin-

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¡Termino! 

Espero que la historia les haya gustado tanto como a mi.

~Sky~