•Historia de un Taxi• (Adaptada)

•Capitulo dieciocho•

Ultimo capitulo

7:00pm.

Iba camino a mi casa. Estaba demasiado cansado, hoy, había sido un día muy largo. Demasiado.

Estacione el auto al frente. La casa era enorme, de dos pisos, era perfecta y cómoda. Una vez que estaba adentro de está, escuche un grito. Sonreí cuando unos ojos mieles me observaron con alegría. Se me acerco y yo la cargue depositando un beso en su frente.

-Papi, te extrañe.- Pase una mano por su hermoso cabello.

-Yo más, bebe... y tu...

-Yasmin ¿Cuántas veces te tengo que decir que no corras por las escaleras?.-la niña observo a su mama e hizo un puchero.

-Mami, es que era papi.- Oriana me sonrió con ternura.

-Si ya vi.- Me le acerque y le deposite un beso en los labios, mientras Yasmin hacia una cara de asco. Se bajo de mi agarre.

-¡Ewww!, besos... asco.-La observe orgulloso.

-Así es cariño, ¡Ewww!.-le dije agachándome y quedando de su tamaño y repitiendo el gesto.- Tienes que seguir pensando así hasta que cumplas 30.-le avise, acariciándole la mejilla.- ¿Me entiendes?.- Oriana sacudió la cabeza.

-¡Juliaan!.-me dijo en forma de protesta.

-¿Qué?.-pregunte inocentemente. La morena sacudió la cabeza, otra vez. Yasmin me tomo por la cara y me obligo a mirarla. Sinceramente ella, era igual a su mamá.

Sonreí.

-Lo siento papi, pero no me gustan los besos de ustedes.- me dijo la niña haciendo un gesto de asco. Luego me miro y sonrió.-Pero me gustan los besos de Daniel.- Arrugue la frente.

-¿Quién es Daniel?.-pregunte asustado. Yasmin me sonrió y se comenzó alejar, mientras subía el tercer escalón me dijo:

-Mi novio.-y término de subir por completo las escaleras. Yo quede en estado de shock, luego de unos segundos reaccione.

-YASMIN CATHERINE!.-grite. Oriana soltó una carcajada, se me acerco y me abrazo por la cintura.-Se puede saber ¡¿Qué te causa tanta gracia?!, ¡Nuestra hija tiene novio!.

Oriana se me acerco y me beso.

-Relájate.-murmuro ella en mis labios. ¿Cómo podía estar tan tranquila?.

-¡Oriana tiene tres años!.-grite desesperado. Ella se volvió a reír y me volvió a besar.

-Vamos arriba.-me murmuro en el oído con una voz ronca, haciéndome olvidar lo que Yasmin me había dicho.

-¿No le pasara nada al bebé?.-pregunte preocupado pasándole una mano por su abdomen hinchado. Ella me sonrió.

-No. El doctor dice que eso no importa.- Yo, sonreí. La cargue y la lleve a nuestra cama.

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-¿Qué tal tu día?.- me pregunto Oriana acariciándome la cara. Le conté todo con lujos de detalles mientras le acariciaba la nariz.-¿Enserio?.-me pregunto, levantándose y sentándose en la cama. Me levante y me senté, tomándola por la mano para que se colocara entre mis piernas, no quería estar lejos de ella ni un solo minuto.

-Si... fue raro contar mi vida.- Ella se rio.

-Quizás.- Los dos estábamos tomados de las manos mientras mirábamos a lo lejos.- ¿No estás emocionado?.- me pregunto girándose para mirarme.

-¿Por la boda?.-pregunte, ella asintió.- Si...

-Yo también, no puedo esperar hasta que se pasen estos tres meses.- Yo le sonreí.

-¿Lista para seguir pasando el resto de tus días conmigo?.-pregunte besándola en la sien. Ella me sonrió.

-No podría imaginarme otro hombre con quien pasar mi vida...-Sonreí.

-Te amo.-dije besándola.

-Te amo más señor taxista.- solté una carcajada, definitivamente Oriana era la mujer de mi vida.

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~Sky~