Inmortals (Luke Hemmings)

Capitulo VI

Luke despertó sobresaltado. Habia tenido una pesadilla, que se repetia una y otra vez durante 10 años. Donde aparecía él cogiendo a una chica palida en sus brazos, y esa chica, era Elena.

-¡Porque!-gritó. El estaba enamorado de ella y justamente se aparecia ahora. Cuando ya era demasiado tarde.

-Tranquilo Luke, ya esta.-dijo la voz dulce de su madre acariciandole la cabeza.

-Odio ser asi, madre.-dijo abrazandola.-No puedo acercarme a ella. Encima no le pude borrar la memoria. No quise que me olvidara y ahora estara sufriendo por mi culpa. ¡Soy un monstruo, eso es lo que soy!-dijo gritando.

-Tranquilizate, Luke.-dijo su madre.

-No puedo. Me tengo que ir, tengo que hacer unas cosas.-dijo saliendo por la ventana. Dió un salto y cuando estaba apunto de llegar al suelo, su piel de humano se transformó en un perro grande con un pelaje entre gris y negro. Era precioso. Un hombre lobo, eso era Luke, pero tenia un poder que los otros de su especie no tenian. Podia borrar la memoria de todas las personas que quisiera. La cabaña era simplemente una ilusión, un sueño que Elena siempre quiso. Ir a un estudio de grabación.

Sabia que lo que estaba haciendo no estaba bien, ni para él, ni para ella. Debia de alejarse rapidamente pero él no quiso. Se dirigió rapidamente al lugar donde estuvieron ayer y la encontró alli arrodillada en el suelo, llorando. Sabia que iría alli. Se volvió a transformar en humano para no asustarla y la abrazó.

-No me mires.-dijó poniendo su cabeza encima del hombro de Elena.

-Luke.-dijo sollozando.-¿Porque?-preguntó.

-Lo siento mucho.-dijo él llorando.

-Lo que mas me duele...es que te fueras sin decirme nada. Y ahora mi amiga piensa que estoy loca. No entiendo nada.-dijo ella girandose.

-No me mires.-dijo el agachando la cabeza. Aun no podia controlar sus poderes sobrenaturales.

-¿Porque?-le preguntó ella.

-Porque si me miras...te puedo asustar.-dijo él sin levantar la cabeza.

-No te tengo miedo.-dijo ella sincera, pero al mismo tiempo estaba un poco asustada.

-¿Estas segura?-preguntó.

-Si.-dijo ella tragando saliva, nerviosa.

-Esta bien.-dijo él levantando la cabeza. Tenia unos colmillos grandes y afilados. Las orejas largas y llenas de pelo, igual que sus manos.

En la boca de Elena se formó una grande "O".

-¿Ves? Te lo dije.-dijo Luke levantandose.

-Espera.-dijo la chica levantadose tambien.-No me asustas.-dijo ella un poco temblorosa.

-Pues tu cuerpo no opina lo mismo.-dijo el agachando la cabeza.

-No es que tenga miedo de ti. Tengo miedo a que desaparezcas otra vez y que esto sea solo un sueño.-dijo ella casi al borde de las lagrimas.

-Por favor, no llores.-dijo el acercandose para abrazarla.

-Entonces quedate a mi lado.-dijo ella mirandole fijamente a los ojos.

-¿Eso es lo que quieres?-le preguntó ya en su forma normal.

-Si.-dijo ella mirandolo, aun estaba un poco impresionada por lo acababa de ver.-Eso es lo que mas deseo.

-Esta bien.-dijo el sinceramente.-¿Aunque eso signifique arriesgar tu vida?-preguntó.

-La arriesgaria todas las veces que fuera solo para estar contigo, a tu lado.-dijo ella besandole en los labios. Un beso lento y lleno de amor. Un beso que quisieron que durara para siempre.