❝Coffee❞ | En Edición.|

V

El turno de Emma había terminado en cuanto el reloj marco las 2:30. Ella tomo su bolsa y solo se despidió de Alex para luego irse del lugar.
Antes de que Emma se dirigiera a su departamento paso al parque, quería un poco de tranquilidad después de tanto trabajo. Se sentó en una banca al llegar, Emma solo miraba como los niños jugaban en el parque y sintió una nostalgia en su interior. Ha sus 21 años ella anhelaba en poder ser madre algún día, pero hasta el momento ese sueño no podia ser posible debido ah que aun no conocía al hombre indicado.

—Hola.—aquella voz sonó a las espaldas de Emma causando un nudo en su garganta y una falta de aire por el nerviosismo.

—H-hola.—tartamudeó, ella se sentía indefensa ante aquel desconocido que con solo su voz la hacia sentir algo inusual en su interior.

— ¿Puedo sentarme? —la voz del desconocido también tenia un toque de nervios en su ronca y profunda voz.

—Claro. —fueron las únicas palabras que salieron de su boca para quedar en un silencio no incómodo si no reconfortable.

—Soy Austin, Austin Mahone.—estiro su mano esperando una respuesta de aquella chica.

—Emma Gallager.—estrecho con gustó, Austin beso su mejilla casi en un rosé causando en ella que mordiera su labio inferior.

—Es un lindo nombre.—aquella palabras hicieron que Emma se ruborizaba al instante de solo escucharlo.

—Gracias.

—Eres muy linda cuando te sonrojas.—hablo Austin causando que las mejillas de Emma aumentaran el color carmín en ellas. Se sentía nerviosa pero a la vez alegre antes aquellas simples palabras.

—Por favor, deja de decir eso. Haces que me sonroje aún mas.—Emma cubrió su rostro con ambas manos en señal de que se sentía un poco avergonzada.

—Emma ¿Puedo hacer una pregunta? —el corazón de ella latía al cien con tan solo escuchar esas palabras, no sabia que responder, solos estaba inmovilizada sin mover ningún músculo.

—C-claro.—volvio a tartamudear por culpa de las ideas que se presenciaban en su cabeza en respuesta a lo que Austin había dicho.

—Se que puede sonar un poco incomodo pero tengo una duda.—hizo una pequeña pausa dirigiendo la vista a sus hermoso ojos de Emma, se dibujo en el rostro una sonrisa encantadora— ¿Tienes novio?

—No. Aun no encuentro a alguien que me haga sentir una tormenta de emociones en mi interior.—Austin dio una pequeña y sonora risa, al ver Emma golpeo ligeramente su hombro en señal fraternal.

—No me río por lo que dices, solo que yo pienso lo mismo.—ella le dedico una sonrisa de disculpas para luego girar su vista hacia otro lado.

—Es lindo que alguien piense como tu.—al girar de nuevo Austin ya no se encontraba sentado aun lado de ella, solo vio una tarjeta pequeña con las simples pero hermosas palabras que el solo ponía en una nota. ❝Eres hermosa cuando te sonrojas.❞