VII

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Antes que nada, ocho votos y subo la nueva novela el viernes

¿Por qué lloraba por ese imbécil? Se repetía una y otra vez Emma, pero cada vez que limpiaba una lágrima salían diez mas de sus ojos. Se sentía mal ante la nota que había leído, nunca se había imaginado lo que una simple nota podría causarle a ella.

— ¿Te sientes bien?—eschuco la voz de su mejor amigo a sus espaldas e inmediatamente limpio las lágrimas que había en su rostro.

—Si, sólo dame unos minutos y regreso a trabajar.—dijo ella sin siquiera voltear a verlo, arrugo las notas que Austin le había dado días antes. Ahora para ella no significaban nada.

—Si te siente mal, puedes tomarte la tarde libre. Has trabajado mucho esta semana.

— ¿Hablas enserio?—dirigió su vista ha Alex, y el noto los ojos rojos de su querida amiga.

—Si, anda, ve ha descansar.—Emma se levanto de la silla para darle un abrazo a su amigo, salio de la sala de descanso hacia la salida del lugar. Tapando su vista para que nadie notara que había llorado.

— ¿Ah donde vas? —vio a Sabrina delante de ella.

—No te interesa.—salió casi corriendo del lugar, cuando estaba un poco lejos alguien sujeto su brazo, antes de protestar vio ha aquel chico que la hacia suspirar.

—Te he estado esperando aquí.—Emma no hizo mucho caso ante sus palabras y lo ignoro por completo.

— ¿Ah mi?—pregunto con sarcasmo e incredulidad.

—Si ¿Ah quien más podia esperar?—Austin le dedico una sonrisa coqueta pero a la vez dulce.

—No lo se, tal vez te interese conquistar chicas solo para jugar con ellas.—Emma se zafó del agarré de Austin apartándose del y tratando de no llorar.

— ¿Qué? Yo no soy capas de eso.—Austin fruncio el ceño al no entender muy bien lo que ella decía.

—No quiero ser una de tus conquistas, así que sera mejor que me valla.—Emma se giro en puntas para retomar su camino hacia casa.

— ¿Conquistas? ¿De que hablas?—él la tomo delicadamente de su mano derecha para no dejar que ella siguiera caminando sin antes explicarle lo que estaba pasando.

—Sueltame.—Emma sentía como las lágrimas se acumulaban en sus ojos y comenzaba a sentirse débil.

—No hasta que me digas ¿De que hablas?—Austin al notar como una pequeña y escurridisa lágrima salia de los hermosos ojos de ella limpio delicadamente con su pulgar.

— ¿Crees que soy una tonta? Vi como hablabas con Sabrina y le diste una nota de que la querías volver a ver.—no resistió mas y las lágrimas resbalaron sobre sus rosadas mejillas.

— ¿Qué? Estas equivocada la nota no era para ella, si no para ti. Solo le pedi el favor que te la entregara.—Emma se sintió completamente tonta al caer fácilmente en los juegos y engaños de Sabrina—No se que me has hecho Emma, que no puedo dejar de pensar en ti.

—Yo tampoco puedo dejar de pensar en ti.—el aliento de Austin estaba tan cerca de ella, que el simple hecho de pensar que la besaría hacia que su cuerpo temblará. Emma esperaba un beso en los labios, pero en cambio el solo depósito un tierno beso sobre su mejilla.

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Nuevo capítulo espero que les guste, voten y comenten que saben que me inspiran con lo que dicen de la novela.

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