Al llegar a casa, fui directo a mi habitación, coloque mi volar en la mesa de estudio y me tire en la cama.
Mire al techo por un par de horas, pensando en tanto, preocupándome por nada, cansada de tener todo el dinero del mundo, pero nada de amor, ni el de unos padres, los cuales tenía, sólo que a ellos parecía no importarles, ni el de una buena amiga, sólo el de las sanguijuelas que se acercan a mi por la gran cantidad de dinero que generan mis padres, y mi hablar de una pareja, que perdida de tiempo.
Sólo 2 años, eso era lo que me mantenía con la esperanza arriba, dos años para graduarme, irme a New York y empezar mi nueva vida, sin grandes fortunas, sin personas que me conozcan por mis riquezas, nada de eso, sólo yo empezando de nuevo.
Otra cosa que no podía sacar de mi cabeza era a Adam, ¿qué fue todo aquello?
Fue muy extraño a decir verdad, pero ya que, mañana se le pasará.
Me levanté de la cama y me si una larga ducha caliente, llevando lejos todos mis pensamientos.
Después de vestirme y cepillar cabello tome el papel que realizamos en psicología y lo leí, ya que en el salón no me dio mucha importancia.
No era muy variado lo que decía, la mayoría eran sólo: me encantaría tener tu vida, eres fabulosa, eres hermosa, y otras cosas falsas que ponían las personas para agradarme, hubieron tres cosas que me llamaron la atención:
- Tus ojos cuentan más de lo que los rumores cuentan.
- Chica rica y mimada, sin corazón y también una maldita desgraciada.
- Estas vacía.
¿A qué se referían estas personas? ¿Quienes eran? No es posible que me conocieran, y tal vez si, me comporte como una maldita desgraciada con algunas personas, pero es el papel que tengo que llevar conmigo, para protegerme, tuve demasiadas experiencias en el pasado de las cuales he aprendido que: mientras menos cosas te importan, menos sufres.
Una lágrima resbalo por mi mejilla mientras recordaba mi oscuro pasado.
La limpie rápido, yo soy más fuerte que eso.
O eso intento creer....
Hice mis tareas, y me puse a leer, ya que era una de las pocas cosas que mantenían mi mente ocupada, y me hacían creer que el mundo era un lugar mejor.
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En manos del destino
RandomUna historia que cuenta, como dos jóvenes tan diferentes como el verano y el invierno, están destinados a estar juntos, por muy difícil que sea, sin importar los obstáculos que les ponga el destino. Por más irónico que suene que el destino los quier...