Eres muy dulce |Michael|

1.3K 53 2
                                    

Desperté por unos ruidos provenientes de la cocina, ya que el microondas funcionaba y la campana sonó. Me di una vuelta y no encontré a Mikey a mi lado, por lo cual supuse que estaba abajo.

Me puse una camisa de él que descansaba en el suelo y bajé las gradas lentamente y con cuidado de no hacer ruido, y al llegar al final di un saltito para bajar hasta el suelo.

Entré a la cocina y me encontré con un Michael en boxers de las tortugar ninjas, de espaldas a mi, cocinando lo que supongo son hot cakes.

Entonces, en puntitas de pie caminé detrás de él y a punto de asustarlo habla dejándome helada.

"Ni siquiera lo intentes." Mi boca se seca y pego un salto del susto que me dio. Llevo una mano a mi pecho -donde estaría mi corazón- y mantengo la respiración.

"Maldita sea, Mike, casi me matas." Suelto todo el aire retenido y el se voltea riendo roncamente, con un plato lleno de hot cakes en una pila enormemente alta.

"Nunca podrás asustarme, bae." Sonríe de lado y picotea mis labios, para luego sentarse en una butaca frente a la isla.

"No es justo." Frunzo mi ceño y tomo asiento a su lado, mientras el toma unos hot cakes y les hecha miel, odio la miel.

"La miel es muy dulce" Comenté arrugando la nariz inconscientemente y comiendo los míos solos.

"Tu eres muy dulce. " Murmura, pero alcanzo a escucharlo y sonrío tiernamente. Tomo sus mejillas entre mis manos y lo acerco a mis labios, para plantarle un dulce beso, con una mezcla de sabores: miel y masa.

"Odio el sabor a miel." Susurro al separarme y el ríe entre dientes, entonces toma la miel y la esparce en mi cara con su mano. Suelto un grito de horror y gracia, y el prosiguió vertiéndolo en mi cabello con una gran carcajada.

"Michael Gordon Clifford." Chillé con los ojos cerrados por la miel que caía sobre mis ellos, entonces oí sus carcajadas resonando en la cocina.

"Maldito bastardo, ven aquí." Volví a chillar en vano, porque Mike no respondía, solo reía locamente. Entonces tuve que quitar la mezcla pegajosa de mi cara y ojos, para verlo retorciéndose de risa en el suelo de la cocina.

Me cruce de brazos viéndolo, cuando una idea se me ocurre, entonces tomo el envase de miel y corro donde él para tirarme sobre su espalda y esparcir el producto por su verde cabello, mientras él deja de reír y asimila la situación.

Me siento sobre su abdomen y con mi dedo -lleno de miel- toco la punta de su nariz, así haciendo que un pequeño punto se notase. Quita la miel de sus ojos y me mira. Le sonrío dulcemente y el me devuelve la sonrisa.

"¿Mi hermoso cabello tuvo que ser?" Hizo un puchero y yo aún con mi sonrisa me incliné hacia delante, apoyando mi pecho sobre el suyo y dejando nuestros rostros a centímetros.

"Venganza, Mikey, venganza." Repetí y por último tomé su labio inferior entre los mios, y lo lamí hasta que no quedó ni un rastro de miel.

Antes de separarme lo mordí, y seguí mi camino con su labio superior, mientras él me tomaba de la cintura. "¿Desde cuándo eres tan atrevida?" Preguntó respirando agitadamente.

"Desde que salgo contigo, cielo" Reí y le guiñé un ojo.

■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■■

*Editado*

MOMENTO DE INSPIRACIÓN! okeyno. Solo me aburría xD
Espero les guste ;)

-Mar

One Shoots→ 5 Seconds Of Summer← EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora