Rubí y Zafíro: Garnet una experiencia

1 Nunca

-Rubí.- Dice la pequeña de cabello azul claro mirando hacia el cielo estrellado, sentada sobre la playa fuera del templo.

-¿Si?- Pregunta la chica de atuendo rojo.

-¿Alguna vez te has preguntado como es que a los humanos aqui les gusta dormir?- Responde Zafíro con otra pregunta.

-De hecho nunca, no entiendo porque la pregunta, tu duermes casi todas las noches.- Responde la más baja.

-Excepto cuando estoy sentada en la playa contigo.- Zafíro voltea a ver a la mejor persona que ha conocido y sonríe.

-Me gusta que duermas.- Sonríe Rubí tiernamente.

-¿Porque?- Pregunta extrañada Zafíro.

-Sólo diré que me gusta verte dormir.- Responde Rubí mirando a la mitad de su mundo fijamente a los ojos.

-¿Pero porque?- Vuelve a preguntar la de azul.

-Te ves tan relajada, tan...- Hace una pequeña pausa.

-¿Si?- Dice Zafíro alentándola a continuar.

-Linda.- Admite Rubí sonrojada.

Las dos chicas se quedaron calladas, admirando el cielo y disfrutando del silencio y su compañía.

-¿Crees que diamante amarillo trate de reactivar la guardería? ¿Crees que venga por nosotras? ¿Crees que nos separen? No quiero estar lejos de ti, no quiero vivir encerrada, no de nuevo.- Pregunta Zafíro de repente  y comienza a sollozar en silencio.

-No, no, no, tranquila, no digas eso, nunca permitiría que te alejaran de mi, no permitiré que te hagan daño.- Rubí planta un beso en la mejilla de Zafíro y esta la abraza.

-Tengo miedo.- Admite la azul.

-No hay razón para tener miedo, estas a salvo conmigo, y yo siempre estaré aquí para protegerte.- La tranquiliza tiernamente Rubí.

-¿Estas segura de que todo estará bien?-

-Deberias saberlo mejor que yo, quien tiene visión futura eres tu no yo.-

-Hay infinitas posibilidades.- Responde calmadamente Zafíro.

-Tu controlas tu destino.- 

-Ojalá fuera así de sencillo.- Suspira Zafíro.

-Es así de sencillo.- Contesta simplemente.

-Para ti todo es así de sencillo.- Sonríe la de guantes blancos.

-Claro que no, me era difícil hablarte al principio.- Admite Rubí y Zafíro se sonroja.

-Nunca permitas que nos separen.- Dice Zafíro saliendo del abrazo de Rubí y mirándola a los ojos.

-Nunca.- Responde Rubí y vuelve a abrazar a Zafíro mientras continúan viendo el hermoso cielo estrellado frente a ellas.