Desperté por el horrible ruido de la alarma. Un pato. Como se me había ocurrido poner el sonido de un pato para despertarme.
Me levante de la cama y me maree por lo rápido que lo hice.
Cuando el mareo bajo fui directamente al baño a hacer mis necesidades y a darme esa bien merecida ducha, pero cuando abrí el grifo de la ducha, el agua salió hirviendo y me quemé los pies, haciendo que tirara todo y empezara a quemarme el resto del cuerpo.
Cuando conseguí poner el agua fría, muy fría, empecé a bañarme con normalidad. Bueno, todo lo posible.
Al terminar salí de la ducha con una toalla enroscada al cuerpo.
Agarré el secado y comencé a secarme el pelo. Cuando pasaba el aire por la herida escocía un poco, pero era soportable.
Cuando el pelo estuvo seco y en su sitio, me decanté por no ponerme la gasa en la cabeza y fui directamente a mi cuarto a cambiarme.
Me vestí con unos pantalones largos negros elásticos, una camiseta a cuadros con los dos botones de arriba sin abrochar y con los puños remangados hasta el codo y mis converse negras.
Cogí la mochila y fui a la cocina a por una barrita energética y una pieza de fruta.
Cuando terminé, tome las llaves y salí de casa. Metí la llave en la cerradura y cerré la puerta.
-Hola.
-¡Ah! ¿¡Tu eres tonto!? Por poco me matas del susto.
-Perdón Celeste, no quería que te asustaras.
Claro que quería que me asustara, Liam cuando quería era muy imbécil.
-Da igual, ¿qué haces aquí?
-Vengo a buscarte. No quiero que andes tu sola hoy con el golpe que te diste ayer.
-No hacia falta Liam. Ya te he dicho un millón de veces que tu no vengas a buscarme, por que te pilla muy lejos.
-Con un gracias me sirve. A parte, quería estrenar mi coche nuevo.
Vale. Ahora lo entendía.
Liam vivía a dos minutos andando de la Universidad y su madre no le dejaba coger el coche, pero si le decía que me tenía que ir a buscar, claro que tendría que cogerlo.
-Te aprovechas de mi desgracia... Enséñame ese coche.
Cruzamos la valla y... Madre mía que coche.
-¿A quién se lo has robado?
-Idiota. ¿Te gusta verdad? Es un regalo de Navidad.
¿Navidad? O dios es verdad, faltaban dos semanas para Navidad.
-Pero si todavía queda mucho.
-Ya, pero se me rompió el otro y mi madre me dijo que me lo daba ya.
-Que suerte que tienes, yo ni tengo el carnet.
-Por favor, sube a mi precioso auto. Pero si manchas algo te juro que te saco a patadas de aquí.
Levante las manos en señal de paz y empezamos a reír. Nos montamos en el auto y arrancamos.
Al pasar por delante de la casa de los Styles, vi a Harry en la puerta besándose con Ashley, la capitana de las animadoras. Qué pena me da...
-No entiendo por que se dejan enredar.
-¿Qué?
-Las chicas que están con Harry. Todo el mundo sabe que utiliza a las chicas para satisfacerse y luego las deja. No entiendo por qué siguen metiendo se con él.
Esa pregunta me la había hecho yo muchas veces, pero estando ayer con Harry me empezaba a hacer una idea de que les pasaba a todas esas pobres chicas que se enamoraban de él.
Aunque Harry no intentase nada conmigo, había conseguido que me fijara un poco mas en el. Imagínate si lo intentara.
-Hazme caso Celeste, no te metas con Harry. No es una buena influencia.
No entendía por qué me decía eso, si antes él, junto con Zayn, Louis y Sophia eran muy amigos... Bueno, el curso que no estuve yo.
Creo que el problema soy yo.
-Vale.
Pasamos el resto del camino en silencio hasta que llegamos al aparcamiento de la universidad, donde Sophia nos esperaba.
-Celeste tenemos que hablar.
O simplemente me esperaba a mi.
Nos fuimos a una parte del aparcamiento donde no había gente.
-¿Por qué Styles quería tu numero de teléfono?
Es verdad, se me había olvidado la llamada.
-Para preguntarme qué tal estaba. ¿Y tu por que le diste mi numero?
-¿Qué? Yo no se lo di. Cuando acabaron las clases vino Harry y me pidió tu numero de teléfono, pero yo no se lo di.
-Entonces como ha conseguido mi numero.
-No se, pero es Harry. Conque lo sepa alguien que come de la palma de su mano ya lo iba a saber.
En la universidad había poca gente que se supiese mi numero... Y ¿por qué Harry me mintió cuando le pregunte como había conseguido mi numero?
-Celeste conozco a los Styles, en especial a Harry y no hacen nada sin un motivo o sin querer nada a cambio. Por favor, no vuelvas a mezclarte con Harry.
-¿Por qué? Tu, Liam y Louis me habéis advertido lo mismo, que no me acerque a el, pero los tres fuisteis sus amigos. ¿Por qué yo no puedo serlo?
-Celeste, Harry no es como el hace ver que es aquí. El Harry de la universidad no es el mismo que el Harry de fuera. Y como tu has dicho, nosotros fuimos sus amigos y ya no lo somos. Por favor, haznos caso y no te mezcles con el.
No entendía nada. Pero ellos eran mis amigos y se supone que ellos me tienen que proteger como yo hago con ellos.
-De acuerdo. No me mezclar mas con Harry.
Sophia me abrazo.
-Muchas gracias.
No entendía que es lo que pasaba aquí, pero tenía mucha curiosidad.
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Celeste (Harry Styles)
FanfictionElla; muy tímida y reservada, desconfiada, despistada, torpe, le gusta leer y siempre a deseado tener su propio cuento de hadas. Su sueño es convertirse en una gran artista. Ella es Celeste Jones, de 20 años. Él; popular, sensible, atento, mujerieg...