Capítulo 1

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Narra _______:

El despertador sonó, Agg como odio esa cosa. Como quisiera que no exista el despertador y así podría levantarme cuando quiera.

- Eleanor: ¡_______! ¡A desayunar!- y claro. Tendría que dejar a mi mamá sin habla y dormiría pacíficamente.

- _______: ¡¡Ya voy!!- grito.

Me incorporé en la cama y froté mis ojos para acostumbrarme a la luz. Miré a mi alrededor y toda mi habitación estaba hecha un desastre. Si mi mamá entra a mi habitación de seguro me pega la mega regañada. Pero como no todo es color de rosa... ¿adivinen quién entro a mi cuarto?.

- Eleanor: ¡_______ Mallette, ¿qué demonios paso en tu habitación?!- me mira con sus ojos enojados.

- _______: Es que ayer no sabía que ponerme y como me atrasaba no pude arreglarlo.- me excuso.

Y en parte era verdad, ayer tenía una fiesta y saben como somos al momento de escoger la ropa y pues bueno.... un terremoto apareció y dejo en mi habitación un desastre.

- Eleanor: ¿Qué haré contigo _______?.

- _______: ¿Amarme?- alzo mis hombros con una sonrisa.

- Eleanor: ¡Quiero que arregles esto y te arregles tú!

- _______: Pero mamá, debo ir a la escuela.- reprocho.

- Eleanor: Por eso mismo jovencita, más vale que te muevas y bajes rápido a desayunar.

- _______: ¡Ya esta bien!- me levanto de la cama.

- Eleanor: ¡Pero rápido!- sale de la habitación.

Una vez que cerró la puerta me volví a lanzar en la cama, ¡por qué! ¿Porqué no puedo dormir un poquito más?. Resignada me volví a levantar, caminé hacia el baño y cuando me miré al espejo no podía creer que esa era yo. Parecía que estaba puesta una máscara de Beattle Juice, todo un horror. El rímel corrido por todos mis ojos, mi cabello enredado y desordenado. Un mapache con rabia sería la mejor comparación.

Tomé un poco de crema y después de unos largos cinco minutos al fin me veía normal, me despoje de mi ropa y me metí a la ducha. ¡Como amo el agua! Si la ducha fuera una cama no dudaría ni un segundo en quedarme en ella. Cuando salí me envolví en una toalla, una en el cuerpo y otra en el cabello. Fui al walk in closet y tomé un short de mezclilla ya que hacía calor, una polera que se amarra dejando ver el ombligo y que dice "Surf", y por último unas sandalias. Cepille mi cabello para amarrarlo en un moño desordenado y al final me maquille con un poco de rímel.

¡Ahora sí! A arreglar todo este agujero negro. Empecé por tender la cama, lance todos los peluches junto a las almohadas. Tendí la cama y me puse a guardar toda la ropa que había sacado ayer. Miré el reloj y solo faltaban 45 minutos para el colegio. ¡Demonios! Es muy poco para mi, debo ir caminando. Una vez terminado de arreglar todo, tomé mi bolso, mi Iphone y mis audífonos; cepillé mis dientes y me puse un poco de brillo.

Al bajar las escaleras encontré a mi papá ya saliendo para el trabajo con su traje negro y su maletín. Mi papá trabaja en una empresa de publicidad que queda como a una hora de aquí por el tráfico que hay en las mañanas. En cambio mi mamá no trabaja pero le encanta pasar con sus amigas de aquí para allá.

- _______: ¿Ya te vas papá?- ¿qué pregunta más tonta no?.

- Adam: Si hija, estoy atrasado y al parecer tu también.- mira su reloj.

- ______: ¡Cierto!- maldigo-. Que te vaya bien papá.- beso su mejilla y me dirijo a la cocina donde encontré a mi hermano.

Si, tengo un hermano pero no es tan importante. A veces es como una piedra en el zapato. Él es menor que yo, tiene 15 años. Su nombre es Drake.

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