18.-Si Quiero, Pero No Puedo

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- ¡Por fin los tengo! - Gritó Lynch cuando cruzamos la puerta de la oficina-
-¡Albert! - exclamó la sra. Clarissa- Buenos días, chicos -nos saludó-
-Buenos días - contestamos al unísono-
-Supongo que se preguntan que hacen aquí -asentimos- Verán, hace casi cuatro semanas el profesor aquí presente sufrió una broma - miré de reojo a Jack y este hizo lo mismo- y él insistía que fueron ustedes, especialmente tú, Fickman, Sin embargo yo los defendía... pero ayer por la tarde a Lynch se le ocurrió revisar las cámaras de seguridad... ¿Y adivinen qué?... ustedes, ¡ambos!, salen en la entrada del baño, esperándolo y luego se ve como el señor Keller le inyecta, supongo yo, un sedante y más tarde sale su profesor vestido de mujer...
-¿Seguirán negándolo? -interrogó Lynch-
-No -respondí y Jack negó con la cabeza acompañado de un gesto de indiferencia-

Escuché que tocaban la puerta, la directora musitó un pase y la puerta se abrió dejando ver a un ojiazul muy guapo, Austin.

-¿Me mandó a llamar, Clarissa?
-Si Austin, toma asiento al lado del señor Keller - me miró- ¿Sabes Selena que es lo qué más llama mi atención? - negué con la cabeza- Es que el profesor Austin ingresó en un momento determinado en el que estabas sola, ya que Jack recién había salido, y más tarde salió con varias cosas -miró a Austin- ¿Por qué? - Mierda, Piensa Selena, piensa-
-Porque lo amenacé de que si me acusaba le haría algo peor que a Lynch... por muy difícil que parezca -Sonreí-

Austin y Jack me miraron sorprendidos por mi respuesta mientras que yo pensaba en que no podía dejar que a Austin le fuera mal en su proyecto.

La directora dejó que él se fuera, nos dijo que no nos podría expulsar de la preparatoria, ya que Jack era uno de los mejores promedios del complejo educacional y yo estaba participando en un concurso de arte en representación de la institución, sin embargo nos darían suspención, Lynch reclamó una y otra vez, pero la directora hizo caso omiso, en otras circunstancias me hubiera reído del profesor en su cara, pero ahora era diferente, probablemente este sería el último viernes en este instituto, al menos por un tiempo.

* * * *

-¡No, no, no y No! ¡¡Selena por la mierda!! - Rob me gritaba alterado-

Durante la tarde lo habían llamado para informarles de mi suspención, luego de haber ido a dejar a Kayla a su casa me fue a retirar a la escuela, la directora conversó con él acerca de mi comportamiento, luego de un rato salió de la oficina y me hizo señas para que lo siguiera, se subió al auto y condujo en silencio hasta llegar a nuestra casa, y ahora yo estaba sentada en un sillón mientras que mi hermano se paseaba de un lugar a otro.

-Selena, ¿Estás consciente de que te tendrás que ir para donde Amaya?... -Asentí - entonces, ¿Por qué mierda sigues haciendo tonteras? ¡Deja de comportarte como una niña pequeña!
- ¡¡Entonces deja de tratarme como una !!

La furia de Rob era palpable y la mía iba en aumento, estuvimos un rato más discutiendo sobre lo inmadura que soy, me aburrí y subí a mi habitación dejando a mi hermano discutiendo solo.

* * * *

El pollito pío, el pollito pío
El pollito pío, el pollito pío

Era mi celular el que sonaba, refregué mis ojos y miré por la ventana, había amanecido, el celular seguía sonando miré la pantalla, Austin.

-¿Aló? -Contesté con la voz ronca por el no haberla utilizado-
-Selena Fickman, necesito hablar urgentemente contigo, nos vemos en el parque que está cerca de tu casa, dentro de quince minutos...

No alcancé siquiera a contestarle algo y ya me había cortado. Me levanté rápidamente y me arreglé en tan sólo cinco minutos. Cuando baje la escalera vi que Rob estaba desayunando.

-Sel, yo quería disculparme por como te traté ayer... es que yo de verdad no quiero que te vayas...

Lo abracé y le dije que todo estará bien. Aproveché de decirle que saldría un rato.

Caminé rápidamente hacia el parque, cuando llegué lo busqué con la mirada hacia todas partes, ví al chico torpe y antipático que me gusta molestar, me miró y yo le sonreí con malicia y el me miró con odio. Seguí barriendo el parque con mirada hasta que lo vi estaba de espaldas a mi, pero era imposible no reconocerlo, estaba con su estilo de chico cool, y yo amaba ese estilo.

Me acerqué por detrás y cuando llegué lo abracé por la espalda y le besé la nuca, ¡Oh, como deseaba hacer eso!, se sobresaltó y me miró y sonrió.

-Hola - dijo mientras que yo me sentaba a su lado-

Iba a responderle pero él me tomó e hizo que me sentara en sus piernas.

-Ahora si - Besó mi mejilla y yo me sonrojé- Yo te quiero y tu me quieres, ¿Verdad? -asentí- Pues creo que entonces deberíamos hacerlo oficial, ¿No crees? -estaba sin palabras así que solo asentí- Selena Victoria Fickman, ¿Quieres ser mi novia?...

Oh, esto no me lo esperaba ... o quizás sí.. No sé, una sonrisa alumbró mi rostro pero se desvaneció rápidamente al recordar que me tendré que ir.

-Austin , yo ... lo ... lamento pero... - ¿Por qué no puedo hablar?
-Si es por Rob, no te preocupes yo puedo hablar con él...
-No, no es por él... es que...
-Selena -me interrumpió- hace mucho tiempo atrás yo tenía una novia, Eunice. Me enamoré perdidamente de ella, de su simpleza y su inocencia -suspiró, al parecer se le hacía difícil hablar sobre eso- cuando llevábamos unos seis meses de noviazgo.. ella... ella simplemente desapareció, mi corazón se hizo trizas y ella nunca más apareció, con el tiempo empecé a ser la persona que conociste, la que fuma marihuana, la persona que anda de fiesta en fiesta y aunque nunca descuidé mis estudios sé que eso no me hacía bien -me miró a los ojos y me perdí en ellos mientras que mi corazón se aceleraba- pero un día apareció en un pasillo peleando a golpes con mi prima, una chica rubia de hermosos ojos cafés claro que era todo lo contrario a Eunice -sonrió- pero que me volvió loco aun más que aquella chica que desapareció, ya no necesitaba un Faso para sentirme bien, bastaba con su presencia... Las fiestas no eran necesarias para mejorar mi ánimo, con tan sólo una sonrisa de ella mi día, o incluso mi semana se alegraba, la simpleza de aquella chica llenó mi corazón de una manera en la que no esperé que nadie hiciera...

No aguanté más, lo abracé y lo besé, ¡Dios! ¿Cómo me dice esas cosas? Mi corazón se aceleraba después de cada palabra pronunciada por él, y mis mejillas deben estar más que rojas.

-Austin yo si quiero ser tu novia, pero no puedo, me voy de la ciudad...
-¡¿Qué?! ¡¿Por qué?! -preguntó mirándome sorprendido y triste a la vez-
-Con mi hermana hicimos un trato y si yo me metía en problemas nuevamente me iría con ella por un par de meses...

Sus ojos quedaron mirando al vacío, pensé que se había enojado así que intenté bajarme de su regazo, pero no pude, sentí sus brazos apretándome contra él.

* * * *

Estaba ordenando mi maleta, mañana me iría con mi hermana, Rob me llevaría al aeropuerto, Amaya ya empezó a hacer los trámites para la transferencia de instituto, y Rob ira pasado mañana al instituto para seguir con la transferencia.
Miro mi celular y hay un mensaje de Austin.

Te quiero mucho, que nunca se te olvide, mañana no iré al aeropuerto, no creo poder dejarte ir. Austin ♥♡♥

Simplemente SelenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora