Capítulo 7

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Más amargada y sensible no pude haber regresado de mis vacaciones, cero descansada y sin ánimos de subirme a un avión, lo único que me hacía sentir bien era que íbamos a estar cerca de muchos fans y eso me distrae y me recarga las pilas de energía. Pero antes de viajar fuera del país, tenía que afrontar algo, ver a Poncho con Claudia.

Si por mí fuera jamás me hubiera parado en ese teatro, nada más por que a Christian lo amo y necesitaba verlo en escena, era su noche. Iban a ser unas cuantas horas, por supuesto que iba a poder lograrlo, lo único que tenía que hacer era sentarme lejos de ellos, concentrarme en el escenario, felicitar a mi hermano y salir lo más rápido posible de ese lugar. Fácil.

Ja!, pero que equivocada estaba, todo estuvo de mal en peor, el teatro estaba lleno de fans y de prensa, tenía que poner mi mejor sonrisa, no dejé de buscar a Poncho con la mirada, tenía casi una semana sin saber de él, eso es demasiado, y más cuando a una la tienen acostumbrada a estar pegados casi las 24 hrs. del día. Moría de ganas por oír su voz, que me dijera que todo había sido un error y que ya no andaba. Pobre ilusa. Durante la función lo vi de reojo, tenía su mano recargada en la pierna de Claudia, y eso fue lo que necesité para agarrar valor, fue un click, en un instante pasé de quererlo a odiarlo (por enésima vez en esos días). Arriba del escenario no quería ni sentirlo cerca, me quemaba, intentó abrazarme y me moví sin voltearlo a ver, de todas maneras él se acercó a mi oído, me dijo palabras en bajito que me pusieron la piel chinita.

"Te extrañé Any"

¿Cómo se atrevía a tocarme o hablarme delante de ella? Yo no podía olvidarme que la tipa estaba ahí sentada entre el público, me sentía tan conciente de su presencia, y eso sólo me hacía rechazar más a Poncho. Además que pretendía diciéndome eso?, creyó que por unos días que no lo vi ya las cosas iban a ser como antes?, nada sería como antes, así como yo tenía que afrontar la situación, él también iba a tener que entender que perdía cualquier derecho que tuviera sobre mí. Ya no más coqueteos ni tampoco toqueteos, ya no más consolarte ni confortarte en las noches. Ya tenía a otra que lo hiciera. ¿Y entonces ahora que éramos?

¿Es posible pasar de amigos a ser amigos con derecho y luego volver a ser amigos sin derecho? Que situación tan más incómoda, se sentía una tensión impresionante en el grupo. Nadie sabía ni que decir, ni cual bando tomar. En las horas de vuelo a Rumania volvía a cambiar de sentir con respecto a Poncho, ya no lo odiaba como una noche antes, pero me invadía una tristeza inmensa. Sólo verlo u oírlo me provocaba ganas de llorar, lo tenía cerca pero como si lo tuviera lejos, lo extrañaba, me sentía tan confundida. Y él no decía nada, no sabía como portarse conmigo. Poncho es orgulloso, y no iba a estar aguantándome tantos rechazos, se portaba distante, nervioso, quiero pensar que se sentía culpable.

Tuvimos presentación en un programa donde aproveché para desahogarme un poco y de pasó tirarle bastantes indirectas, que más bien fueron muy directas. Todo es culpa de lo voluble que he andado estos días, o tal vez fue sentir a nuestras fans tan cerca lo que me hizo darle un golpe bajo, preguntarle por Las Traumadas. Sabía que con eso él entendería perfecto lo que trataba de decirle. ¿Ahora que somos? ¿Qué va a pasar con todo?

Y vaya que captó el mensaje. Lo primero que hizo fue decirle a Pedro que las parejas "falsas" formadas para el grupo tenían que acabar. La gente estaba tomando las cosas demasiado en serio y eso le afectaba en su vida personal. Lo odié. ¿Esa era su respuesta? ¿Llevarnos de encuentro a los fans? Perfecto, haríamos lo que él quisiera. Y el primer paso....no más besos en lo conciertos. Pero antes algo tenía que quedar bien claro.
Esto no era mi culpa.

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