Capitulo 6

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Perdón si tiene algún error de caligrafía, pero me da flojera revisarlo, mañana checo y corrijo los errores.
Nico:

Esa estupida manía se fue.

-¿Y ____(tn)?- me pregunto Jannia, cuando había volteado hacia atrás.

-Emmm... Digamos que...- trate de pensar en algo.

-¿Que hiciste Di Angelo?¿la echaste, la molestaste y se fue?- preguntó Luca.

-Se tuvo que ir ¿si? Yo no tuve nada que ver- mentí, no quería que me vieran como un monstruo.

-Que mal, me hubiera gustado platicar un poco mas- dijo Jannia.

-Yo quería saber si estudia pintura- comento Luca.

-¿Pintura?- pregunte confundido, ella no da ningún indicio de estudiar pintura.

-Si, parece que siempre usa overoles y llevaba un pañuelo manchado de pintura roja en su muñeca- explicó Luca.

-Si... Pintura, seguro estudia eso- murmure yo.

-¿Vamos a tomar un café?- preguntó Jannia- conozco uno muy bueno cerca de la escuela.

-Claro, para despabilarnos- dije yo.

-Esta bien, solo porque Nico va- dijo Luca.

-¿Estas diciendo que si no fuera Nico no fueras?- preguntó Jannia.

-Pues claro, tu irías y fastidiarías todo- Jannia arrugo la nariz, ese gesto me recordó a la manía.

-Eres un idiota- dijo Jannia.

-Y tu una retrasada- contestó Luca.

-Púdrete

-Jodete

-Por mi muérete

-Vete a la mierda

-Chicos paren, deberían de dejar de pelear- los regañe.

-El no podría aguantar un día sin insultarme- bufo Jannia.

-¿Eso es un reto?- preguntó Luca.

-Okey, el primero en insultar al otro le paga 50 euros al otro- dije yo, esto seria divertido- durante todo el lunes.

-Hecho- dijeron ambos- prepárate para perder, Carboni- dijo Jannia.

-No seas tan apresurada, prepárate para insultarme- replicó el.

-Ya chicos, vamos al café que dices Jannia, antes de que anochezca- ella asintió y empezamos a andar.

~Una hora más tarde~

Llegue a mi casa cuando las primeras estrellas ya estaban brillando. Entre y observe la oscura sala, voltee a ambos lados y no vi nada, escuche algo en mi habitación. Camine sigilosamente a esta y entre sin hacer ruido, escuche la suave melodía de "Dime que me has amado" de Kusa, la manía estaba sentada en mi cama, con mi ¡Pod entre sus fantasmagóricas manos, algunas lagrimas cayeron de su rostro, desvaneciéndose en el aire. Reproducía la canción una y otra vez, como si quisiera que se quedase grabada en ella. Cerro los ojos y suspiro.

-Nico, se que estas ahí- susurró ella, su voz estaba quebrada, pero ella se esmeraba en que no sonara así.

-¿Como lo sabias?- pregunte, entrando.

Ausente (Nico Di Angelo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora