Igualita a ella

Cap 1

NARRA JULIETA

Sonó el despertador y entendí que ya era hora de comenzar mi día nuevamente, me levanté, tome un baño y baje a desayunar con la computadora en la mano para ver si había alguna noticia de mis ídolos, esa era mi rutina de todos los días, algo patética a decir verdad, pero bueno. Consideraba a Carina Zampini como mis más grande idola, habían más, claro, pero nada en el mundo como ella, estaba al tanto de casi todo en su vida, o eso creía al menos. Deje la compu sobre la mesa y apreté el botón para prenderla, mientras esperaba a que pasara me hice un café bastante cargado para luego sentarme a buscar la razón para definir mi humor durante el día, y si, dependía de ello.

Casi como sin querer me encontré con el mayor milagro de mi vida representado en u a página web:

"¿NO VIVIS EN ARGENTINA Y QUERES CONOCER A CARINA ZAMPINI? Participa del concurso."

Acababa de tomar un sorbo de café el cual escupí en espontáneo mientras me apresuré a entrar en la pagina. Y se trataba ni más ni menos que de un concurso para seguidoras de Zampini, como decía el título, que no viviesen en Argentina y que pudieran conocerla. Era muy repentina la noticia y el viaje tendría todo pagó, pasaje, hospedaje, comida, transporte, todo, era raro pero parecía estar en fuentes confiables. Llamé a mi mamá y le comenté, mamá sabía cuanto amaba a aquella "extraña" y por ello no dudó en autorizarme, aunque suponiendo ya que no se me fuera a dar. Hice el procedimiento para anotarme en tiempo récord de la emoción que estaba manejando, mama me alentó en caso de no ganar, ya que seguro serían muchas personas en anotarse. En mi pantalla solo apareció un cartel que decía que si ganaba se contactarían conmigo, y no me podía dejar de apreciarlo, era tonto, pero de alguna manera, me hacía sentir cerca de mi sueño. Me quedaba esperar y rezar para poder gana.

NARRA SEBASTIAN E

Lunes por la mañana, me encontraba durmiendo plácidamente soñando con el amor de mi vida, aquel que a medias no pudo ser y de quien me desencuentro por momentos. Para sacarme de mi hermoso sueño sonó el celular, era una llamada de Gabriel, el hermano más chico de Carina Zampini, me ha la vuelto muy amigo de el y su confidente, siempre que pasaba alguna cosa con ella el llamaba para pedir algún consejo. Esta vez era para contarme que ella no se encontraba bien, nuevamente, había recaído por lo que yo ya sabía, porque hoy se cumplían exactamente 17 años de aquel arrebato que la marcó de por vida.

Cuando cortó Gabo, quede preocupado ¿Que podía hacer yo para ayudarle? Si lo único que la salvaría de su depresión sería encontrar a su hija, aquella hija que le arrebataron, se hacía imposible ponerse esa meta, venían buscándola hace ya 17 años, y nunca pudieron encontrar su paradero. Solo se sabía su nombre, Julieta, o al menos al momento de nacer así era, Carina le había dado aquel nombre el 4 de septiembre de 1998. También sabemos que fue adoptada a sus 7 meses en un hogar al norte, y luego su familia adoptiva salió del país. Aunque me lo planteara, no lograría nada.

NARRADOR EXTERNO

Carina había pasado un momento difícil en su vida, ya que año antes de tener a su hijo Manuel, cuando tenía 22 años, dio a luz a una pequeña el 4 de setiembre, con unos ojos miel grandes y brillantes y pelo castaño claro que casi no se le notaba, pero a los 5 días de nacida, se la arrebataron de sus brazos una noche, mientras dormía, ella tiene sospechas de los culpables pero si  pruebas, incluyendo al padre de la niña  a quien jamás volvió a ver . Desde entonces Carina a luchado por encontrar a su hija , sufriendo cada 4 y 9 de Septiembre por aquella pequeña perdida, de la cual no se sabía ni que realidad le había tocado vivir, si es que seguía con vida...