𝗧𝗛𝗘 𝗚𝗥𝗘𝗔𝗧 𝗪𝗔𝗥 ━━━ Carl Grimes.

𝟴𝟱. commonwealth

FINALMENTE LOGRARON APAGAR
EL FUEGO DEL MOLINO aunque ciertamente tenían más problemas que soluciones. Había sido un día horrendo para todos y tan solo querían descansar.

El sol ya se asomaba sobre ellos y el alivio volvía a ellos después de estar aniquilando caminantes por horas y lideando con una espantosa tormenta.

Rylie veía desde encima de los muros el perímetro con una mano vendada luego de que Enid le insistiera.

—Qué silencio.

Rylie asintió ante la afirmación de Jerry y sonrió al ver a lo lejos desde el muro como Carl volvía junto al resto. Pocos, pero volvían.

—¿Dónde están los demás?

Por lo visto no había sido una misión tan sencilla como esperaban.

Al llegar quemaron algunos cuerpos.

Rylie ignoró eso y solo se centró en acercarse a Carl para envolverlo en un reconfortante abrazo.

—¿Qué pasó?

—Se complicó un poco todo, pero estamos bien—murmuró Carl separandose de Rylie y besó con delicadeza su frente —. ¿Cómo les fue mientras no estaba aquí?

—Mal se queda corto, diría que horrible.

El muchacho hizó un gesto entristecido que fue reemplazado por una sonrisa al ver a sus hijos correr hacia ellos.

—¡Papi, volviste! —exclamó Malory abrazando la pierna de Carl y él solo se agachó a su altura —. Papi, no quería que nada malo te pasará.

—Tranquila, Lory. Estoy bien, cariño.

—Ya no nos dejes, por favor —pidió la mini ojiazul aferrandose al mayor con firmeza—. Te extrañamos.

—No me iré más, ¿contenta?

—Demasiado.

Rylie sonrió mientras Charlie se acercaba a ella y la rubia lo abrazó por los hombros amorosamente.

—¿Y a su tío nada de abrazos?

La voz de cierto rubio llamó su atención. Enid iba a su lado y Gracie revoloteaba a su alrededor euforica.

Rápidamente Malory saltó a los brazos de Rowan como si nada ganandose un abrazo cálido y palabras bonitas.

—Quita hijas.

—Quita hermanas —murmuró Rowan con picardía mientras abrazaba a Malory.

—¿Y el señor Negan?

Carl se giró a ver a Charlie, quien lucía algo decaído.

—Se fue, no regresará aquí —anunció Daryl al menor mientras repartía un par de manzanas frescas.

Rylie abrazó a su hijo sabiendo el motivo de su desanimo mientras Carl les pasaba una manzana a los menores.

—Hace mucho que no comía una de estas —comentó Rylie tratando de no hacer caras al comersela con cascará.

—Trae acá. Yo la pelo.

Rylie le pasó la dichosa manzana a Carl y él empezó a quitarle la cascara con una pequeña navaja.

A unos metros suyos algunos festejaban por su botín mientras otros lucían más que tristes por la perdida de los suyos.

—¡Oigan, tenemos compañía!

Rápidamente Maggie, Daryl y Rowan corrieron al muro con Jerry a ver de quien podría tratarse.

—¡Atención, estén listos!