Hija de Dioses

En el instituto de vuelta

RAVEN

Ya había pasado un mes del "pequeño incidente" que tuvimos mi querido Dimitri, Zero y yo pero gracias al cielo y al infierno que ya se estaban llevando mejor.

Hoy era martes y me tocaba informática a primera hora, con lo cual me tenía que cambiar de aula. Y estar al lado de la clase de Zero.

Me levanté como siempre, algo más temprano de lo habitual, para poder prepararme y vestirme que tardaba un poco. Como mi buena costumbre que tenía, me lave la cara, que aunque era algo vaga lo tenía que hacer y así evitando que mi pelo pelirrojo se mezclara con el agua para no mojarse ya que hoy me lo iba a alisar. Después me pinte sólo un pelín de raya en las pestañas para que parecieran más negras y una vez terminado de preparame la cara seguí con el cuerpo. Cuando terminé con la plancha mi pelo quedó lacio y brillante por la espalda, como una cascada de lava ardiente, me encantaba. Me quedaba media hora para salir hacia el Instituto asi que me puse unos jeans grises cortos que parecía que estaban rajados y una camiseta sin tirantes de color rojo con rayas horizontales blancas.

Mire por la ventana, estaba algo gris para mi gusto y la verdad eso no me animaba para nada. Cuando me sentía sola e incomprendida miraba al sol y éste parecía quitarme los problemas que tenía y me preocupaban. Pero no era momento de pensar estas cosas sino ir al Instituto que como ya me pasó el primer día que llegué tarde y no puede volverme a ocurrir o sino tendría un castigo.

Le di un beso de despedida a Michael

-Adios, luego te llamo para que me recogas dije ya abriendo la puerta

-Raven, hoy no voy a buscarte

-¿Por? dije extrañada, desde que venimos siempre me recogía a la salida aunque tubiera séptima.

-Mm tengo cosas que hacer así que no podré, ¿está bien?

-Vale... vale, tampoco hacía falta ponerse así. Que raro estaba mi tío, pero en fin no tenía tiempo para preocuparme ahora...

Salí de casa a las ocho, una hora en la que llegaba a tiempo al insti aunque pasara lo peor llegaría y la verdad eso me venía muy bien por si me ocurría algo. Cerré la puerta cuidadosamente para no despertar a ningún vecino ya que a estas horas deberían estar dormidos, y como de costumbre Dimitri estaba esperandome con una mirada que nunca sabía interpretar. Si podía saber lo que la gente decía o pensaba mediante las caras pero está el curioso caso de que con Dimitri y Zero no funcionaba y si soy sincera no me gustaba eso para nada, pero en fin no me iba a derrumbar por esa cosita de nada ¿verdad?

-Buenos días princesa, ¿que tal has dormido hoy?. Desde hace algunos meses le había dado por llamarme princesa y si a lo mejor pensais que es mazo de romántico y eso, pero yo no soy así y siempre le respondía con un gruñido a lo que su respuesta le hacía gracia

-Grrr, te he dicho que no me digas eso, me produce vómitos. -Vale, vale tigresa jajaja vamonos os sino llegaremos tarde anda.

Y dicho esto salmos al exterior, lo más rápido que pudimos, sin apenas hablar y con la mirada fija en el horizonte y la mente en blanco.. o al menos yo sí. Llegamos puntuales a clase, la gente estaba en clase y fuera de su sitio es decir hablando unos con otros. Yo simplemente entré y me olvidé por completo de con quien habia llegado, él se fue con sus amigos y yo con las mías. ¿Triste? bueno depende como lo mires,a mi en especial no me importaba nada, Dimitri estaba con su chica y sus amigos pasandoselo fenomenalmente y yo con Zero que se había vuelto muy importante para mí e incluso me atrevo a decir que más que con Dimitri ya que con él casi nunca hablabamos en profundidad de nuestros temas simplemente nos manteníamos en el tiempo, los examenes y todo en general pero sin hablar de cosas personales o cosas del estilo.