Harry, Harry Styles me está mirando, y yo a él. No despega su mirada de la mía lo cual también me es imposible a mí. Se me pusieron los vellos de punta, ¿Pero por qué me pongo así? Bueno, la verdad no sé como descifrar lo que transmite Harry con su mirada pero eso es exactamente lo que me pone de nervios. Escucho una voz al fondo que dice mi nombre, pienso que es Harry pero el tiene su boca cerrada, aún mirándome y muy serio. ¿Por qué siquiera aún me sigue observando? Y ¿Por qué siquiera yo lo sigo observando a él? Es imposible quitar mi mirada de sus ojos, los ojos color verde esmeralda más bonitos que he visto en mi vida... ¿Pero qué cosas digo? Me estoy enfermando, si debe ser eso y también por eso debo escuchar una voz llamándome..
-¡Jessica!- grita mi amiga haciéndome sobresaltar y poner mi atención en ella- ¿Qué te ocurre? Hace más de un minuto estoy llamándote y no me contestas.
-Lo.. Lo siento, estaba distraída-
-¿Oh enserio? No me di cuenta- dijo con sarcasmo. Levante los hombros en forma de disculpa- En fin, te estaba preguntando que ¿Qué harás mañana?-
-Ah, no lo sé ¿Por qué?- miré de reojo hacia la mesa en la que se encontraba Harry pero ya no estaba.
-Porque no quería quedarme sola en mi habitación así que ¿Podría pasar el día contigo?- hizo un puchero para que me convenciera.
-Claro ¿Por qué no podría?- ella sonrió.
-No lo sé, tal vez querías estar sola..- sé quedo callada mientras observaba detrás mío- ¿Harry?-
Fruncí el ceño, ¿Acaba de decir Harry?, me volteé en mi lugar para comprobar si era que estaba Harry detrás mío y si, si estaba él ahí, observándonos a los dos.
-Oh hola- dijo él al darse cuenta que Liz lo había llamado- ¿Cómo están?-
-¡Muy bien! ¿y tú?-preguntó mi amiga efusivamente, rodé los ojos.
-Bien gracias- me miró y yo esquive su mirada- Que casualidad encontrarnos, no las había visto- sonrío. Maldito mentiroso, claro que nos había visto antes, se quedo como un maldito acosador mirándome.
-¡Si! Pero qué casualidad- siguió hablando mi amiga con su fastidiosa voz tratando de sonar amable- ¿Por qué no te sientas con nosotras?-
¿Qué? No no no no y no.
-No creo que sea buena idea- dijo él al notar mi cara de horror- No las quiero incomodar-
¡Gracias! Ahora vete.
- ¡Ay por favor! No digas tonterías- Liz agitaba sus manos y luego centro su mirada en mí- Jessie pásame las bolsas- dijo ella extendiendo su mano. La mire en forma de súplica para que no lo hiciera sentar a mi lado, y lo único que logre fue una mirada severa de mi amiga, no me quedo de otra que hacerle caso.
Maldita sea.
-Perdona- Harry me susurró de manera casi inaudible, lo mire y voltee mi cara de inmediato rodando los ojos y bufando.
-Bueno y ¿Cómo estás Harry, qué hacías por aquí?- preguntó mi amiga "Mostrando interés".
-¿Es enserio?- pregunté brusca llamando la atención de los dos- ¿Lo invitas a sentarse para solo preguntar cómo está? No tienes tema de conversación y no sé cuál es tu afán de agradarle- solté, así sin más.
Liz me fulminó con la mirada y yo la reté alzando una ceja. Era verdad, ella tenía una gran obsesión de agradarle a todos, incluido el presente a mi lado. Me parecía divertido y tonto que lo invitara a estar con nosotras, sabiendo ella que Harry no me agrada, y también de que no tuviera nada que decir e hiciera esa estupida pregunta que todo el mundo utiliza para "mostrar interés".
-Bien, he estado bien- contesta Harry ignorando lo que dije unos segundos antes.
-¡Oh me alegro mucho!- volvió Liz a su lado sociable.
Después de eso nadie dijo nada. Por eso exactamente me parecía una estupidez la forma de entablar una conversación y mucho más con Harry, que a excepción de mí también se le hacía incomodo sentarse a darnos compañía.
Liz me mira y se que me quiere decir algo, su mirada me lo dice.
-¿Qué?- le respondo brusca, ganando una mirada matadora de mi mejor amiga. Ruedo los ojos- Bueno, estoy disfrutando mucho de su conversación pero los dejaré solo...-
Frío, siento frío en mis pantalones e inmediatamente observo hacia estos. Están mojados, miro hacia mi derecha y el líquido que contiene el vaso de Harry es el que ha mojado mis pantalones.
- !¿Pero eres idiota o te haces?!- le grito, el me mira sin ninguna emoción en su rostro, mientras que Liz tapa su boca y me mira asombrada.
- Lo siento- dice esta vez fingiendo disculpa- No fue intencional, se me volteo el vaso al quererlo coger- miente.
- Te diré qué pasó. Eres un idiota que me hace la vida imposible, vienes aquí a arruinarme el día, luego riegas tu estúpida bebida sobre mi ropa y te haces el pendejo diciendo que se te cayó ¡Para que me crea tus malditas disculpas!- Presiono su pecho con mi dedo indice, añadiendo presión en cada palabra.
- Pe..pero, enserio lo sient..-
- ¡Callate!- le interrumpo.
- Jessica- me llama Liz con voz severa- Callate que todos te están mirando. Fue sin inteción lo que ocurrió, no tienes por qué reaccionar así, calmate- Me mira con cierto disgusto haciendo que me enfade más.
- ¡Bien!- Exclamo silenciosamente- Me voy- alzo mis hombros y manos, cojo mi bolso y me largo sin despedirme.
Detallo como todas las personas que hay cerca me miran, no hago más que ignorarlas y dirigirme hacia mi auto. Sé que vine con Lizzy y que tendría que llevarla al campus, pero en este momento me importa un rábano todo, ella puede cojer un taxi solo.
Entro al auto y arrojo el bolso a la parte trasera del auto, cierro la puerta y observo mis piernas. Maldito Harry, regó su bebida sobre mis pantalones favoritos y por el color y olor, puedo deducir qué es jugo de uva. Más le vale que quite la mancha o sino lo obligaré a que me compre unos nuevos, después de haberle roto la nariz.
