Un poco de Felicidad; Kaisoo

Epílogo

Cuando Kyungsoo abre los ojos es la mañana se revuelve en la cama sin querer levantarse, y tapa su cabeza bajo la sábana para impedir que la luz del exterior lo moleste. Lo primero que cruza su cabeza es estúpido Jongin. Porque nuevamente olvidó cerrar las cortinas de la habitación antes de acostarse.

Estira sus brazos y piernas reluctante, destensando sus músculos para luego relajarlos y ahogar un bostezo. Asoma sus ojos por sobre las sábanas y ve una mañana soleada y el paisaje de edificios y más edificios con verde esparcido como pequeñas manchas. Kyungsoo sonríe, es una linda mañana.

Al levantarse lo primero que hace es verificar la hora, y reírse de la gran cantidad de estas que durmió, porque ya va a ser la momento de la comida. Jongin le ha estado pegando sus hábitos de dormir demasiado los últimos meses, o quizá tenga que ver con el hecho de que se quedan despiertos hasta muy tarde haciendo, bueno, es sabido qué hacen dos personas que se aman hasta tarde.

Kyungsoo recoge la ropa tirada en el suelo, sucia, para echarla en una carga de la lavadora, el sonido de la ducha llega hasta sus oídos cuando abre la puerta de la habitación. Jongin debería estar en el trabajo.

-¡Jongin, ¿por qué sigues aquí?! -grita a través de la puerta y la golpea.

Puede escuchar la risa de Jongin dentro de la ducha, rebotando entre las paredes del baño.

-¡¿Me estás echando?!
-¡No! ¡Pero es tarde! -Kyungsoo abre la puerta del baño para no tener que seguir gritando. La cortina de la ducha está cerrada y por un momento se sorprende por haberse desilusionado de no ver a Jongin. Sin nada.

-Me tomé el día libre, Soo. ¿En serio no sabes qué día es hoy? -habla Jongin desde el otro lado de la cortina.

-Claro que sí.

Kyungsoo entonces, rendido, cierra la puerta y suspira largamente.

-¡Te amo! -escucha mientras camina hacia la pieza de al fondo donde se encuentra la lavadora y rueda los ojos.
-¡No ruedes los ojos!

Kyungsoo se ríe.

Mientras saca las cosas de los bolsillos del pantalón de Jongin, se sorprende de cuánta basura puede llevar sin que se note. Hay boletas dobladas, la lista de compras de hace dos semanas, ¿un dulce de leche?, el cambio de lo último que compraron ayer -leche y cereal, petición de Kyungsoo-, más recibos, las llaves del apartamento, su billetera y oh genial, Kyungsoo descubre su sorpresa de aniversario, porque acaba de sacar dos boletos de avión para quién sabe dónde de los bolsillos de Jongin con fecha de ese día y con hora para entrada la noche.

Con cuidado de no perder los pasajes ni arrugarlos, abre la billetera de Jongin para dejarlos allí. A punto de cerrarla, sin embargo, su curiosidad se apodera de sus manos y se pregunta qué tendrá su novio en su billetera.

Hay varias tarjetas, dinero, obviamente, y de un bolsillo cerrado saca varios papeles. Los ojea rápidamente y se da cuenta de que son las entradas de cada una de las películas que fueron a ver alguna vez al cine. Una sonrisa tonta se posa en los labios de Kyungsoo -una enamorada. Deja todo en su lugar y ve la última división. Hay una foto pequeña de él, impresa, y rueda los ojos, pero de todas formas ríe un poco. Hay otra también, de los dos, y Kyungsoo decide pedirla prestada, para guardarla en su propia billetera. Después le dirá a Jongin.

Como si Jongin fuese a enojarse por algo así.

Hay una esquina de papel que le llama la atención, es una hoja de papel doblada en varias partes, y Kyungsoo la desdobla con cuidado.

Al abrirla, siente cómo su interior se derrite enternecido.

Kyungsoo es capaz de:

Sonreír de verdad: a cada minuto.

Reír: con mis historias y estupideces.

Fruncir el ceño: muy seguido.

Sonrojarse: demasiado.

Llorar: es un llorón, mi llorón.

Relajarse: en mi hombro, por supuesto.

Suspirar: ¿cada vez que me ve?

Disfrutar de un lindo día: juntos, todos son lindos días.

Lista de emociones/sentimientos:

Miedo: adorablemente sí.

Angustia: lamentablemente sí.

Ira: por mi culpa.

Dolor: lo siento.

Tristeza: lo siento, de nuevo.

Celos: golpéame, Soo.

Odio: creo que me odió alguna vez.

Amor: ¡Mucho amor! ¡Un montón!

Felicidad: ¿Si? Yo tengo demasiada.

¡No hay que olvidar agregar más cosas a la lista!

Kyungsoo ríe ligeramente, con deseos de llorar porque sí, es hermoso que Jongin aún conserve eso. Pasos se acercan por el pasillo y se voltea para ver a Jongin mojado con una toalla envolviendo su cadera.

-No escondí bien mi regalo.

Jongin sonríe, Kyungsoo sonríe.

Y está escrito ya en la vida de Kyungsoo, que no importa más la perspectiva, o el punto, o el ángulo exacto desde el cual pueda disfrutar cada mañana, tarde y noche. Ya no hay variables de las que dependa ni condiciones. Porque con Jongin, no importan más perspectivas o puntos o ángulos; con Jongin, no importa desde dónde vea su vida, porque todo sería únicamente felicidad.

☁ Fin ☁